C5. "El mensaje"

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Mañana es 14 de febrero, por lo que tengo entendido cada año que es 14 de febrero sino tienes pareja puedes pasarlo con tus papás, hermanos e incluso abuelos pero mientras ellos sean los que vengan.

Me emociona que por fin los veré y aún no lo creo...

—Hay chica gnomo!

—Manuel? Por qué me llamas chica gnomo?

—Por tu estatura, eres muy pequeña, ¿lo sabias?

—Tú eres muy alto, lo sabías?

—Lo sé y eso me encanta porque puedo mirar tu frente.

—Con quien pasarás el 14 de febrero? —me atreví a preguntar.

—Lo más seguro es que con mis "padres"—recalcó las comillas.

—Pero no entiendo lo que te molesta, ellos te cuidaron toda tu vida, te criaron, limpiaron tu popo.

—Lo del popo estuvo de más, ¿sabías no? —dijo riendo— la verdad es que no es el enojo con ellos, un poco por ocultarme las cosas, pero lo que me molesta es no saber quiénes me abandonaron, en escombros Carol, en putos escombros.

—Vaya que con ese carácter hasta yo te abandono.

—Chistosa—me río, mostrando mi dentadura de oreja a oreja.

—Hay personas que no valen lo que tienen porque no saben cómo cuidar de ello por su valor, en todo caso lo abandonan...

El sonríe, hacemos contacto visual por varios minutos para que se cortara con una llamada a mi celular.

—Disculpa me tengo que ir—El accedió con la cabeza.

—Aló?

—Carol hija.

—Hola mamá

—No podremos ir el 14, lo siento muchísimo, mira me tengo que despedir, pero por la noche hablamos, ¿vale? —cuelga.

Y así es como mi mundo se desmorona en unos instantes, mamá no es así y papá haría todo lo posible por venir y verme, el que no lo hagan me deprime y mucho, regresó a donde Manuel.

—Todo bien? —me pregunta con una media sonrisa en su rostro.

—De lujo, solo mis padres que no podrán venir mañana.

—Igual puedes pasarlo con amigos.

—Quién? Sofia? No nos hablamos, ¿Luisa? Me odia.

—Conmigo—hace una sonrisa de oreja a oreja. —podemos estar de pareja, de amigos, obviamente.

—Acepté.

El evento de día de San Valentín es muy lindo, todos vendrán con sus mejores galas, supongo que será uno de los mejores días.

...

—Cariño!

—Abuela!! ¿Pero que hacéis acá?

—Es 14 de febrero, tu abuelo Samu y yo os pasaremos de lo mejor.

—Sabes por qué no vinieron mis padres?

—Creo que deberías preguntárselo a ellos, es algo muy importante, no debería decírtelo yo.

Me abraza y se va para la oficina del abuelo.

...

—Pero que el rojo es más bonito, tía—Luisa me aconseja que vestir, lleva rato diciendo lo mierda que son todos mis vestidos menos el rojo con piedras plateadas.

Creo que me flipa el rojo.

Por alguna razón Luisa me maquilla y me peina, maquillaje, es labial rojo junto a sombras y delineador blancos y dorados, es el evento más guay al que pude venir, su decoración es tal cual como imaginé, corazones en todo el lugar y muy bonitos listones dorados colgados de ellos, no creí que la cafetería se podría convertir en esto de un día para el otro.

No tengo mucha autoestima, pero este día podría decirse que luzco bella y eso es un poco raro en mí, entro a la cafetería y siento varias miradas sobre mí, para ellos debe ser raro observarme arreglada, comúnmente estoy despeinada y con uniforme.

Manuel

Hoy pensaba pasar todo el día en cama, pero vi a Carolina mal porque sus padres no estarían que decidí invitarla, aunque no me agrade nadie debe pasar este día solo.

Me pongo un traje, cosa que no acostumbro usar ya que lo mío es el cuero.

En el pasillo veo a David, es algo así como mi mejor amigo, viene hacia mi con sus lentes que son más falsos que Evelyn tranquila.

—¿Qué hacéis acá? ¿No era que escaparías esta noche?

—algo pasó

Bajamos, yo me acomodo la corbata mientras que David me llena de palabras que no presto atención, entre esas esta el quejarse de que sacó A y no A+.

—Coño, ¿podrías callarte?

dejo de escucharlo y su voz se hace cada vez más tenue cuando la veo, está ahí parada frente a mí, sus pecas sobresalen, así como el rojo de su vestido, luce guapísima.

—¿Quién eres? ¿Qué hiciste con Carolina?

—Soy la misma.

—cariño, ve esta belleza, sino la invitas a bailar, lo haré yo—. Me dice Luisa tratando disimular lo que hace a Carol enrojecer.

Creo que estoy sonriendo, yo, sonriendo por una chica.

—¿Me darías ese honor? —. dije con mi mano hacia ella.

—Claro.

Cuando estamos a nada de empezar ambos recibimos un mensaje de texto: NUEVA GENERACIÓN PROYECTO GÉMINIS.

—Carol, ¿tú también lo recibiste? —pregunta una agitada Sofia.

—Si, ¿Alguien más lo recibió?

—No, debe ser por ya sabes... el internado.

—¿Por qué yo recibí esto? —. No sé qué está pasando, pero me asusta, me asusta mucho.

—Disculpen—. Dice alejándose con su teléfono una nerviosa Carolina.

Sofia y yo nos miramos con susto cuando la vemos regresar.

—Samuel también lo recibió.

—Entonces, están atacándonos por ser hijos de la primera generación que arruino el proyecto géminis.

—No tiene sentido, yo no soy ni cercano a ellos.

—Tus padres sí.

—Lucas tendría el mismo mensaje, pero míralo está tan tranquilo.

Me dirijo a mi hermano disimuladamente, el cuál está de chaperon a un lado de las gomitas de corazón las cuales están siendo atacadas por una embarazada.

—Lucas, mira esto.

—Bloquéalo, ¡YA!, no debe ser nada bueno.—Evelin a su lado mira—Pero que es eso?

—shhhhh— hacemos al unisono.

—¿Recibiste algo igual?

—No.

Contexto please.

 QUIERO PEDIR UNA DISCULPA SI MI ACENTO NO VA CON LA HISTORIA, HAGO TODO LO POSIBLE POR LOGRAR UN ESPAÑOL ESPAÑA, PERO MI ORGULLOSAMENTE MEXICANO NO PUEDE TOMAR VACACIONES...













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