Capitulo 2

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Decir que Jack recibió algunas miradas extrañas es quedarse corto.

Después de tomar la poción de visibilidad, Jack caminó por las calles de Londres, saltando alegremente.  Era extraño que los adultos lo vieran, pero no le importaba, tomando las miradas que estaba recibiendo y mejorando su juego en respuesta.

Un hombre se aferró al sombrero como si temiera que Jack lo tomara.  El adolescente lo miró a los ojos y bajó la cabeza, quitándose un sombrero imaginario de la cabeza, una gran sonrisa extendiéndose por su rostro.

El hombre se apresuró a marcharse.

Una mujer empujaba un cochecito y sostenía a un niño pequeño de la mano.  La cara de la niña se iluminó y señaló el espíritu invernal.  "¡Jack Frost!"

La mujer le envió a su hijo una pequeña sonrisa.  "No, es solo otro chico."

Los tres continuaron, la niña mirando por encima del hombro a Jack.  En respuesta, se arrodilló y lanzó una pequeña ráfaga de copos de nieve en su dirección.

Sus ojos azul verdoso se agrandaron cuando uno se metió en su nariz.  Una sonrisa cruzó su rostro y se rió, volviéndose hacia su madre.

Jack se estaba divirtiendo tanto que casi pasó corriendo junto al Caldero Chorreante.  Se detuvo y estudió el diminuto edificio.  Parecía que lo habían empujado allí como una ocurrencia tardía, como si alguien hubiera estado mirando los diseños de sus edificios y hubiera pensado: "Oye, ¿realmente necesitamos otro callejón? ¿Crees que tenemos espacio para construir otro edificio? Hm ... Sí,  seguro que lo hacemos! "  y no habían medido bien, dejando al mundo con esto.

Pero tal vez ese era el punto.  Jack pensó, entrando.  Magos y su secreto.

Recordando las muchas veces que había seguido a Lily por allí, volvió sobre sus pasos de tantos años antes.

Preparando su bastón, Jack golpeó los ladrillos en la pared, esperando haber acertado con la combinación.  Afortunadamente, la pared se movió, revelando un mundo mágico más allá.

Al estudiar la posición del sol, Jack decidió que tenía tiempo para comprar esos libros de magia elemental antes del mediodía, cuando se suponía que debía encontrarse con Snape en la heladería.  Allí se le informaría más sobre lo que se esperaba que hiciera en Hogwarts, y también se le daría suficiente poción de visibilidad para que durara hasta que se volvieran a encontrar, en la plataforma 9 ¾, en una semana.  Dumbledore no quería que Jack se quedara sin poción, en caso de que sucediera algo inesperado.  Era mejor abastecerse y tener más.

Después de echar un vistazo a la gran multitud, Jack tuvo que esforzarse para no volar sobre la multitud.  "Pueden verte ahora, idiota. No puedes usar tus poderes."  murmuró en voz baja.  Suspirando, comenzó a abrirse paso entre los grupos de magos y brujas.  Aunque volar es definitivamente mucho más rápido y conveniente.

Un brillo le llamó la atención y miró hacia la tienda de escobas.  Podría volar cuando quisiera si tuviera una escoba ...

Sintió el saco de monedas en su bolsillo.  Mientras no consiga uno grande y elegante… Sacudió la cabeza.  Seamos realistas, Jack.  Si entras allí, obtendrás el más rápido y brillante posible.  No. Solo evita la tentación.

Apartando los ojos, Jack continuó hacia la librería.

Un agradable tintineo llenó la habitación cuando el espíritu invernal entró. Mirando a su alrededor, vio todo tipo de libros.  Hubo varios en Defensa Contra las Artes Oscuras.  Tal vez debería elegir uno como repaso.  Mucha herbología, pociones y amuletos.  Después de eso, Jack no se molestó en buscar más.  Carecen seriamente de conocimiento elemental.

Familia olvidadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora