Ya había pasado un mes, desde esa terrible noticia. Todo fue muy difícil desde ese momento. Liam tuvo que comenzar un trabajo para aunque sea tener algunos centavos. Yo lo quería ayudar pero él se negaba. Tuve que dejar de ir al colegio, extrañaba mucho a mis amigos. A la noche no dormía bien, solo soñaba con tener a mi mama en mi casa. Pero sabía que eso nunca más iba a pasar.
-¡Zoe! Me voy a trabajar
-¿puedo ir?
-Sabes que no, quédate aquí a leer algunos libros o a hacer algo.
-¡Oh!
Todo se empezaba a complicar, ya no era la misma que antes. Lo peor, es que no teníamos familiares cerca, para que aunque sea Liam termine sus estudios, era el último año de secundaria de él. Y siempre soñó con entrar a la universidad para estudiar música.
Un dia tocaron la puerta y atendió Liam, yo fui detrás de él. Cuando abrió la puerta había dos hombres.
-¿Familia Payne?
-Si.
-Siento decirles que se tienen que ir de su casa, al menos que paguen el alquiler de la casa.
-¿Qué? No podemos
-Son $30.000
-¿Hay algún mayor aquí?
-No, mi madre murió hace un mes y es imposible pagar esa cantidad de dinero.
-Entonces se tendrán que ir de su casa.
-¡No! Por favor no nos hagan esto.
-Tranquila Zoe.- me dijo con las lágrimas en los ojos.- Por favor, no nos haga esto, ha sido el peor año de toda nuestra vida. Mi hermanita tuvo que dejar sus estudios al igual que yo. Tuve que empezar a trabajar porque no teníamos ni un centavo.
-Lo siento, mañana queremos la casa vacía.
Cerró la puerta.
-Liam, ¿Por qué? ¿Por qué?
-No te preocupes, vamos a buscar algún lugar.
-Es el peor año de todos.
-Lo sé, pero tenemos que ser fuerte y salir adelante.
Tratamos de meter la mayor cantidad de ropa en las maletas. Para poder llevarnos.
Al otro dia, nos despedimos de nuestro hogar y nos fuimos hacia algún lugar de la ciudad. Todos estaban muy apurados, yendo al trabajo y veíamos como los niños iban al colegio acompañados de sus padres.
Era muy difícil la vida en la calle. Todos nos miraban con cara de lastima y a veces me da bronca, porque ellos pensaran que superamos esto, pero en realidad no saben lo que sentimos dentro.
