–Siéntate Mirelle– Dice Marck mostrando una sonrisa de obvia falsedad.
Todos (A exepción de Liam y yo) descansaban sobre la típica sábana de cuadros que se usaba para los picnics. Me llamó la atención Hans, tomaba té, algo usual pero no se veía como esa clase de chico que toma chocolate caliente, tiene una manta y toma té.... Todo lo contrario.
La señora Martha nos sirvió té, siempre sonriente y con notables hoyuelos asomando en sus mejillas.
–Voy a buscar algo de pan– dijo levantándose.
–Liam acompañala y de paso preparan algo mas de té que observa– aproximó su taza a su boca y bebió un poco de lo que se encontraba dentro– Ya se terminó.
–Claro– Dijo cabizbajo y desanimado, parece que tenía planes de descansar.
Lo siento Liam, otra vez será.
Al momento en que se dejaron de escuchar las ojas aplastadas por los pasos y un silencio total envolvió el lugar, entré en consciencia de que estaba sola con esos dos. Todas mis alarmas se activaron a no dar más.
¿Te gusta mucho el té eh?
Palabras jamás abandonaron mis labios, temía....
¿Que temes? ¿Que es lo mas retorcido que puede responder a esa pregunta?
Por supuesto, yo misma siempre tenía las mejores respuestas para los mejores momentos.
–¿En que piensas?– Marck como siempre, con sus mejores preguntas.
–En lo bonito que se pone todo en esta época– Acomodé mi cabello tras mi oreja luego de mentir tan descaradamente.
–Eres mala mentirosa– dijo Hans sin titubeos.
Se encontraba recostado boca arriba con sus manos en la cabeza, observaba el cielo, estaba concentrado no pensé que se interesaría en mi respuesta.
Ahora que nos encontrábamos a plena luz del día me permití observarlo más detalladamente. Era de constitución delgada pero bien formado. Su rostro estaba bien definido, labios carnosos levemente enrojecidos, notables pómulos, cabello oscuro, brillante y desordenado, pestañas envidiablemente largas, y sus ojos..... Un color azabache los conformaban, entre ellos resaltaban pequeños casi invisibles pero presentes tonos grises, era como un cristal roto, se veían tan vacíos, tan llenos de nada.
Un chasquido de dedos llegó a mi oído haciendo que vuelva a la realidad.
Eres mala mentirosa.
–Será porque no suelo mentir, desventajas de ser buena persona–Dije victoriosa.
Me mira casi al estallar de risa, no entiendo que es tan gracioso –Entonces ¿Nos vas a contar en que pensabas realmente?
–¿Porqué te gusta tanto el té?
–Que directa– Escucho susurrar a mi "Querido esposo"
–Simplemente me gusta y ya.
–Mientes–imito su vocecilla que, secretamente admiraba.
–Wow, wow, wow.... Admito que estás mejorando.
–¿Me vas a contar o no?
–¿Porqué te interesa?
–¿Porqué esquivas mis preguntas con otras preguntas?
–¿Porqué, tú......lo haces?
–Paren que van a caer en un bucle del que no saldrán por competitivos– Marck rueda los ojos luego de decir tal verdad.
–Sabor a té.
–¿Qué?
–Hay personas que saben a té, esa sensación me encanta– Me dejó peor que antes.
–Retorcido y a la vez....
¿Romántico?
Pareciera como si esa palabra hubiera salido de su labio y no solo algo ficticio.
–¿A la vez que?– Me mira divertido.
–No lo sé.
–Si lo sabes–Reprocha.
–¿Como estas tan seguro?
–Sólo lo sé.
Todo con él era tan.... Raro. A que se refería con eso de que si lo sé, lo sabía, pero no había forma de que lo supiera.
Luego de unos segundos en silencio palabras amenazan con escaparse.
–Romántico.
–Ves como sí lo sabías–Comenta casual, como si no me hubiera provocado una crisis existencial saber el porqué de que supiera lo que pensaba.
Me giro hacia Marck el cual espectaba nuestra escena con la diversión plasmada en su rostro.
–¿Que es tan divertido?
–Tú y él, parece que lo quieres más que a mí, me pondré celoso– Dice con una expresión vacía, como si le importara y a la vez no. Me causaba mucho desconcierto.
Me le acerco suavemente, escucho las ojas crujir, no lo veo pero sé que Hans volteó a vernos.
Beso la mejilla de Hans para disimular y me acerco a su oreja para susurrar....–Sabes que quiero más a esa hormiga que acabo de aplastar que a ti "Cariño"– esta última palabra con cierto....tono especial.
Vuelvo a mi lugar y acomodo mi vestido pastel y vuelvo a sonreir esta vez en dirección a Hans.
–Yo no sé mentir pero tú no eres muy discreto la verdad.
Su cara se torna fría e indescifrable – Mirelle ¿Te doy un consejo que te servirá para toda la vida? No juegues con fuego que te puedes quemar.
Me lo tomé a broma ¿Es una broma no? Solté una risita tímida de nerviosismo.
–Debes tener cuidado.
–¿De qué?
–La pregunta es ¿De quién?
Sé que algo malo está pasando pero él me asusta aún más con sus incógnitas y no me ayuda que me perturbe de esa manera.
–¡Llegamos!– Esa voz dulce fue música para mis oídos.
No mientas, te encantaría haberte quedado más tiempo a solas con ellos.
–El té del señorito– dice Liam mientras le acerca una taza servida a Hans– Y tomen mucho té, que por su culpa me quedé en la cocina mientras ustedes se divertían.
Una carcajada provinente de Hans llama mi atención, creo que todo eso del té era solo para dejarnos a solas, o también puede ser que estoy paranoica.
Debes tener cuidado.
¿De qué?
La pregunta es ¿De quién?
Palabras se repetían constantemente en mi cabeza ¿Que quería decir? ¿Lo decía en serio o solo para asustarme?
No lo sé, todo esto es demasiado, en momentos como este es donde deseas tener el típico amigo homosexual que es el mejor o una amiga psicóloga, no lo sé.
Incógnitas llegaban al resto y se amontonaban, todas sin respuestas e igual de importantes. Tengo la sensación de que cuando obtenga respuestas estas vendrían todas juntas, a resolver todo de golpe para revolver aún mas mi mente.
Espero todo esto sea un mal sueño y despierte en cualquier momento....
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Esto no es un sueño mi querida Mirelle....Este es el capitulo donde mas información eh dado, me estoy ablandando. Muchos estarán con el ¡Se prendioooooo! Pero les digo que aún no a pasao nah.....
Quieto conocer sus teorías, mientras más perversas mas acertadas estarán, pero, les aseguro que no tienen ni idea de lo que está pasando aquí....
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Recuerdos
Romance¿Que pasa si un día pasando casualmente por la calle te encuentras al posible amor de tu vida? ¿Si al día siguiente por un giro del destino se convierte en tu jefe? ¿Si es bipolar e insoportable pero te sientes atraída por el? ¿Si te ves prácticamen...