TXT ❥Es mejor si te evito/ Segunda Temporada【 YeonHyun/ YeonTae🎔】

ꕥCapítulo 28ꕥ

☙【 Pov. Yeonjun 】❧

Por alguna extraña razón no fui capaz de pegar el ojo a pesar del enorme cansancio que traía gracias al día anterior tan ocupado.

El despertador seguía sin sonar, pero ya no valía la pena intentar quedar dormido por lo que me levanté de la cama, tomé mi celular y salí de la habitación tratando de no hacer ruido para no despertar a nadie.

Sin siquiera tenerlo planeado avancé hasta la puerta que nos llevaba al diminuto jardín. Ya estando afuera me senté en la única banca.

Alcé la mirada, observé el oscuro cielo, lleno de hermosas estrellas que me hacían verlas por un buen rato sin tener el sentimiento de haber perdido tiempo valioso.

El aire estaba fresco, extrañamente me transmitía nostalgia, y el ambiente era tan agradable, nada comparado al que me esperaba al entrar por esa puerta.

Bajé la mirada y solté el aire que había estado reteniendo por algunos minutos.

Había "desperdiciado" el momento indicado para asearme antes de que el baño se hiciera tan solicitado, aunque no me arrepentía de haberlo hecho. Todo había sido muy relajante, algo que sin duda ya me hacía falta.

Como lo más probable era que ya todos estuviesen despiertos ahora me tocaba hacer el desayuno.

Entré a la casa, yendo directamente hacia la cocina. Me puse un delantal de cocina y después comencé a sacar las cosas que necesitaría para hacer la comida como si ya hubiese planeado con anterioridad lo que debía hacer.

Se había convertido en una rutina.

Saqué el celular solo para ponerlo sobre la mesa y poner el reproductor de música en aleatorio, cuidando de que el volumen no estuviese lo suficientemente fuerte como para molestar a los demás. Fui hacía el lavamanos, y luego empecé el proceso de hacer el desayuno.

Soobin entró a la cocina justo cuando estaba a nada de servir la comida, algo que me favoreció, pues la canción que sonaba fue interrumpida por una llamada entrante. Con la mirada le pedí el favor de ayudarme con el resto y el accedió. Colgué el delantal algo apurado y salí corriendo de la cocina, yendo directo al jardín.

Volví a sentarme en la banca, solté un suspiro y contesté la llamada.

—¿Mamá? ¿Por qué tan temprano? ¿Pasa algo?

Pregunté rápidamente y con mucha preocupación. Desde la otra línea se escuchó una risa, eso me tranquilizó muchísimo.

 —«Ayer me contaste que se te hizo tarde, pensé que sería mejor adelantar la llamada y hacerlo a estas horas para que no te retrases de nuevo»

—Muchas gracias, pero no debiste despertarte tan temprano. Vuelve a dormir.

  —«Eso haré. Ya cumplí mi propósito así que no te hago perder más tiempo. Cuídate mucho, aliméntate y duerme bien, recuerda que el trabajo no lo es todo en esta vida y relájate lo más que puedas, tu salud está primero»

—Te extraño mucho...

  —«Y yo igual, hijo. Nunca olvides que te amo muchísimo y desde aquí te estaré enviando buenas energías»

Sentí mis ojos llenarse de lágrimas. Quería abrazarla muy fuerte y no soltarla. Eran de esos momentos en los que te dan ganas de regresar el tiempo y aprovecharlo en pasar más tiempo con aquellas personas que siempre han cuidado de ti con mucho amor. Pero ya no se puede hacer nada más que vivir el presente.

  —«No olvides saludar a los chicos de mi parte»

Me despedí y terminé la llamada.