04.

2K 233 37
                                    

🍪

El pequeño Sunggie se encontraba comiendo su avena, hoy era domingo el último día en que iba a ir al parque «Si mi pollito no estaba ahí, me voy a dar por vencido», fue lo que dijo Sunggie a su mamá, finalizó tomando su jugo de naranja de las mañanas y se fue a su cuarto a esperar que su mamá lo cambié, aunque siendo sinceros a Hannie le gustaba mucho su pijamita de gatitos.

-Hannie, mira hoy te vestiré con este conjuntito -Dijo So Hee emocionada mostrándole un conjunto color verde pastel con una figura de osito al centro y un gorrito estilo de los años 80.

Los ojitos de Han brillaron, y sonrió con emoción, mientras que su mamá lo comenzaba a vestir con aquel conjunto.

(...)

Al llegar al parque el pequeño Sunggie comenzó a mover su cabecita hacia varias direcciones, buscando a "su pollito", al no volver a encontrarlo se sintió triste, muy triste.

¡Pero se le ocurrió una idea!

-Si Felix-ah es un niño grande, ¿Debería estar en el centro comercial?

El pequeño Sunggie a duras penas recordaba el camino al centro comercial.

Así que vió donde estaba su mamá, y sigilosamente comenzó a caminar directo al centro comercial.

A buscar a su «Pollito».

En el camino se encontró con gatitos y perritos, a quiénes no pudo alimentar con sus galletitas por que su mamá le dijo que eso no comían los animalitos.

El pequeño Sunggie ya se encontraba en la vereda apuntó de cruzar, cuando comenzó a caminar por la pista.

Como si de una película se tratara alguien lo tumbo fuera de la pista y justo sólo segundos después paso un carro a toda velocidad.

«¿Acaso están lloviendo héroes?»

Se preguntó el pequeño Sunggie quién se había olvidado por completo que aún seguía en el piso junto con alguien que no podía identificar por que mantenía sus ojitos cerrados.

Pero grande fue su sorpresa al ver que era «Su pollito» Felix.

Felix se levanto y antes de que pudiera ayudar a Sunggie o hablarle, Sunggie se levantó emocionado y lo abrazó con sus pequeños bracitos.

-¡Pollito! -Habló Sunggie mientras lo abrazaba y daba pequeños saltitos.

Felix solo atinó a sonreír adorablemente y sujetar la pequeña cintura de el pequeño Jisung, mientras lo cargaba.

«Si alguien me ve así, pensará que soy un maldito pedófilo»

Se dijo a si mismo Felix, sin embargo no le importó mucho, ya que siguió cargando a Sunggie mientras le sujetaba su cintura.


(★ ๐ . ⊹ end of chapter. )

¡hyung! ¡marry me! 𔘓 jilixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora