Choses de la vie (Lukloe) [TERMINADA]

Capítulo 15

- en verdad lo lamento, Chloe...

La rubia negó con la cabeza.

- no tienes nada que lamentar, Sabrina - respondió la Bourgeois - a veces las cosas no funcionan como uno las planea...debería haber aprendido de eso cuando me divorcié de Kim...- soltó un suspiro - pero en serio, creí que esta vez funcionaría...me ilusionaba pensar en ello

La pelirroja la miró con algo de lástima, después de todo, sabía lo difícil que había sido para la rubia haber perdido al pequeño bebé que se formaba en su vientre, haberse divorciado de la persona que creyó sería el amor de su vida. Haber asistido a innumerables terapias para superar todo ello e incluso fue tanto lo que le había afectado, que había decidido irse por un tiempo a otro continente para sanar.

Además la Bourgeois le había hablado con tanta ilusión de Luka y de Emma que le dolía casi tanto como a ella que las cosas acabaran de esa forma.

Se acercó a la rubia y la envolvió con sus brazos para consolarla, mientras ésta se permitía llorar sin pudor alguno.

- todo se solucionará...- decía con calma mientras le acariciaba el cabello a su amiga - bien sabes que luego de la tormenta, sale el sol

La rubia asintió levemente, mientras se abrazaba a la pelirroja con fuerza.

Luka caminaba nervioso trás el hombre que inspeccionaba cada rincón de su casa. Como si buscase algo que anduviera mal, mientras anotaba en su pequeña libreta.

- ¿La vivienda es alquilada o es propia? - preguntó

- alquilada, aún no he podido reunir dinero suficiente para comprar una definitiva - respondió el azabache

- ¿Y cuál es su salario mensual?

- ¿Disculpe? - preguntó confundido

El hombre acomodó sus lentes antes de dirigirse a él.

- le explicaré, señor Couffaine. Cuando existe disputa por la custodia de un menor se deben tomar varias cosas en cuenta, ya que la prioridad es el bienestar del menor. Las necesidades de la niña en cuestión es lo más relevante - explicó el hombre - si usted recibe 400€ o si recibe 1000€ es una diferencia que tiene gran influencia en la decisión de un juez. Sumado a eso,que la vivienda en la que reside no sea propia y además que no está en el mejor estado...- hizo una mueca de desaprobación - le quitan varios puntos, señor Couffaine

- es broma, ¿Verdad? - preguntó el Couffaine tomando su cabello con frustración, a lo que el hombre alzó una ceja

- ¿me veo como alguien que le gustan las bromas, señor Couffaine? - cuestionó en respuesta aquel hombre a lo que el azabache negó - bien, mi trabajo aquí ha concluido por ahora - dijo el hombre anotando unas cosas más antes de guardar la libreta

- ¿Y ahora qué sucederá? - preguntó con preocupación el Couffaine

- verá, toda la información recopilada será enviada como evidencia del caso al juez y él analizará todos los nuevos datos para tomar la decisión que más le convenga a la menor

- ¿Cree que yo...?

- seré sincero - interrumpió al azabache - visité también el domicilio de la señorita Lee, y siendo totalmente honesto con usted, la balanza se inclina hacia ella en estos momentos - sentenció mientras acomodaba sus lentes - lo mejor que puede hacer es intentar llegar a un acuerdo para pasar tiempo con su hija

El Couffaine miró con confusión al hombre frente a él.

- ¿Me está diciendo que perderé a mi hija y no puedo hacer nada al respecto? - preguntó incrédulo - ¡¿Que no es suficiente todo lo que he hecho por ella?! ¡¿Que hay de todo lo que he sacrificado?! ¡¿No vale para nada?!

El hombre frunció su ceño y volvió a acomodar sus lentes.

- señor Couffaine, mantenga la calma

- ¡¿Cómo puede pedirme que me calme?! ¡Tal vez si supiera lo que significa...!

- me queda claro que no entenderá razones y no me pondré a discutir con usted - sentenció con severidad - esto sólo demuestra que no tiene manejo de la frustración, sería bueno que comenzara a ir a terapia si al menos quiere que le permitan ver a la niña

- la "niña" tiene nombre, se llama Emma, Emma Couffaine

- señor Couffaine, puede tacharme de insensible si así le parece, pero evito involucrarme emocionalmente con los casos que debo seguir, eso le quitaría profesionalismo a mi trabajo. Insisto que mi recomendación es que asista a terapia, aún tiene unas semanas antes de la nueva audiencia y puede incluso negociar la custodia compartida. Que tenga buen día

Sin más, el hombre dió media vuelta dejando al azabache aún más frustrado por toda aquella situación.

- te ves mejor - dijo Sabrina con una sonrisa

- me siento mejor - respondió la rubia esbozando una pequeña sonrisa - gracias por permitirme estar en tu casa todo este tiempo

- amiga, eres bienvenida a quedarte cuanto consideres necesario - sonrió - pero que no sea eternamente que con Delmar también necesitamos algo de privacidad - bromeó la pelirroja

- prometo que mañana comenzaré a buscar algún alquiler

La pelirroja negó.

- ¿Estás segura de que quieres quedarte definitivamente en New York?

- la verdad, no...- respondió bajando la mirada

- amiga, quiero que pienses en lo que realmente quieres hacer de tu vida. No lo decidas ahora ya, pero piénsalo detenidamente. Sé que crees que hiciste lo mejor al huír de París, pero creo que a lo mejor te precipitaste...

- ¿A qué te refieres?

- sé que las cosas no funcionaron del todo bien, pero según lo que me contaste parecía ser genuino, tal vez el error más grande que cometieron ambos fue no hablar y no escuchar...ninguno se escuchó realmente y bien sabes que la confianza es algo primordial para que funcione una relación... - dijo la pelirroja tomando el hombro de la rubia - piensa las cosas y decide. Yo te apoyaré en lo que decidas

Ambas se sonrieron y se fundieron en un abrazo. Pero pronto se vió interrumpido cuando el móvil de la Bourgeois comenzó a sonar.

Las amigas se separaron y la rubia contestó aquella llamada.

- necesito tu ayuda

- ¿Félix?