Capitulo 3

176 9 0
                                    

Entre sollozos y lágrimas rodando por mis mejillas. Aparecieron recuerdos de aquellos momentos en los que creía que todo estaba bien. Y cada vez los sollozos eran más fuertes, era como si mi mente hubiera puesto una película, y viera hasta el mas mínimo detalle de ello. Escuche a Damiana tocar la puerta, y así sacándome de mis pensamientos.

- Paige, lo siento ¿me permites pasar? - dijo algo asustada. - Si Dam, pasa - dije aun sollozando.

Damiana no sabía nada sobre el tema. Nunca se lo he contado a nadie.

- Paige lo siento no era mi intención hacerte sentir mal. - dijo mirándome a los ojos. - lo sé Damiana, perdóname por hablarte así. A veces no mido mis palabras - dije apenada. Damiana me miro por unos segundos antes de hablar.

- Paige sabes que puedes confiar en mí, hemos sido amigas por años. ¿Porque no me dices que es lo que es eso que te atormenta tanto?- dijo mirándome fijamente. Suspire y dije - no es fácil para mi, fue algo que me dolió mucho, a pesar de que ya han pasado algunos años.- dije un poco más calmada. - y además Damiana no se lo he contado a nadie. Es un problema que e cargado yo sola - dije comenzando a llorar. - Paige Rouse, ¡eres loca! Encerrarse en los problemas no ayuda esta Psicológicamente comprobado, ya te lo había dicho - dijo algo molesta - ya lo sé Damiana, pero nunca he hablado del tema. Realmente no me gusta recordarlo. - dije con tristeza. - Como quieras Paige, pero sabes que si decides sacarte eso del sistema, sabes que estoy aquí. Cuando lo hagas te sentirás mucho mejor, ya verás. - Gracias Damiana, No sé que haría sin ti - dije dándole un abrazo. - te prometo que te lo diré cuando me sienta preparada - dije - cuando quieras Paige - dijo.

Me dio un beso en la frente y me dejo sola en mi habitación. Pensé en las palabras que me había dicho, y no es que no confié en ella es que, nunca le he dicho eso a nadie. Es como si fuera un secreto.

Me quede dormida pensando en contarle a Damiana. Ella ha estado con migo durante mucho tiempo y además estudia psicología, y tal vez lo que ella me dijo tenga razón. Necesito sacarme todo esto del sistema.

"Ring, ring, ring" sonó el despertador, marcando las 7:00 de la mañana.

- ¡Dios! Porque amanecerá tan rápido - dije me levante y camine al baño me cepille los dientes y baje a preparar el desayuno.

Pase toda la noche pensando y llegue a la conclusión de que le contare mi secreto.

- ¡Buenos días Dam! - dije al verla entrar a la cocina. - Buenos días señorita Rouse - dijo sonriendo. - amaneció usted de buen humor señorita- dije sarcástica. - algo así - dijo riendo. - como sea, ¿que quieres para desayunar?- pregunte. - tengo ganas de Tostadas Francesas - dijo lamiéndose los labios y frotándose el estomago, a lo que reí. - Muy bien, porque me apetece también - dije riendo

Prepare las tostadas francesas y Damiana preparo una ensalada de frutas. Preparamos la mesa y comenzamos a desayunar.

- Damiana, anoche me quede pensando en lo que me dijiste. Y creo que ya es hora de de sacarme todo esto del sistema, y tu siempre has estado con migo. Eres la persona indicada. - dije mientras echaba un pedazo de fruta a mi boca. - No tienes que hacerlo si no quieres. Sé que nos conocemos hace años y te lo digo por el bien de tu salud mental y emocional, pero no quiero que te sientas obligada. - dijo mirándome fijamente. - lo sé Damiana, pero tienes razón. Que tal si por la noche preparo una cena y te cuento ¿vale? - pregunte. - por mi perfecto, pero ¿no tienes que ir a trabajar? - dijo preguntando - Si, pero puedo salir un poco temprano. Te recuerdo que soy la Dueña. Solo iré a revisar unas cosas - dije despreocupada - Bien, pues nos vemos a la hora de la cena - dijo - perfecto - dije terminando de lavar los platos.

Subí a mi habitación, y entre al baño me cepille los dientes y me bañe. Salí del baño, me puse la ropa interior y escogí un traje color anaranjado de volanta con escote en uve en la parte de al frente, lo combine con unos zapatos punta fina color crema. Me deje el pelo en ondas y me maquille muy natural. Cogí mi cartera del mismo color que mis zapatos y eche en ella todo lo necesario. Me mire en el espejo por última vez y salí de mi habitación. Baje las escaleras y cogí las llaves de mi auto, que mi padre me regalo de regalo de cumpleaños el ano pasado, un Audi RS7 Sportback 2014. Luego de coger las llaves de mi auto salí del apartamento y ya Damiana me estaba esperando afuera. Nos montamos en el auto y todo el camino fue en un total silencio. Damiana tenía que estudiar para una prueba. Ya estaba a punto de graduarse y estos meses era bien ajetreado para ella. Damiana Parker y yo Vivimos juntas desde que tenía 19 años, mide 4'2 si se creyeron que no había nadie más bajito que yo se equivocaron. Ella es de piel algo tostada pelo castaño obscuro hasta los hombros y de ojos color cafés. Sus padres al igual que los míos viven en Philadelfia. Nos conocimos en pre-escolar aun que ella lo repitió otra vez porque un era menor. Ella es fanática del amor es una romántica empedernida no habla de otra cosa que no sea de ello. Pero de igual forma la quiero.

Final mente llegamos a la universidad. Damiana estudiaba en Borough of Manhattan Community College digamos que quedaba cerca de donde vivíamos.

- Que tengas lindo día Dam - dije - Igual tu Paige. Que no se te olvide pasar a buscarme- dijo a lo que yo asentí riendo.

Luego de dejar a Damiana, llegue al restaurante. Salude a todos con una sonrisa y un gesto con la cabeza. La verdad es que había amanecido de buen humor hoy.

- Señorita Brillón, aquí están los documentos de esta semana - me dijo Sandra una de mis empleadas y Gerente del restaurante, ósea la encalcada del mismo cuando no estoy. - Gracias Sandra - respondí. - No hay de que señorita- dijo y se marcho. Sandra era una señora de unos 30 años ella vivía en la Florida y acaba de mudarse cuando empecé a solicitar empleados ella había estudiado administración de empresas no dude de su conocimiento y le di el empleo ella media como algunos 5'8, de cabello rubio, ojos verde aceitunas y piel blanca.

Empecé a revisar los documentos, y me interrumpe una llamada.

- Bueno, ¿con la señorita Brillón? - pregunta esa voz que no reconocí. - Buenas, con ella habla, ¿en que le puedo ayudar?- dije tranquila. - Señorita le habla Irene, ya le tengo noticias - dijo algo emocionada. - ah Irene, pues dígame ¿cuáles son las noticias? - dije algo intrigada. - Ya encontré la casa que tanto quería usted, solo dígame cuando puede venir a verla a ver si le gusta - dijo - ¡Fantástico!, hoy hablare con mi amiga a ver que día quedamos, y luego la llamo a usted ¿le parece bien? - dije emocionada. - me parece bien, que tenga lindo día señorita- dijo - Usted igual y muchas gracias - respondí y colgué.

Sí, estamos pensando mudarnos el apartamento se a vuelto algo pequeño para nosotras. Tal vez ya mismo Damiana se case y me quede sola pero de igual forma me gusta tener mucho espacio. Y ya ese apartamento no da para más.

Termine de revisar los papeles y di una ronda por todo el restaurante. Gracias a Dios todo marchaba bien y no había ninguna queja.

Ya se estaba poniendo en marcha el negocio del hotel y ya tenía todo organizado. Pronto empezare a buscar personas para los puestos.

Transcurrió el día y ya tenía que ir por Damiana a la universidad. De camino le conté sobre la casa y les diré que estaba súper emocionada.

- ¿ya tienes el menú? - Pregunto Damiana - ¡Siii! - dije emocionada – Bueno, ¿y que harás? - pregunto - Bueno que tal jerck chicken y salsa de tomate con polenta de frijol negro y una ensalada mixta de frutas ¿Te parece? - dije - Ya me dio hambre - dijo Damiana y las dos reímos.

Subí a mi habitación a bañarme y luego baje a preparar la cena. Damiana me ayudo a preparar la cena y a poner la mesa.

Cuando la cena ya estaba terminada, comenze a servir. Ambas empezamos a comer y a decir que tal nos fue en el día. Pero no podía evitar el tema toda la noche y además fui yo quien le dije a Damiana que le contaría.

Damiana no aguanto mas y dijo, - Espero que no estés evadiendo el tema Paige - dijo - te dije que te contaría y lo haré Damiana - Dije mirándola a los ojos.

Si, ya lo sé, os he dejado en intriga. Gracias por leer espero que les este gustando. ❤

Gracias nuevamente a todos por leer mi novela.

Besos & Abrazos

-Eli


Huyendo del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora