Capítulo 28.

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Mika estuvo los últimos días revisando la investigación que Mikiel les había entregado, al compararla con la información de Krul encontró varias similitudes, por lo que decidió que iría a pocos lugares.

Ya había revisado Maizuru, Tottori, y Osaka, los únicos lugares que coincidían entre la información eran Nagoya y Shibuya, soltó un pesado suspiro al no querer ir al último lugar, por descarte solo le quedaban Ueda, Nagano, Takasaki y Yokohama.

Saco un mapa y lo coloco sobre la mesa observando que ruta podría llevar para levantar las barreras lo más pronto posible, mientras más pensaba no podía decidir por donde comenzar su viaje ya que no quería dejar solos por mucho tiempo a sus hijos, cuando escucho la puerta abrirse dirigió su mirada hacia esta y pudo observar a Mikiel entrando a la habitación.

-Vaya que hermanito muy trabajador tengo, ¿ya decidiste la ruta que tomaras? – pregunto Mikiel observando los lugares marcados en el mapa.

-Aún no... creo que lo mejor es tomar una ruta para comenzar por Ueda, seguir por Nagano, Takasaki y por último dejar a Yokohama, siento que es la mejor ruta que puedo tomar, pero no quiero alargar mucho mi viaje. – susurro Mika pensativo.

-Veo que quieres terminarlo lo antes posible... es una buena idea, pero creo que sería muy pesado para ti tomar tantos lugares en poco tiempo, tu cuerpo es un poco más resistente, y tu energía esta mucho más estable, pero no debes abusar de esto... además, debes considerar que cuando empieces a tomar a los serafines todo el mundo empezara a cambiar, todo lo que ellos hicieron desaparecerá. – susurro Mikiel sin despegar la mirada del mapa.

-Lo sé, ya lo tomé en cuenta, deberé dominar rápido las habilidades de cada uno para que las cosas no cambien mucho, ¿Cuándo comience a tomar a los serafines él se empezara a mover también? – pregunto Mika serio.

-No, él ya se encuentra en movimiento, desde hace cientos de años ha estado haciendo que todo vaya por el camino que desea, tal vez interfiera con tus acciones para evitar que cumplas con tu objetivo, pero los obstáculos harán que te vuelvas más fuerte. – susurro Mikiel.

-¿Qué me aconsejas hacer? – pregunto Mika.

-Si yo fuera tu... tomaría al serafín de Nagoya, dejaría al de Shibuya y al de Yuu para el final, los otros serafines son mucho más peligrosos y deben ser capturados lo antes posible, esto también sería una forma de atraerlo y acorralarlo en Japón. – susurro Mikiel ante la atenta mirada de Mika.

-Ya veo, lo pensaré. – susurro Mika.

-¿Cuándo piensas comenzar tu nueva misión? – pregunto Mikiel mientras observaba detenidamente el mapa.

-Dentro de una semana. – susurro Mika.

-Entiendo, pero primero ve a Sanguinem, debes hablar con Krul sobre lo sucedido para que ella te explique cómo funciona el mundo de los vampiros y como debes comportarte con los progenitores... - susurro Mikiel.

-¿Progenitores? ¿a qué te refieres? – pregunto Mika confundido.

-No te lo han dicho, desde ahora te convertirás en el representante de la familia Shindo, Dariel era nuestro representante, pero te sedera el puesto para que puedas moverte libremente sin que los progenitores sean un nuevo enemigo a vencer... - susurro Mikiel, pero al ver la expresión de desconcierto y la mirada de su hermano soltó un pesado suspiro un tanto cansado.

-Yo no quiero ser parte de los vampiros. – dijo Mika molesto.

-Lo quieras o no ya eres parte de ellos, si quieres contar con apoyo y libertad para tu viaje en el extranjero deveras aceptarlo, el trabajo de la familia Shindo es el de ser intermediario, no formamos parte del consejo progenitor, pero si tenemos voto en la toma de decisiones, y tendrás el permiso especial para asesinar a quien traicione a los líderes del consejo. – dijo Mikiel mientras se sentaba sobre la mesa.

Nuestra decisión YuuMikaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora