𝙅𝙚 𝙘𝙧𝙤𝙞𝙨 𝙚𝙣 𝙩𝙤𝙣 𝙖𝙢𝙤𝙪𝙧 || 𝙔𝙚𝙤𝙣𝙗𝙞𝙣 / 𝙎𝙤𝙤𝙟𝙪𝙣

𝐭𝐰𝐞𝐧𝐭𝐲

LUNES, HORA: 7:00 a.m.

—No ha pasado ni una hora y ya me quiero ir—se quejaba Yeonjun escondiendo la cabeza entre el libro de matemáticas frente a él.

—En lugar de quejarte deberías esforzarte por terminar los ejercicios que nos dejó el profesor.—le respondió Heeseung quien escribía algo en la calculadora y luego lo pasaba al cuaderno.

—¿Por qué me esforzaria si mí amigo el número uno de toda la clase, el chico más guapo e inteligente de todos, puede pasarme la copia?—sonrió y parpadeo varias veces hacia Heeseung haciendole ojitos de cachorro.

—Manipulador.

—Así me amas.

—No tengo otra opción—subió los hombros restándole importancia.

—Eres malo Heesungie—puchereó Yeonjun.

—Yyy listo. Toma.—le extendió su cuaderno.

—¡Oh gracias! Te amo, te irás al cielo con todo y zapatos.

—Solo me dices te amo cuando te hago favores—dijo Heeseung rodando los ojos.

—Vamos, sabes que te amo aunque no lo diga seguido.

—Como digas.—se cruzo de brazos esperando que le devolvieran su cuaderno.—Quiero contarte algo.—habló de repente.

—Cuentame.—Yeonjun seguía escribiendo las respuestas.—¿Es sobre ayer?—preguntó.

—Si.

—¿Y que es?

—Se que debí haberte dicho esto antes, quiero decir, eres mí mejor amigo y se que no me juzgarias, pero tenía miedo.

—¿Por qué?—Yeonjun dejó de escribir para prestarle toda su atención a Heeseung.

—Yo... Ya conoces como son mis padres de exigentes y todo, pero hay más.

—Dime.

—Ellos, bueno, ellos a veces me tratan mal. Sus palabras suelen ser muy hirientes, siempre es como "heeseung no servirás para nada" "no tengo la mínima esperanza en ti" "eres un fracaso" y cosas como esas. Al principio no me importaban porque no sabía a lo que se referían, pero ahora es difícil ¿Sabes? Intento mentalizarme que sus palabras no me afectan, que no duelen y que soy mejor que solo buenas notas. Pero no es fácil, no es fácil llorar por las noches y sentirme insuficiente. Escondo mis problemas porque no quiero preocuparlos, se que hay personas con problemas más grandes que los míos y que pueda que esté exagerando, pero hay días que en verdad no puedo más. Días en los que quisiera gritar y darme por vencido porque no se qué hacer, doy todo de mí pero no es suficiente. Siempre buscando estar arriba pero ¿Que pasa si ya me cansé? No estoy bien, no me siento bien, no duermo bien, nada está bien conmigo. Quiero a mis padres pero hay días en los que quisiera alejarme de ellos, días en los que quisiera dormir para siempre y no oír las mil discusiones que tienen por dinero. Nunca es suficiente para ellos, siempre querrán más y más. Perdón por ser un mal amigo y no contarte cómo me sentía, tenía miedo que pensaras que solo soy un tonto por preocuparme por problemas pequeños, perdón Junnie.

—Si, eres un tonto. Un tonto por pedir disculpas por algo como eso, no tienes que disculparte conmigo Heeseung. Está bien sentirse mal, tus problemas no son menos importantes que los de ningún otro. Tu salud mental es importante y si te sientes cansado y te quieres dar por vencido recuerda que nosotros estamos para ti, no estás solo y no eres menos por sacar una mala nota. Equivocarse está bien, sabes que te amo. Eres mí mejor amigo y me alegra que decidieras compartir tus preocupaciones conmigo, no soy el mejor consejero pero puedo decirte que eres muy valiente, muy inteligente y sobre todo, eres una muy buena persona. Nunca olvides que te amo, eres mí hermano de otra sangre.