La mujer fría como el hielo (Tangiyuu)

Una noche helada

El nombre que le puse a Giyuu (Porque no se como se llamaría en su versión femenina) fue:

Gina=Plateada.

Edades: Tanjiro (22), Gina (24)

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Era un noche demasiado fría, su turno había terminado demasiado tarde y en esos momentos tomaba un atajo por el parque para llegar más rápido con su hermana. Camino todo recto hasta que vio a una chica sentada en una de las bancas.

- ¿No tendrá frio? - se pregunto a si mismo.

Se podía ver que estaba usando una falda negra y una blusa blanca de hombros descubiertos, no tenia un abrigo o algo que evitara que se congelara, pero no temblaba ni nada, era como si no le afectara.

Se acerco a ella con la intención de preguntarle si estaba bien y para ofrecerle su suéter, pero ella solo lo volteo a ver y al instante se paro para marcharse.

- ¡Señorita, espere! - le dijo pero no lo hizo caso y siguió caminado.

Vio como se marchaba, era mas alta que el y su cabello era tan negro como la noche, apenas y pudo ver sus ojos, pero se dio cuenta que eran de un tono azul similar al zafiro. Con solo verla se dio cuenta que era demasiado guapa, pero también noto que era una chica muy solitaria por su mirada.

Se fue a su departamento y al entrar saludo a su hermana Nezuko, la cual se notaba preocupada por él debido al clima.

- ¿Estas bien hermano, no tienes frio? - le pregunto.

- No te preocupes - se quito su suéter y lo dejo en uno de los - Con el suerte me basto.

- Esta bien, ven, siéntate, la cena ya esta lista - ambos se sentaron y comenzaron a comer.

- Nezuko, ¿Tu has visto una chica de cabello negro sentada en el parque? - pregunto al recordar a la chica.

- Mmm, creo haber escuchado hablar de ella - dijo mientras ponía una mano en su mentón - Dicen que siempre esta ahí, como si todos los días esperara a alguien.

Pasaron varios días, todas las noches pasaba por el parque y siempre la veía, se acercaba y ella se alejaba, Tanjiro cada día tenia mas curiosidad por ella. Un día fue diferente, seguía haciendo frio, pero esta vez también estaba lloviendo, el peli-burdeo corrió al parque y la vio, al ver que se estaba mojando, se acercó.

Esta vez ella no se alejo.

- ¿Esta bien señorita? - se paro frente a ella, elevo su mirada -¿No tiene frio?

- No, no tengo frio - respondió, su mirada estaba algo perdida y su voz sonaba quebrada, pero a la vez tranquila.

- ¿Qué hace aquí a estas horas? - se sentó junto a ella, sin importarle si se mojaba o no, la cubrió también con su paraguas.

- No se, ya me acostumbre a venir aquí tantas veces que ya lo hago involuntariamente - suspiro -Perdón por siempre alejarme cuando me llamas, no me gusta hablar con la gente.

- No importa, ¿Señorita...?

- Tomioka, me llamo Gina Tomioka - le respondió con una sonrisa triste.

- Un placer, yo me llamo Tanjiro Kamado - también le sonrió, estaba muy feliz, por fin pudo hablar con esa chica.

- Tu también siempre vienes por aquí, ¿Puedo saber el porque?

- Salgo demasiado tarde del trabajo, vengo por aquí para llegar mas rápido a casa - se rasco la nuca - Aunque también lo hago porque me llamaste la atención - susurro sonrojado, la oji-azul si lo escucho, formando una sonrisa genuina en su rostro.

- ¿En que trabajas? - pregunto con genuino interés.

- En una cafetería cerca de aquí - dijo mientras señalaba hacia cierta dirección - Mia amigos y yo preparamos los mejores postres.

- Seria interesante probarlos.

- ¡Ven un día! De seguro te gustaran - se fijo en la mirada de Gina, pudo ver que su mirada ya no estaba tan opaca, podía ver brillo en sus ojos - ¿Tu te dedicas a algo?

- Si, trabajo con una amiga en una tienda de ropa, pero me estoy tomando un descansó de un par de semanas - Tomioka respondió mientras se abrazaba a si misma, comenzaba a tener frio y Tanjiro lo noto.

- Esta haciendo mas frio - dijo mientras se quitaba su chaqueta y se la daba a la azabache - Ten, póntelo para que no enfermes.

- Ya te dije que no tengo frio - no estaba dispuesta a aceptarlo - Además, ¿No tendrás frio tu?

- No, siempre traigo dos para cuando me tope contigo - le sonrió y ella lo agarro.

- Gracias - rio un poco y se la puso - "Se siente cálida..." - pensó - Adiós Kamado - se levanto y comenzó a avanzar.

- ¡Adiós Tomioka! - respondió mientras también se paraba, pero Gina le dijo algo mas.

- Por cierto, también llamaste mi atención - dijo algo sonrojada antes de irse por completo.

El pecho del peli-burdeo comenzó a latir demasiado rápido mientras se sonrojaba, se quedo ahí parado hasta que regreso a la realidad. Se fue a su casa mientras sonreía y solo pensaba en volver a verla para conocerla a profundidad, quería saber mas de ella, quería ser su amigo o incluso algo mas, ese pensamiento estaba oculto en lo mas profundo de su ser.

Esa noche helada, se sintió cálida...