Capítulo 70

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«Es un hombre sabio el que conoce a su propio hijo»

Hace unas horas atrás había sentido la hermosa energía que Cheryl me transmitía en nuestro " reencuentro". Pero esta energía y esta mirada eran un tanto diferentes. Un señor de unos 60 años estaba derramando lágrimas más que nadie en esta sala. Sus piernas temblaban y eso se podía notar. El llevaba sus manos al rostro y al parecer intetantaba convencerse de que esto era parte de la realidad.

En un intento torpe se acercó a mí y resbaló por culpa de la alfombra. En cosa de segundos lo ayudé a levantarse. Tocar sus manos fue una explosión de recuerdos que jamás creí volver a ver...¿ Era mi padre?-En mi mente estaba él. Cargandome y sonriéndome, dándome de comer, enseñándome a caminar e incluso había una imagen de el contando un cuento para poder calmar mi energía antes de dormir-

Lo veía sonriente. Manejando lo que parecía ser una camioneta, mientras yo llegaba a la entrada de la escuela. También lo veía triste y en ocasiones frustrado. Lo veía joven también, más joven de lo que un adolescente quiere ver a su padre-

Evan:¿ Antoinette?- sus manos tiritaban. No por el frío de aquella sala, sino por el miedo de nuevamente estar soñando este momento-¿ Hija?- sus ojos claros se volvieron dos lupas que buscaban detalles en mi tan corriente rostro- DIme que eres tú y que no lo estoy soñando nuevamente-

Toni:Papá- ese pronombre fue sufienciete para recibir de su parte un abrazo que  se volvió mi segundo nacimiento. Yo estaba volviendo a vivir una vida y el estaba ahí para rodearme con sus brazos fuertes- Soy yo, Papá- mi cerebro solo recordaba a Papá y eso era algo que nunca antes había sucedido

Evan: Mi Toni- sus sollozos se sentían como los de un niño pequeño- Te estuve esperando por tanto tiempo mi niña- ambos caímos abrazados en el centro de aquella sala silenciosa- Mírate- se separó un tanto de mi para volver a mirarme como si yo fuese una piedra preciosa- Estás igual que la última vez que te vi. Luces tan hermosa como esa mañana que me despedí de ti sin saber que tendría que esperar 13 años más para volver a ver tu hermosa sonrisa

Toni: Tú...-su semblante denotaba un aspecto cansado. Había ojeras marcadas y arrugas en su frente- Eres maravilloso- volví a protegerme en sus brazos. La calidez del hogar es algo que ninguna enfermedad puede borrar-

Evan: No sabes cuantas noches lloré por tu ausencia. Te busqué siempre y no perdí la esperanza en que este día llegaría en algun momento. Mi corazón me decía que no estabas muerta, aun cuando tu madre perdió las esperanzas a la mitad del camino...-

Toni:¿ Mamá?- Mi cerebro intentaba encontrar una imagen para aquella mujer, pero parecía una tarea más tediosa-¿ En donde está?-

Evan: No se ha sentido bien durante este último tiempo....- Solo eramos él y yo en ese momento- Estaba sufriendo una depresión silenciosa desde ya hace un tiempo-

Toni: Es horrible- no quería pensar en la posibilidad de perder a mis padres. No ahora cuando recién había vuelto a ellos-

Evan:¿ En donde estabas?¿ Te hicieron daño?¿ Huiste?- Entendía su preocupación, más aún sabía que yo no podía responder a todo-

Toni: Si te lo digo es probable que creas que estoy loca- sonreí aun con lagrimas-

Evan: Jamás pondría en duda la veracidad de tus palabras. Eres mi hija y todo lo que digas tiene un sentido para mi-

Toni: Yo no quería desaparecer- No podía controlar mi llanto-

Estuvimos abrazados por el tiempo suficiente para ser interrumpidos por otra voz-

Fangs:¿ Toni?- Un hombre con facciones muy similares a las de Thomas, me observaba con detención. Sus ojos estaban a punto de explotar en llanto. Me sentía como un fantasma del pasado, uno que todos querían pero que a la vez temían- ¿ Realmente eres tú?- sentí su mano en mi brazo. Era una forma de comprobar que mi presencia no era una ilusión-

El tiempo que te quiseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora