Al otro día, me desperté con unos gritos.
-¡¿Qué diablos haces acá?!
-Perdone señor, solo quería acompañar a Zoe.
-¿La conoces?
-Anoche nos conocimos.
-Entonces significa que dialogo con alguien.
Escucho unos pasos que van a la puerta de donde me encontraba.
-¡¿Qué haces con esta sabana?!
-Niall me la dio, es que tenía frió.
-¡No me importa! Ahora anda con los otros chicos a desayunar.
-Por favor no le hagas nada, el me ayudo mucho.
-Cuando lo vuelvas a ver, te vas a arrepentir de esto.
-¡Zoe! Hazle caso, voy a estar bien.
-¡Andate de aquí niño desubicado!Me levante y me fui en caminata rápida para la fundación.
Me dirigí al baño, allí me peine un poco y me lave la cara.
-¿Cómo estuviste?
-Bien, Zayn
-¿Te hizo algo?
-No, estoy bien ¿Dónde desayunamos?
-Ven, te acompaño.Los dos fuimos al comedor y Zayn me sirvió unas tostadas con café con leche.
-Sos muy buen cocinero.
-Lo sé.
-¿No tendrías que estar trabajando? -Si, pero con tal de que Jessicq no se dé cuenta todo bien.
-Me hice amiga de un chico, que me dio una manta para cubrirme del frio. Es muy bueno pero ahora tengo miedo de que Bartolomé le haga algo.
-Seguro que lo va a traer para la fundación.
-Espero que no.En eso entra Jessica.
-¡Que hacen acá mocosos! ¡Vallan a trabajar!
Los dos nos levantamos y fuimos a trabajar.
Yo estaba con la cara toda manchada de tierra y la ropa sucia.Hoy nos tocaba cargar ladrillos. Agarre unos cuantos, los tenía que llevar hasta la parte del tercer piso, nunca había subido ahí.
Pesaban muchos, iba subiendo las escaleras cuando...