Especial • Alex •

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Alex

...

Me encontraba bebiendo en un estacionamiento remoto desde dónde podía ver toda la ciudad, era la cuarta botella, no había razones suficientes para explicarle a nadie el porque hacía esto, Si tan solo Rebecca no hubiera hecho aquella pregunta, tal vez no lo hubiera pensado, no puedo darle la culpa a ella después de todo, nos conocemos hace dos meses, y yo acepte posar para ella con todas sus condiciones, aquella vez estaba pensado muchas cosas, entonces dijo que parecía perdido en mí mismo, y que era un romántico, no de equivocó.

No puedo contestarle la verdad, si lo hago, arruinaría su vida, cuando ella me pregunto quien era yo y que era lo que más amaba, creo que mande a la mierda todos estos meses.

Pero solo podía ver una sola cosa.

Tire una botella que ya había acabado al vacío mientras gritaba de la rabia y me paraba sobre la raya entre caer o seguir en ese lugar.

Me tiré al suelo junto a mí auto y tome otro trago.

- todo esto es tu culpa, si tan solo no hubieras aparecido con tu cara linda y tus aires de superioridad, y yo, yo ni siquiera quería dejarte cuando me fui - hable mientras contenía las ganas de llorar. - pero no es tan fácil, jamás te dije la verdad, estoy enamorado de ti... Ángel Kanon, a puesto a que eso jode las cosas, por que yo no puedo estar junto a ti. - comence a llorar y me tiré al suelo, para abrazar mis piernas, mí teléfono no paraba de sonar.

Quería estar solo, no quería saber de nadie, de nada, estoy harto de todas las personas, de este mundo, de perder todo lo que amo.

Grite mientras solo mataba lentamente mis emociones, nunca le diría la verdad.

Entonces empecé a caminar por las calles con mí botella en la mano, mientras miraba a las personas que me observaban de forma extraña, solo quería olvidar quien era, yo, quien era el y quien era yo después de perderlo todo.

No quedo nada del Alex que conocí, si tan solo el supiera que era lo más importante que me había pasado fuera de la mierda de mí familia.

Se que pasaron horas en las que estuve sentado frente a casa, sin hace nada más que llorar, y pensar en que yo realmente amaba a ese idiota, y no podía negarlo, aún después de tanto tiempo, el era todo en lo que podía pensar.

Sentí los pasos de alguien acercarse a mí y seguido como se sorprendía de mí estado.

Cuando sus manos llegaron a mis hombros y iban a mí cara para verme la vi, allí estaba Rebecca, mirándome preocupada, imaginando que había hecho para estar así.

- Alex por Dios, ¿qué te pasó? - hablo y yo solo la pude abrazar, era lo único que necesitaba en ese momento, un abrazo sincero.

Pase así algunos minutos hasta que esté me obligó a entrar a casa, luchó para hacerme entrar, entonces lo primero que hizo fue tirar mí botella a el lavado.

La mire desde el sofá quedando en blanco, pensado en lo mal que estaba de tan solo estar tan lejos.

Llegamos a la ducha cuando quise vomitar, pasaron varios minutos en los que estuve allí, mientras ella acariciaba mí espalda mientras lloraba, no preguntaba nada, solo está allí apoyándome.

Una vez entre a la ducha senti el agua correr y solo me quedé allí sintiendo fluir el agua que corría por mí cuerpo, ella me aplicó jabón y me ducho, la deje estar, luego de intentar no ser tan miserable, la ayude a llevarme a la sala donde termine acostado en sus piernas en el sofá de la sala mientras está me acariciaba el cabello, sentí entonces que estaba seguro, podía confiar en ella.

• Alex | Después De La Tormenta •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora