¡Chúchuú! Pasajeros al tren destino enemistad, ¡suban!

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"Todo pareció salir bien al final. El guía os abrió el pasadizo y tras bajar del ferrocarril de vuestra zona os despedisteis hasta el día uno"

¡Era el día! 1 de Septiembre de 1971. Oficialmente era el primer día de clases. Tenías que tomar un tren a Hogwarts a las 11:00am como os había indicado aquél guía y Dumbledore a tu padre. Claro está tú sabías mas bien nada de esto último. Sus viajes seguían siendo un misterio para tí. A veces volvía con información sobre el sitio como los nombres de las casas cosa que ya sabías por Severus, que se estudia de interno hasta los 17años salvo vacaciones o que ponían a manipular mandrágoras a los niños de 1er año.

Mas o menos conocías un poco de todo y te habías pasado el verano estudiando todo lo posible. Tu padre te había dejado algunos apuntes de tu madre que no pudiste leer nunca antes y él mismo te estuvo enseñando defensa y algunos ataques, tanto mágicos como físicos. Aunque para esto último he de decir que no se te daba nada mal el esquive. Conseguiste bastante agilidad en tus años en Japón escalando árboles y jugando sobre piedras en el río mientras esquivabas Koi* que subían contracorriente o jabalíes salvajes que atacaban sin avisar.

Como sea, eran las 4 de la mañana y ya estabas en vela con un frío que pela vistiéndote bajo el futón a moco tendido. Por mucho que lo supieras desde Mayo aún no te hacías a la idea de irte realmente. Lili te ayudaría mucho si es que caíais en la misma casa pero seguirías estando preocupada por la situación de tu padre y el hecho en sí de no poder verle en muchos meses. Jamás habías estado separada de él mas de una semana y era en compañía de tu madre y el resto de tu familia materna. Sin tus decenas de primos y tíos, sin tus amigos animales de Japón, sin mamá, sin papá...

Comenzaste a llorar mas fuerte haciendo que tu padre lo notara y entró a tu habitación a consolarte. Él era bueno y cálido en la intimidad de su casa pero a menudo se la pasaba pensando para sí muy serio y haciendo muchas cosas que no entendías. Desde la muerte de tu madre y haber tenido que desertar del todo de Japón se volvió mas frío y distante sin querer y echabas de menos su abrazos y cancioncillas.

Cuando te vió así solo pudo dar una sonrisa cálida y tumbarse contigo. Se metió bajo tu futón abrazándote y suavemente te cerró los ojos mientras te cantaba

 Akai ringo ni
    Kuchi biru yosette
    Dama a te mi te iru
    Aoi sora
    Ringo wa nani mo
    Iwanai keredo
    Ringo no kimochi wa
    Yoku wakaru
    Ringo kawai ya
    Kawai ya ringo
    Ringo kawai ya
    Kawai ya ringo

— No quiero irme

— Lo sé. Tampoco quiero que te vayas pero ya no podemos echarnos atrás. Lo siento si te preocupé mucho pero no quería cargarte con mas responsabilidad. Dumbledore-San parece tener buen corazón y el Colegio es lo suficientemente seguro. No te he informado de lo que hacía pero ahora sí puedo. Pero me tienes que prometer que serás valiente y que no contarás nada nadie como siempre. ¿Prometido? - Alzó su meñique y tú tímidamente sellaste ese pacto✨

Pasaron un par de horas en las que entre cancioncillas y arrumacos, y también un par de tomas de papilla para tu nuevo "hermanito", Akihiko te contó lo que pudo de sus trabajos para Dumbledore. Resulta que tenían un grupo especializado para combatir contra un hombre malvado y sus seguidores. Se hacían llamar "La órden del Fénix" y penas hacían un año de su fundación y estaban necesitados de aliados.
De algún modo averiguaron que había una familia mágica viviendo en esa casa y mas tarde Dumbledore al ver que no solo no respondían a la carta, sino que ni tan siquiera eran abiertas investigó un poco mas y averiguó lo que mas se temían, Akihiko Akihiro era un mago blanco (cosa que en Japón es el equivalente a "malvado que usa magia negra") desertor y estuvo observándolos para saber que clase de persona era y si tal vez estaba en el grupo de Tom Riddle (Alias Voldemort); el jefe de los malos. Pero preguntando a varios elfos migrantes de Japón uno de ellos contó que había un señor de blanco que tuvo una hija con nómadas y estos eran el equivalente a Magizoologos y Sanadores, que luego pareció fugarse del país y nadie encontró rastro de él ni de los nómadas. Intuyeron que siguieron su viaje y los encargados de apresarle marcharon del país siguiendo las pistas de la ruta nómada pero jamás encontraron nada.

Joven Severus Snape x ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora