Lightblue //Imagina con Jeong Yunho//

XV - Pensamientos

A-ah. -Pronunció T/n nerviosa y bajó la mirada- Si. Si, la cabina me dijo. -Sonrió un poco, esta vez mirando su plato.

Mmm... -Pronunció él comprendiendo, enderezandose con una sonrisa mientras miraba hacia otro lado- Y... ¿Sabes lo que eso significa, verdad? -La miró disimuladamente sin dejar de sonreír pero ella no levantó la vista, se mantenía en su plato.

T/n incómoda comió más fideos, para evitar hablar.

Pero los fideos no son infinitos.
En cambio la paciencia de Yunho sí.

T/n otra vez se sintió nerviosa al no ver nada en su plato ni en el de Yunho. Pensaba obligarlo a comer pero ya lo había hecho.

Él la observaba de brazos cruzados con cierta burla en la sonrisa que adornaba su cara.

Ella como pudo se levantó de su asiento con su plato en manos dispuesta a dejarlo en el lavavajillas. El comer apurada no le había sentado muy bien que digamos.

Yunho negó con la cabeza e hizo lo mismo que ella.

T/n caminó hacia su habitación, pero para la desgracia de sus planes, Yunho la seguía con paso tranquilo.

Estaba llena, por lo que decidió no correr. Ya sabía que le esperaba una incómoda conversación.

Se lanzó a su cama y se tapó con las sábanas haciéndose un bollito de tela que con suerte se le veía la cara.

Al ver a Yunho entrar por la puerta y cerrarla con tranquilidad, ella cerró sus ojos frunciendo un poco el ceño y le dió la espalda, colocándose en posición fetal con vista hacia la pared rosa.

T/n... -Dijo Yunho poniendo sus manos sobre su cintura mientras miraba la oruga violeta, que se suponía que era T/n sobre la cama.

Ella no respondió. Quería hacerse la dormida pero el haber comido de esa manera no se lo permitía, estaba incómoda. Lo que la ponía de mal humor. Nunca volvería a comer así.

Casi le da un ataque cardíaco cuando sintió un pequeño rebote que la hizo flotar por un momento, y unos brazos la rodearon.

Cuando se calmó frunció el ceño.

¡Qué pequeño rebote ni qué ocho cuartos! ¡Casi atraviesa el techo de lo fuerte que se lanzó Yunho a la cama!

¡¿Estás loco?! -Se quejó T/n removiendose- ¡No vuelvas a hacer eso! ¿Sabes a caso cuánto pesas? -Siguió quejándose como una viejita gruñona haciendo que Yunho se riera y sonriera enternecido.

Le quitó la parte de la sábana que cubría su cabeza, y apartándole el cabello, le dió un besito en la frente a T/n.

Ella refunfuñó. Era increíble que Yunho la calmara o la hiciera sentir tan bien con cosas tan pequeñas como esa.

Yunho sonrió más al ver el ceño fruncido de T/n y la abrazó con un poquito más de fuerza.

T/n... -Habló Yunho luego de unos cuantos minutos, separándose unos centímetros de ella- Lo que quería decirte antes era que... -Fue interrumpido por un suspiro.

Era de T/n.

Sorprendentemente, por fin se había quedado dormida.

Yunho la observó sorprendido y estuvo confundido por unos momentos pero sonrió inevitablemente al ver la carita tan tranquila de ella.

Volvió a abrazarla y así se quedaron dormidos los dos.

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A la mañana siguiente, Yunho, como de costumbre, había amanecido en la cabina.

Al salir no encontró a T/n ni en la cama. Tocó la puerta del baño y al no escuchar respuesta se sintió extrañado.

"¿Dónde está?" Pensó él.

Bajó hacia la sala y la encontró sentada en la mesa.

Estaba tomando una bebida energética con un semblante pensativo que a Yunho no le gustaba mucho.

¿T/n? —Preguntó él un poco tímido llamando la atención de ella.

Buen día, Yunho. —Dijo sonriendo.

Una sonrisa extraña.
Contraria al semblante de seriedad que tenía segundos antes.

Buen día. —Sonrió también— ¿Qué hora es? —Preguntó acercándose a ella.

Seis y media de la mañana. —Respondió dejando de mirarlo para tomar otro sorbo de su bebida, y a Yunho casi se le salen los ojos.

¿Qué? —Dijo sorprendido— ¿Y qué haces tomando esa bebida tan temprano? ¿Siquiera comiste algo antes de eso? —Le quitó la lata de las manos a T/n como si fuera algún veneno.

Ella lo miró un poco impresionada y luego sonrió.

Cálmate. —Se rió un poco— Ya desayuné. —Extendió su mano hacia Yunho para que le devolviera la lata y este la miró con indecisión y desconfianza.

Terminó por ceder.

¿Qué haces levantada tan temprano? —Preguntó sentandose frente a ella con los brazos cruzados sobre la mesa.

Cosas. —Dijo ella haciéndose la interesante con una sonrisa y él se rió un poco— Bueno, la verdad es que tenía que salir a hacer unas compras antes de ir la universidad. —Él asintió comprendiendo.

¿Qué vas a comprar? —Preguntó Yunho con curiosidad.

La profesora de ayer dijo que hoy debíamos llevar una cartulina para hacer un trabajo en grupo. —Hizo una mueca entre nerviosa y de desagrado al mencionar una actividad en grupo— Pero como se trata de mí, se me olvidó. —Sonrió falsamente y Yunho se rió.

Ya veo... Bueno, te acompaño. —Dijo levantándose— Voy a arreglarme. ¿Y tú? —Preguntó deteniendose para mirarla.

En un rato voy. —Dijo tomando los dos últimos sorbos de la bebida entre sus manos.

Yunho fue a bañarse, cambiarse de ropa, y peinarse, juiciosamente.

En cambio T/n comenzó a pensar en qué papelería podría estar abierta a esta hora.

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Ya con la cartulina asegurada, entraron a la universidad.

Las miradas sobre ellos no cesaban.

T/n se sentía un poco mejor al tener cerca a Yunho, y viceversa, por lo que ambos continuaron caminando sin prestarle mucha atención a los que pretendían intimidarlos.

Yunho se sentía orgulloso de T/n al ver que había avanzado con confianza, por lo que no pudo evitar sonreír.

Se dirigieron al aula y como era de esperarse alguien tenía que borrarle esa sonrisa.

¡Hola, niño! —Saludó Seonghwa, el pelinegro amigo de Yeosang, a Yunho impidiéndole la entrada al aula.

Yunho lo miró por un momento sin decirle nada.

Hola. —Dijo sencillo, serio, manteniendo a T/n disimuladamente lejos de él.

De repente algo que nadie se esperaba, sucedió.