no tan omega › chanlix

uno.

1 año atrás.

Bang Chan y Felix, unos chicos de apenas 17 y 19 años, se encontraban jugando videojuegos en la casa del segundo mencionado.

Ambos eran unos chicos que guardaban un amor por el otro desde que tenían memoria. La razón de que todavía no esten juntos es sencilla, ambos quieren esperar hasta que se presenten para confirmar sus sospechas de que ambos son pareja destinada.

Felix en ocasiones su ánimo se veía abajo, el quería ser un gran alfa para cuidar y mimar a su Bang Channie como este se lo había pedido cuando tenía apenas 5 añitos. Pero estaba sufriendo de una presentación tardada, pues ya contaba con 19 años, y aún no había pasado por su primer celo, cuando este normalmente llega entre los 15 a 17 años.

También una de las cosas que le desanimaban, era su contextura, era un chico delgado, de cintura pequeña y baja estatura, su piel era tan suave y delicada como la de un bebé pero aún así mantenía la ilusión de que cuando se presentara como alfa, se convertiría en alguien alto y fornido para cuidar de su Bang Channie.

Y Bang Chan por su parte, había crecido notoriamente, actualmente ya medía lo mismo que Felix, y poco a poco su cuerpo empezaba a tornarse más ancho y fuerte, pero ambos pensaban que eso se debía a que al menor le encantaba ejercitarse. Las facciones de su cara comenzaban a endurecerse, haciendolo ver como alguien mayor y demasiado atractivo. Pero en su mente, él pronto se convertiría en el lindo y pequeño omega de su mayor.

Ambos no tenían idea de lo que aquello podría significar, ellos mantenían la viva ilusión del deseo que crearon cuando eran unos niños, sobre todo Bang Chan.

──Hyung~ ¿Cuándo me marques tú y yo nos iremos a vivir juntitos y tendremos muchos bebés? ──Preguntó de la nada Bang Chan, pausando el juego con el que se estaban entreteniendo. Felix sonrió y asintió de inmediato.

──Si Bang Channie, también te voy a consentir mucho, seré un buen alfa para ti. ──Dijo orgulloso, Bang Chan sonrió entusiasmado y se lanzó a los brazos de su mayor, hundiendo su carita en el cuello de este.

Olfateo al sentir un aroma dulce provenir de aquella parte, Malvaviscos y chocolate. Era un aroma casi imperceptible, no encontraba explicación, era como si estuviese allí pero a la vez no. Pero eso no importaba. Suspiró, algo en su interior se sentía muy inquieto y feliz al oler ese aroma.

──Lixie~ hueles muy rico. ──Ronroneo agusto, olfateando con más esmero.

Felix quedo muy confundido ante aquello, más no dijo nada, seguro su pequeño se refería a su loción.

Después de un rato más así, en el que también ambos platicaron sobre su futuro ya que hablar e imaginar que en unos años estarían juntos, en una gran casa y con sus futuros hijos corriendo por todo el lugar era algo que los emocionaba en demasía.

Luego de aquello, Felix se encargó de dejar a Bang Chan en su casa, saludando a la señora y señor Bang antes de partir a su propio hogar con una sonrisa en sus labios, con la ilusión de que pronto ambos se presentarían para poder estar juntos.

꒰୨ 🍓 ୧꒱

Bang Chan no dejaba de removerse inquieto en la cama y soltar quejidos lastimeros, desde que había olfateado ese aroma tan delicioso en el cuello de su hyung, un sentido suyo se había activado, pero no lograba descifrar que era.

Sus encías picaban, su vientre bajo comenzaba a doler al igual que sentía como su parte íntima comenzaba a reaccionar. Poco a poco su habitación comenzo a inundarse de un potente aroma a Café y tierra mojada.

Sentía que alguien más estaba despertando en su interior, no entendía nada. Comenzó a retorcerse de dolor y gritar a su mamá, en busca de ayuda. A los momentos, Yang Mi entro asustada a la habitación, sintiendose mareada por el fuerte olor que esta tenía.

Fue corriendo hacia la cama de su hijo, quien solo se retorcía con los ojos cerrados y soltaba sollozos.

──Bang Chan, bebé, ¿Puedes escucharme? ──Le habló, su hijo solo se giro a verla y abrió sus ojos, los cuales ahora eran rojos, Yang Mi entendió de inmediato lo que pasaba.

──M‐mamá, m-me du-duele. ──Dijo Bang Chan entre quejidos lastimeros.

Yang Mi sin decir nada salió de la habitación, corriendo hacia el despacho de su esposo para informarle lo que pasaba y también pedirle que fuese a comprar unos supresores.

Min Ho de inmediato salio de su casa, importandole poco que fueran las 11 de la noche. Yang Mi por su parte, tomo un paño mojado y volvió a la habitación de su hijo, viendo como este sollozaba sin entender lo que pasaba.

Puso el paño húmedo en la frente de Bang Chan y comenzó a soltar sus feremonas maternales, cosa que logró calmar a su hijo.

──¿Q‐qué es lo qué p-pasa? ──Preguntó entre quejidos por estar soportando el dolor.

La señora Bang no sabía por donde comenzar, ella sabía que al momento de decirle lo que pasaba a Bang Chan, este se llevaría una gran decepción y lo que menos quería era ver a su cachorro triste. Pero no podía hacer nada, era algo que no podía cambiar y que su retoño necesitaba saber.

──Bang Chan, es...es tu celo, bebé. ──Le dijo, Bang Chan abrió sus ojos sorprendido y sonrió emocionado a pesar del dolor en su cuerpo.

──¿Ya soy un omega, mamá? ──Preguntó entusiasmado, Yang Mi solo bajo la mirada negando, Bang Chan borro su sonrisa de inmediato.

──Te presentaste como un alfa, Bang Chan.

La mirada del menor se fue apagando, con ella el aroma agrio a tristeza y enojo comenzo a inundar la habitación, haciendo a la mayor ponerse alerta, sabiendo que no era bueno estar en aquel lugar, salió de la habitación, cerrando con seguro la puerta de esta y escuchando desde afuera los gritos y gruñidos que Bang Chan comenzo a soltar.

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La mañana había llegado, en toda la noche los aullidos lastimeros de Bang Chan no dejaron de escucharse. Los padres del menor tampoco pudieron darle los supresores, pues su hijo recién se presentaba como alfa y no como cualquiera, si no como un alfa pura sangre, como su padre. Por lo tanto no era bueno acercársele mientras estuviera enojado.

Yang Mi entro despacio a la habitación, viendo como esta estaba hecha un desastre y su hijo estaba sentado en su cama, sollozando.

La mayor se acerco hasta su hijo, sentándose a su lado con un vaso de agua y el supresor.

──Bebé. ──Llamó, Bang Chan levanto su mirada entristecida──. Necesito que te tomes el supresor para bajar los dolores de tu celo. ──Explicó, Bang Chan solo asintió y tomo el agua y la pastilla, tomándose esta de inmediato.

Se quedaron un rato en silencio, Yang Mi no sabía que decir, pues sabía la razón de la tristeza de su hijo y no sabía que palabras eran las correctas en un momento así.

──No podré ser el omega de Felixie. ──Bang Chan habló y escondió su cabeza entre sus piernas dobladas. La mayor solo lo miro entristecida.

──Bebé, hay la posibilidad de que Felix se presente como omega. ──Yang Mi trato de animar, Bang Chan solo solto una risa irónica.

──Mamá, desde pequeños sabemos que él será un alfa.

──Aunque sea alfa Bang Chan, puedes estar con él, ser de la misma jerarquía no les puede impedir amarse. ──Ánimo, sobando la espalda de su hijo.

Bang Chan solo asintió y abrazo a su madre, necesitaba su apoyo. Estaba demasido triste y enojado, su deseo que por tanto tiempo pidió desde lo más profundo de su corazón, no fue cumplido.

O tal vez si, pero no de la manera que quería y él aún no lo sabía.

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Actualización, gracias por leer y espero que les guste la adaptación<3