ASÍ QUE le dejaste ir, ¿eh? -suspiró su hermana Rose mientras se dirigían al
norte de Nueva York para conocer al padre de su hermana Laurel-. Adiós, gracias por
todo, ha sido un placer.
-No fue tan fácil -suspiró ____-. Pero tuve que hacerlo. Su perversa madrastra
me amenazó con hacer pública la conversación.
-Pero podríais haber buscado alguna explicación que pareciese más o menos
lógica. ¿Cuál es la verdadera razón por la que no quisiste hablar con él?
-Vivimos en mundos diferentes, Rose. No hay futuro para nosotros.
-¿Por qué no? Si Warren y yo lo hemos logrado, tú también podrías.
____ negó con la cabeza.
-Warren es como nosotras... también él creció en el orfanato Barrie. Aunque sea
un millonario, es como nosotras. Pero Justin es un príncipe, Rose. Es el Jefe de
Estado de un país europeo.
Su hermana la miró, enfadada. ____ Tilden, la más valiente de las hermanas,
parecía a punto de llorar.
-No puedes dejarlo marchar.
-No me quiere, Rose. ¿Y podemos cambiar de tema? Creo que tienes que tomar
esa salida -dijo ____, mirando el mapa-. Sí, ésa es.
Poco después, buscaban la dirección de Laurel Standish, la hermana que habían
perdido años atrás. No la encontrarían en casa porque el informe del investigador
decía que vivía en Europa, pero al menos podrían hablar con su padre y ponerse en
contacto con ella por teléfono. Pero cuanto más se acercaban, más nerviosas estaban
las dos.
Después de lo que les parecieron horas, Rose detuvo el coche frente a una casa
de piedra oscura.
-¿Estás lista?
-Creo que sí -contestó ____-. ¿Y tú?
-Lo mismo.
Salieron del coche y fueron hasta la casa de la mano. Pero estuvieron diez
minutos llamando hasta que un hombre mayor abrió la puerta.
-¿Sí?
-Hola, estamos buscando a Laurel Standish.
El hombre cerró los ojos.
-Me temo que llegan demasiado tarde.
-¿Por qué?
-Laurel se ha ido.
-¿Cómo que se ha ido? -preguntó Rose.
-Murió en un accidente de avión hace dos semanas.
____ sintió como si la hubieran golpeado en el estómago. ¿Que había muerto?
¿Habían estado a punto de volver a verla después de tantos años y Laurel había
muerto dos semanas antes? No podía ser.
Era tan injusto que resultaba increíble.
-Yo... lo siento muchísimo -dijo Rose, con un nudo en la garganta-. Acabamos de
averiguar que Laurel era nuestra hermana. No nos acordamos de ella porque nos
separaron cuando éramos muy pequeñas...
Por primera vez, la expresión del anciano se suavizó.
-¿Sois ____ y Rose?
Ellas se miraron.
-¿Cómo lo sabe?
-Soy Bart Standish, el padre de Laurel. Nosotros sabíamos de vuestra
existencia, mi mujer y yo. Os vimos en el orfanato cuando adoptamos a Laurel... pero
no podíamos adoptaron a las tres.
Rose se mordió los labios.
-Lo entendemos. ¿Laurel sabía algo sobre nosotras?
-No. Mi mujer no quería que lo supiera. Ni siquiera quería que supiera que era
adoptada. Luego murió y... -el hombre dio un paso atrás-. Quizá deberíais entrar.
-Gracias.
Bart Standish las dejó un momento a solas en el salón y volvió poco después con
un álbum de fotos y algo que parecía un diario.
-Creo que esto os pertenece a vosotras.
-¿Qué es?
-¡Son nuestros padres! -exclamó ____, abriendo el álbum-. Mira, Rose.
Y allí estaban, dos personas que eran una mezcla de las dos hermanas. Su padre
tenía las mismas cejas que Rose, su madre los mismos labios que ____. Era su herencia
genética y estaban viéndola por primera vez en sus vidas.
Rose abrió el diario. La mayoría de las páginas estaban en blanco, pero había una
carta dirigida a Rose, ____ y Laurel. ____ tuvo que hacer un esfuerzo para controlar la
rabia que le daba haber pasado tantos años sin saber quién era cuando en aquella carta
estaba su pasado.
-La carta es para vosotras. La escribió vuestra madre, explicando que vuestro
padre había muerto en un accidente cuando teníais un año. Ella no podía cuidar de
vosotras, así que os dejó en la iglesia de Saint James y se quedó esperando hasta que
sor Gladys os encontró. Aparentemente, también dejó el álbum de fotos y ese diario.
____ se sentía sobrecogida de emoción.
-¿Y por qué nadie nos dijo nada? Después de tantos años... ¿por qué nadie nos
contó quiénes éramos?
-No lo sé. Pero ahora lamento no haberle hablado a Laurel de sus hermanas.
-¿Ella no sabía nada?
-No, sólo le conté que su madre no había podido cuidar de ella.
-¿Hay algo más que pueda contarnos de Laúrel?
-Era una buena deportista. Siempre cuidaba de las mascotas y los niños del
vecindario... pero no sé mucho más. Yo viajaba todo el tiempo y apenas reconocía a
Laurel o a su madre cuando volvía a casa. Lo siento. Mucho más de lo que podáis
imaginar. Llevaos eso con vosotras -suspiró el hombre-. Perdonadme, pero estoy
cansado. Espero que lo entendáis.
____ fue la primera en levantarse.
-Gracias por todo. Este álbum y este diario significan mucho para nosotras.
-Buena suerte -se despidió Bart Standish.
Una vez en el coche, Rose y ____ se miraron.
-Laurel ha muerto, ¿te lo puedes creer?
-Es... horrible. Pero al menos nos ha dejado esto -murmuró ____, abriendo el
diario. Luego empezó a leer:
Mis niñas, si pudiera hacer otra cosa, lo haría, pero os quiero tanto que no puedo
dejar que viváis una vida de penurias como la que tendríais que vivir si os conservara a
mi lado. Sólo porque os quiero con todo mi corazón he decidido dejar que otras
personas cuiden de vosotras. Por favor, perdonadme.
____ cerró el diario y miró a Rose con lágrimas en los ojos.
-Siempre había temido que nos hubieran dejado porque no nos querían. Ahora
sabemos que eso no es verdad.
Rose asintió mientras arrancaba el coche para salir de aquel sitio que casi había
completado el triunvirato.
Pero se detuvo abruptamente cuando el padre de Laurel salió de la casa y
empezó a hacer gestos con el brazo.
-Esto también es vuestro -dijo, poniendo un sobre en las manos de ____-. Son las
cartas de Laurel desde Europa. Quizá así podáis conocer un poco a vuestra hermana.
Ésta de aquí es la última que envió. Deberíais leerla.
No les dio tiempo a darle las gracias. Sencillamente, se volvió y entró en la casa
sin decir una palabra más.
-Léela -dijo Rose.
____ abrió el sobre y comprobó que la carta había sido enviada tres semanas
antes.
-Papá, las cosas por aquí empiezan a ponerse mal. Pero quiero que sepas que
seguiré enviando dinero para ayudarte a pagar la hipoteca. Si me pasara algo, tengo
una amiga, Glenna Cunliffe, que ha prometido llevarte mis cosas. Si fuera así, ella se
pondría en contacto contigo... -____ se detuvo para mirar a su hermana.
-Una carta muy profética.
-No dice nada más. Y sólo hay un par de cartas y algunas postales. Parece que
Laurel no tenía buena relación con sus padres. Al menos, con su padre.
-Qué pena.
-Deberíamos localizar a Glenna Cunliffe. A lo mejor ella puede contarnos algo
más sobre Laurel.
Rose asintió con la cabeza.
-Es como si, por fin, hubiera encontrado la respuesta a un acertijo que llevo toda
mi vida intentando descifrar.
-Sí -murmuró ____, mirando por la ventanilla. Era como si, de repente, todo fuese
de otra forma. Como si entendiera el mundo de otra forma-. Laurel es la pieza que
faltaba en el rompecabezas; una pieza que ya no podremos recuperar. Pero aun así ha
llenado un vacío.
-Y nos ha demostrado que la verdadera familia es la que uno mismo forma, no
necesariamente las personas que llevan la misma sangre que tú. No importa de dónde
vengas, lo que importa es dónde llegues.
____ arrugó el ceño. Sabía que se refería al príncipe Justin.
-Se marcha hoy, así que no vas a convencerme para que hable con él.
-Eres más cabezota que yo -se encogió su hermana de hombros.
-Más realista. ¿Se te ha ocurrido pensar eso?
Una hora y media después, mientras atravesaban el puente de George
Washington, sonó el móvil de ____.
Era Karen.
-¿Estás viendo el canal ocho?
-No, estoy en el coche con mi hermana. ¿Qué pasa?
-Ven al hotel ahora mismo. Aparca en doble fila, en triple fila si es necesario,
pero ven lo antes posible. El príncipe Justin está a punto de dar una rueda de prensa y
los periodistas están preguntando por ti.
____ colgó, atónita, y le contó a su hermana lo que acababa de decirle Karen.
-Estamos a cinco minutos del hotel Montclair. Te dejaré en la puerta para que
entres corriendo... y buscaré un sitio donde aparcar.
-Estoy un poco nerviosa -le confesó ____.
-¿Desde cuándo te pones nerviosa?
-Desde que me enamoré del príncipe -contestó ella.
-¡Entonces lo admites! ¡Estás enamorada de él!
-Sí, estoy enamorada de él. ¿Y qué? Rose sonrió, mientras pisaba el acelerador.
-Que tienes que hablar con él antes de que se marche.
-Pero...
-Pero nada -la interrumpió su hermana-. No pienso dejar que pierdas lo mejor
que te ha pasado en la vida sólo porque eres una cabezota.
CAPÍTULO 14
CUANDO ____ llegó a la sala de conferencias, Justin había terminado de dar la
rueda de prensa y estaba contestando a las preguntas de los periodistas.
Caroline Horton estaba allí, junto con otras luminarias del cotilleo de Nueva
York. La princesa Drucille estaba en la primera fila, flanqueada por lady Ann y lady
Penélope.
Un reportero levantó la mano y Justin le hizo un gesto con la cabeza.
-La joven norteamericana con la que acudió al baile benéfico, ¿quién era?
-Se llama ____ Tilden -contestó el príncipe.
-¿Va a ser ella la princesa de Beloria?
-Ese sería mi mayor deseo, pero... -Justin no terminó la frase al ver a ____ en la
puerta.
-¿Pero qué, Alteza?
-Pero no sé si ella quiere. La señorita Tilden ha tenido que soportar muchas
cosas por mi culpa.
-¿Qué cosas?
-La esposa de mi difunto padre intentó chantajearla para que se alejase de mí...
Por supuesto, de inmediato todos los periodistas empezaron a hacer preguntas a
la vez y las cámaras apuntaron directamente a la princesa Drucille, que no sabía dónde
esconderse.
-¿Intentó hacerle chantaje?
-Me temo que sí. Sólo una mujer desesperada por conservar un estilo de vida que
no le corresponde llegaría a tales extremos -contestó el príncipe.
-¿Cómo intentó chantajearla?
-Amenazando con hacer pública una grabación, obtenida de forma ilegal, en la
que yo le pedía a la señorita Tilden que me acompañase al baile benéfico. Ella,
lógicamente, se mostró muy prudente porque apenas nos conocíamos, pero yo intenté
convencerla porque se había convertido en una persona importante para mí. Espero
haberlo hecho porque nunca he conocido a una mujer como ella -respondió Justin-. Y
estoy seguro de que no volveré a encontrar a nadie que se le parezca. Por eso me
entristece tanto irme de Nueva York.
-¿Quiere decir que ha pedido su mano?
-Me encantaría hacerlo... pero no sé cuál sería su respuesta.
____ dijo que sí con la cabeza, temblando por dentro.
-Si ____ Tilden aceptara ser mi mujer, yo sería el hombre más afortunado de la
tierra.
Había decenas de manos levantadas, pero Justin sólo tenía ojos para ____.
-¿Eso significa que van a casarse?
-No lo sé. ¿Significa eso, ____? Ella tragó saliva.
-¡Es ella! -gritó alguien.
Las cámaras se volvieron hacia ____.
-¿Va a casarse con el príncipe, señorita Tilden?
Ella apretó los labios para no ponerse a llorar, pero avanzó hacia la mesa sin
fijarse en las cámaras ni en los fotógrafos. Sólo tenía ojos para Justin.
Y Justin sólo parecía tener ojos para ella.
-¿Qué dice, señorita Tilden? ¿Quiere casarse conmigo? -preguntó el príncipe,
clavando una rodilla en el suelo.
Por primera vez en su vida, ____ se sintió completa, segura. Como si, por fin,
hubiera llegado a casa.
Tenía la certeza de que aquello era lo que quería. No había estado más segura de
nada en toda su vida.
Pero como no podía pronunciar palabra, sólo pudo asentir con la cabeza.
-¡Ha dicho que sí! -gritó alguien.
La palabra «sí» se repitió por toda la sala como un eco.
Justin se incorporó y la tomó entre sus brazos.
-¿Estás segura? No quiero que te sientas presionada por la multitud.
-¿Multitud? ¿Qué multitud?
Riendo, Justin la besó en los labios antes de volverse hacia los periodistas.
-No había planeado esto, pero parece que han conseguido ustedes la historia que
querían. Beloria tiene una nueva princesa y su nombre es ____. Y acaba de hacerme el
hombre más feliz del mundo pace.ܘe
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A Beautiful Love JB&TU(Terminada)
RomantizmHOLAAA NUEVA NOVEEEEEEEEEEE 'SI LA VAS A LEER AL MENOS VOTALA'