7: tranquilidad.

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Xue Yang se encontraba incrédulo, su aroma ya no era el mismo, ya no tenía aquel delicioso pode de atracción.

Desde hacía una semana solamente callo en una desgracia tras otra, y ahora este alfa le decía que su aroma no le resultaba desagradable.

-- Xingchen..... ¿Podemos intentarlo a tu manera? -- el o.ega pregunta sin dejar de mirar hacia el frente.

-- yo nunca deje de ser tu novio, nunca he salido con nadie, tu me lo prohiviste ¿recuerdas?. -- le toma la mano.

-- ¿¡enserio!?-- Xue Yang Sonrie y se aferra a esta mano como si temieran perderlo. -- vamos a mi habitación, te daré mi virginidad.

El alfa suspira un par de veces y después besa la mano de el chico junto a el.

-- no, mi dulce Omega, ese regalo me lo darás en nuestra noche de bodas.

-- entonces casemos ¡ya!.

-- no mi hermoso y precioso Omega, debes conocer a mis padres y yo debo conocer a los tuyos, debes saber lo que me gusta, y yo debo saber lo que te gusta. Luego debemos buscar un lugar donde criar a nuestros cachorros, y entonces te regalaré un lindo anillo y juntos jugaremos ante buda estar en esta y en otras vidas juntos.

Entre más hablaba Xue Yang más se iba desanimado, de este echo, lo veía tan lejano.

-- ¿y si llega mi cielo?

-- juntos aprenderemos a controlarlo, Xue Yang eres tan hermoso y perfecto, tu aroma es solo es la cereza de el pastel, y sin el, sin así eres hermoso. -- suavemente toma la mejilla de este omega.

Sus ojos se encuentran, y Xingchen se hacerca un poco más a el.
Sus labios se encuentran en un beso, es la primera vez que Xingchen lo hace a su gusto.
Tan lento, su lengua busca en el interior de Xue Yang, luego muerde un poco sus labios.

-- mi Omega, eres tan hermoso. -- sus ojos se encuentran.

Xue Yang ha olvidado quien es y en dónde vive, a olvidado incluso respirar.
Es la primera vez en toda su vida que un beso lo hace llegar a el cielo y volver.

-- ahora ve a casa, y mañana buscarás un curso de cosina, pollo agridulce es lo primero que aprenderás, quiero comer algo echo por tus lindas manos.

El Omega no sabe lo que ha dicho su alfa pero simplemente accederá, si bien el alfa no había puesto su marca en su cuello, le había dejado su escencia en los labios y la ropa, el mundo sabría que estaban de cortejo, y lo respetarían.

Xue Yang bajo de el auto de el alfa y camino hasta el elevador dónde se fue directo a casa, su corazón se sentía en paz, y por momentos se sorprendía a si mismo riendo como tonto, ni el sabía por qué lo hacía, solo sabía que un alfa lo había elegido, y no por el aroma, sonó por qué realmente le gustaba.

......

Una semana después......

Xue Yang se encuentra llegando en el estacionamiento de el banco con un hermoso traje azul marino y una camisa roja. Trae un recipiente de comida.

Entra en el banco y saluda a todos con mucha cortesía.
Realmente comienza a disfrutar de no ser acosado por una jauría de alfas en todo momento.

-- ¿Xingchen? Te traje la comida mi prometido. -- Xue Yang muestra su mejor sonrisa.

Se sienta en la salita y espera a que el alfa termine con sus pendientes.

-- ya decidiste ¿que harás con tu vida? -- el alfa pregunta.

-- casarme contigo.

-- si eso lo sé, pero tú eres un artista debes buscar algo que hacer.

-- ¿Que podría hacer ya mi olor cambio, y ahora con el tuyo ya no podré bailar. -- Xue Yang añora esos tiempos.

 En Contra De El Destino. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora