➪ 23.

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El viernes, Takashi se levantó atareado desde temprano, al día siguiente sería el cumpleaños de los gemelos y aunque no tendrían una fiesta con miles de niños corriendo por su casa, siempre se esforzaba por planear el día de la manera perfecta para que ambos niños se divirtieran.
Hakkai le había estado ayudando, por lo cual no fue tan pesado como otros años en ese aspecto, pero si que había algo distinto a los otros años y que no era precisamente algo que le agradará.

Todos los días, desde el sábado anterior, cuando tuvo la desafortunada visita de Haitani Ran, se había vuelto a aparecer puntualmente por la mañana en su casa, un día incluso le llevo un café, todas y cada una de las veces fue recibido con la puerta golpeando su nariz y un estridente gritó al son de "¡Lárgate!"

Hakkai no estaba enterado, Mitsuya tenía la sospecha de que, de decirle, probablemente el asunto se volvería un problema inminente. El sabía que por más que Hakkai Shiba demostrará ser una persona consiente y responsable, a fin de cuentas era un alfa y los alfas son territoriales, posesivos y terriblemente orgullosos, esta escrito en su ADN y si era honesto consigo mismo, la verdad es que no tenía ganas de lidiar con alfas enojados y soltando feromonas que podrían asustar a sus cachorros.

Solo esperaba que el día del cumpleaños no se le ocurriera aparecer, porque de ser así definitivamente le arrojaría el televisor a la cabeza y que le rezará a cualquier deidad existente por tener el suficiente tiempo para huir, porque de no hacerlo, el televisor sobre su cabeza sería el menor de sus problemas.
Habría pensado en llamar a la policía, denunciar que había un acosador apareciendo en su casa constantemente, pero se resigno, con el pensamiento de que si lo hubiera hecho, lo más probable es que las autoridades hubieran hecho caso omiso simplemente por tratarse el de un omega y Ran de un alfa.

-Papá - llamo Yuu.

-¿Si, cariño? - pregunto Takashi, sonando amable y cariñoso al dirigirse al menor de sus hijos.

-Llamaron a la puerta - le aviso.

Takashi sintió su sangre hervir y se encamino a la puerta, preparándose para enlistarle a Haitani Ran sus errores desde el momento en que nació hasta los que cometería en futuros años a manera de gritos e insultos.

-¡Tu maldito hijo de... - exclamó, hasta que vio a las personas tras la puerta, boqueo, confundido.

-¿Hijo de...? - pregunto, a medias, Souya Kawata.

-Oh, perdón, creí que era otra persona... - murmuró apenado, miro por sobre el hombro del omega de cabello azul, encontrando a un chico de cabello en distintos tonos de morado.

-Mitsuya, hola - saludo el, después de reconocerlo.

-Hola - devolvió, captando la mirada confusa de Souya.

-¿Se conocen? - pregunto.

-Íbamos juntos en la escuela y el... - dudo.

-Salía con su hermano - completo Takashi, riendo internamente por la manera en la que Rindou dudo, como si temiera hacerlo sentir incómodo con el comentario.

Souya se vio genuinamente sorprendido, a su manera, porque en los años que llevaba de conocer a Mitsuya, jamás había escuchado de alguna pareja suya, aunque tenía lógica que no supiera nada si es que había sido hace tanto tiempo. También le pareció curioso que el hermano de su actual pareja fuera un 'ex' de Takashi.

-¿Has visto a Ran últimamente? Creo que está en la ciudad - menciono Rindou.

-¿No lo sabes? - pregunto de vuelta el, curioso.

-La verdad no somos tan unidos como antes - le contó, luciendo algo incómodo al respecto.

-¿Podemos pasar? - pregunto Souya, rompiendo el pequeño pero incómodo silencio que se formó. Takashi asintió y los tres se encaminaron hasta la sala de estar, donde tomaron lugar.

-Venía a dejarte esto - dijo Souya, poniendo sobre la mesa cuatro cajas perfectamente envueltas con papel de regalo -Para los gemelos, estos son míos y estos de Nahoya - indicó. Takashi le sonrió antes de hablar, pero el turno le fue ganado por Rindou.

-¿Gemelos? - pregunto, curioso.

Y como si fuera un espectáculo cliché de magia, los gemelos bajaron por las escaleras y se tiraron sobre Souya, en un desastroso abrazo. Los gemelos eran bastante unidos con todos los amigos de Takashi y ellos querían a ambos niños como si fueran sus sobrinos.

-Ellos - contesto Souya en su lugar, abrazando de vuelta a los niños encima suyo.

Souya se alejo un poco de la conversación para concentrarse en los gemelos, y específicamente en Yukine, que hacía caras graciosas o chistes pésimos para tratar de hacer sonreír al omega de cabello azul, resultando inútil, como cada ve que se veían y lo intentaba.

-Mis hijos - informo Takashi, ante la mirada confusa de Rindou.

-Oh, son lindos - dijo el, sonriendo genuinamente, incluso luciendo algo enternecido por imagen que daba su novio junto a ambos niños -¿Que edad tienen? - pregunto, por alargar la plática.

-Mañana cumplen siete - dijo, dudoso, temiendo que el chico hiciera las cuentas y sospechara algo, pero al parecer no fue así. Al menos no al principio, porque Rindou estaba muy concentrado viendo a Souya jugar con los niños. Sin embargo, después si que le pareció extraño.

-¿Siete? Pero... ¿Tenemos la misma edad verdad? - pregunto, Takashi bufo, deseando haber mentido con la edad de los gemelos. -Wow, eras muy joven - menciono, sin sospechar más al respecto y Mitsuya agradeció que fuera tan estúpido cómo para no hacer los cálculos a detalle y notar que su hermano estaba bastante implicado en la situación.

Un rato después se marcharon, dejándolo solo con los gemelos nuevamente, el resto de ese día recibió muchas visitas más, como por ejemplo, Draken y Emma, Yuzuha, Mikey y Takemichi, Pah-chin y Peh-yan, y por último Hina, todos para dejar algún obsequio a los gemelos.

Ran no apareció ese día y lo agradeció infinitamente, esperando que especialmente al día siguiente no se le ocurriera poner un pie ahí. En cuanto a Hakkai, el simplemente no se había aparecido porque había sido invitado por los gemelos al día siguiente.

-Papá - llamo Yukine.

-¿Si, enano? - pregunto, sonriendo divertido ante la mirada llena de indignación de Yuki.

-¡Voy a crecer y voy a ser más alto que tú!

-Si, claro, ¿Que querías? - pregunto, sonriéndole.

-¿Puedo tener un conejo y un gato? - pregunto, con ojitos esperanzados.

-Elige uno - contesto.

-Necesito los dos, ¡Solo así tendré mi gatonejo!

Takashi se dijo que si su hijo quería una mascota, iba a regalarle una, pero tendría que salir ese mismo día a buscar, para así que al día siguiente el animalito ya estuviera ahí.
Finalmente decidió salir a la calle y buscar un gatito callejero, para poder adoptarlo.

•••

Más personajes se suman a la trama
[Se emociona en pandillero]

¿Vieron el capítulo de tr de hoy?
Yo sí.
Spoiler: no sabía si llorar por Baji o reír por el corte de Chifuyu KDLKD

Probablemente esté fic acabe muy pronto.

Miren, yeih. <3

 <3

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Eso, chao. <3

FUTURE ⸻ MitsukkaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora