No es un muñeco poseído!

Abre la puerta

El césped verde era suavecito, las nubes pasaban lentamente y JungKook no podía creer que esto le había pasado.

---Tonto TaeHyung--- se levantó con sus pequeños brazos y caminó hacia la puerta trasera, estaba cerrada.

No había enredaderas para subir, no había algún árbol para trepar, la única solución era la puerta principal.

Se apoyó en la puerta, TaeHyung debía ir a clases así que pasaría por esa puerta sí o sí.

Pero las horas pasaban y nadie salía.

¿Se iba a quedar encerrado ahí para siempre?

El chico pálido hizo aparición, su rostro mostraba gotas de sudor, su pantalón exhibía manchas de tierra, seguramente el bobo cayó algunas veces al venir corriendo.

JungKook se escondió en un arbusto y cuando la puerta se cerró corrió hacia el patio trasero, tumbándose en el lugar previo en el que había caído.

Escuchó voces alteradas, no eran de discusión, la cabellera pelinegra se asomó por la ventana mirándolo y luego regresando a continuar la conversación.

Unos minutos después fueron las mismas manos de TaeHyung las que lo recogieron del césped.

---Como te iba diciendo... TaeHyung, quizás el resorte del colchón lo hizo moverse, ya comprobamos que en el suelo no hay más pisadas que las tuyas--- esta vez el muñeco pasó a sus manos ---Pobre pequeño, mira, está todo sucio, tendrás que lavarlo cuando regreses a casa. Ahora debemos correr o van a matarnos.

El rostro del castaño seguía indeciso pero si su hyung decía que no fue nada, no fue nada.

Ambos jóvenes dejaron al muñeco dentro del hogar y después de que TaeHyung pusiera banditas en las rodillas de YoonGi salieron del lugar a toda prisa.

Llegaron justo antes de que se cerraran las puertas, el castaño se disculpó con su hyung y fue a su aula, cuando entró recibió las mismas miradas de siempre, caminando tranquilamente se sentó en su lugar y sacó las cosas que necesitaba.

Abrió el libro de matemáticas hojeando hasta llegar a las páginas donde estaban los ejercicios que le habían dejado como tarea. Se puso a pensar en aquellos garabatos dibujados y en toda la situación.

Su colchón estaba bien, de ninguna manera algún resorte podría haber saltado, él recuerda que cuando era un niño su tía siempre le dijo que no saltara sobre el colchón y así lo hizo, siempre siguió las reglas, así que no había razón por la que hubieran resortes que saltaran y se salieran.

Agradecía que su hyung haya querido darle una explicación lógica pero él había visto otra cosa, quizás si él también hubiera estado en ese momento hubiera presenciado como el muñeco se movió.

Su vista se enfocó en la bolita de papel que le habían lanzado con muy mala puntería.

---Al menos respeten el aula, no ensucien todo, un árbol tuvo que dar su vida para que tú tuvieras un papel ¿Sabes?--- la situación en su cabeza era mucho más importante que lo que le acontecía en el colegio así que no dudó en abrir la boca, cosa que no hubiera hecho nunca en otras ocasiones. Por eso mismo todos se quedaron callados al verlo molesto guardando la bola de papel en su mochila para luego reciclarlo.

De vuelta en su principal problema y observando los trazos torpes de las páginas concluyó que aunque el muñeco era mágico o poseído no parecía ser malo.

¿Qué clase de demonio ayudaría a otra persona con su tarea de matemáticas?

Solo si firmaras uno de esos extraños contratos pero él no había firmado ninguno.

La clase comenzó y con la cabeza un poco más tranquila pudo seguir su rutina habitual.

Llegar a casa fue la parte difícil, al girar las llaves e ingresar a su hogar encendió rápidamente las luces, el muñeco no lo había matado o hecho daño hasta ahora pero el miedo seguía ahí.

Hizo el mismo proceso de lavado que la primera vez que lo trajo y lo dejó colgando junto a otras prendas agarrado firmemente por ganchitos.

Ahora que sabía que lo escuchaba se sentó frente al muñeco de peluche, mirándolo firmemente para demostrar seriedad.

---Yo no seré como las personas que aparecen en Chucky, al primer indicio de que quieres hacerme daño te arrojaré a una hoguera con mucho mucho fuego---sentenció.

Se levantó y fue a su habitación dejando que el muñeco se secara, cerraría la puerta con seguro solo por si acaso.

Él se encontraba a gusto durmiendo, al menos hasta que unos golpes en su puerta lo despertaron, ¿Era la puerta de su habitación o la principal?

Con los ojos casi cerrados se puso las pantuflas y abrió su puerta cayendo de inmediato por haber tropezado con algo.

El dolor del golpe lo despertó por completo y pronto reconoció a la causa de su caída.

Ahí en el suelo estaba el muñeco de peluche, había volado hacia otra esquina al igual que él, sus bracitos levantaron su cuerpo relleno de felpa y se sacudió para quitarse un poco de la arena.

TaeHyung se levantó a la par mirando al muñeco.

---¡Sabía que podías moverte!--- señaló con su dedo, feliz por haber tenido la razón.

Despacio, paso a paso se acercó hasta levantarlo, JungKook se dejó examinar con algo de miedo, no quería que lo arrojen otra vez.

---¿Eres mágico?, ¿Tengo tres deseos verdad?. Deseo que mamá y papá vuelvan a la vida, espera no puedo pedir que alguien reviva, va en contra de las leyes de los deseos--- regresó a su habitación cerrando la puerta y sentándose en la cama ---Entonces quiero mucho dinero para que mi tía ya no trabaje.

---No soy un genio--- JungKook habló por primera vez.

TaeHyung lo soltó por el pequeño susto pero volvió a recogerlo.

---Lo siento pero no cumplo deseos.

---¿Entonces eres un demonio? ¿Quieres que hagamos un pacto a cambio de mi alma?

---No, no soy un demonio, al menos eso quiero creer. No me dejes afuera secando, hace mucho frío estos días--- JungKook tembló, no le gustaba sentir frío, era extraño.

---¿Cuál es tu nombre?

JungKook quería responder, en verdad quería, pero algo se lo impedía.

---JeJun, tú así me llamas cuando nos encontramos en tus sueños...

Esta historia pronto acabará xd le quedan 5 capítulos a lo mucho :3

¿Sugerencias de ships para la siguiente historia?
🐧💜🐧

Bye •~•
JIRCKM_