𝙸𝙿𝚂𝙾 𝙵𝙰𝙲𝚃𝙾 | ᴴᵃʳᶜᵒ

❧ 2 ☙

Castigo

Al día siguiente Draco Malfoy no lograba dejar de otear a Harry. Desayuno, descanso, comida y pasillos y la clase de pociones del profesor Horace Slughorn no era la excepción. El rubio alumno, pelando su higo seco, volvió su mirada gris, por sexta vez a la nuca de Harry Potter, con una única pregunta rodeándole la cabeza ¿Por qué? Mientras apretaba los labios. Pasando los higos al mortero comenzó a machar, unos segundos pasaron cuando Malfoy volvió a ver a Harry, el chico de forma muy lenta se había levantó y de la misma forma se coló al armario de ingredientes.

—Sigue triturando Blaise, iré por ajenjo—Aviso dejando su puesto. Pasando con la cabeza en alto por las mesas de los demás Gryffindor, se incorporó al armario de ingredientes, donde vio a Harry Potter tomando frascos con ingredientes, los cuales iba acumulaba con mucho cuidado encima de su libro de pociones—No recuerdo a ver leído que la opción para encoger llevara lavanda, Potter— Dijo viendo la mano del chico.

El aludido de cabello azabache, se giró hacia la voz, después dirigió su vista verde opaca, ala botellita en su mano. Viendo el frasco con tristeza, lo regreso a la estantería.

—Pensé que era ajenjo...—Mintió.

—Pues eres un estúpido, porque el ajenjo es ese—Indico con su índice, un frasco completamente diferente al que tenía Harry—Pásamelo o hazte a un lado cara rajada—Ordeno, con el ceño fruncido.

Harry mirando por arriba de su cabeza los ingredientes señalados. Tomo dos frascos con ajenjo, uno lo acumulo junto a los demás frascos que llevaba y el otro, con su mano se lo estiro amablemente a Malfoy. Con el rostro desfigurado de la sorpresa lo miro, pero no duro mucho como para que el rubio cambiara su cara a una de odio.

—¿Por qué? —Gruño, sin tomar el frasco.

—Por qué ¿Qué? —Respondió demasiado calmado.

—¿Por qué no te defiendes? —Dijo completamente indignado.

—¿Y tú porque sigues molestando? Te salve la vida Malfoy, ¿Por qué me sigues odiando...? —Harry con tono átono, se acercó al rubio quedando a solo centímetros.

—Primero responde mi pregunta— Alego el chico dando un paso al frente de su compañero que ni siquiera se inmuto.

Harry, sin embargo, no respondió para nada, entorno los ojos cansados y se giró a los estantes para seguir buscando sus ingredientes, ignorando por completo a Malfoy, quien distorsiono su cara y la convirtió en una, combina de enojo e indignación ¿Cómo diablos se atrevía a ignorarlo?

—No me iré de aquí hasta que me respondas— Espeto el oji gris, tomando el hombro de Harry con una mano para hacerlo girar, no obstante, el otro de un fuerte movimiento quito la mano del chico de su hombro y siguió ignorándolo —Idiota te estoy llamando.

—Déjame en paz Malfoy— Ordeno el chico subiendo un poco el tono de voz y solo viéndolo de reojo, perfecto para notar el momento en que una pálida mano se posó en su hombro y lo hizo dar la vuelta de forma agresiva y aunque el otro brujo realmente no uso demasiado fuerza, fue suficiente para que Harry soltara un quejido de dolor y aparte soltara los frascos que tenía en los brazos, ocasionando un fuerte sonido, cuando las botellas colisionaron con el piso rompiéndose y esparciéndose.

Malfoy vio horrorizado el suelo con tan importantes ingredientes desperdiciados en el suelo ¿Cómo se podía ser tan estúpido? Al momento en que levanto la vista para enfrentar a Potter, se quedó con la boca abierta y el insulto en la garganta. El chico tenía una fina línea de sangre escurriéndole de la nariz y deslizándose por su mejilla, hacia el menton ¿Acaso lo había ocasionado él? Sin darle tiempo a Malfoy para reaccionar ante lo que veía Harry se colocó una mano en la nariz y salió al momento en que el profesor Slughorn se asomó por la puerta, para ver con preocupación los vidrios rotos de los frascos a los pies del rubio, además de una pequeña gota de sangre en el suelo que claramente capto su rápida atención.

—Señor Malfoy Por favor, limpie esto...— Pidió el profesor apunto de alejarse del marcado de la puerta, sin embargo...

—¿Disculpe? — Pregunto el brujo más joven, girándose y viendo al profesor con una incrédula sonrisa—Pero señor, yo no fui, quien los tiro, fue Potter— Alego Malfoy señalando el piso.

—No le pregunte el responsable señor Malfoy, solo le pido amablemente que lo limpie debo ir...

—Si Potter se lastimo fue problema suyo— Gruño el chico entendiendo a lo que se refería el profesor de pociones, oh, tal vez no.

—Usted no entiend...

—No por supuesto que entiendo, vaya y ayude al gran salvador de nuestro mundo...— Mascullo un enojado Malfoy entre dientes y con los brazos cruzados, creyendo que el regordete profesor no le había escuchado, pero todo lo contrario pues, el mismo si logro escucharlo ala perfección y en caro a su alumno.

—Después de clases. Señor Malfoy está castigado— Sentencio el profesor para continuamente irse dejando a un rubio completamente sorprendido y a la vez molesto. Ese maldito de Potter se lo pagaría...

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