Finalmente llegó el sábado, oh el hermoso sábado sin clases pero con tarea si tienes mala suerte.
Eso no le pasó al tierno rubio de ojos azules, quien salió a comprar unos mangas, debía ver si había algo nuevo he interesante. A lo mejor se lo mostraría a Chifuyu.Entro en la tienda con una sonrisa y busco entre los mangas, debía haber alguno interesante. Después de unos minutos se decidió por el de Kimetsu no Yaiba, pues ahora podría leerlo sin preocuparse por la tarea. Lo tomo sin darse cuenta de la joven detrás que tomaba otro manga y lo veía de paso.
— Bien —Murmuró con una pequeña sonrisa.
Se encaminó al cajero y lo pago. Luego fue ella, pasando a su lado, mientras él miraba la bolsa y lo acomodaba en su mochila, pues ahí también tenía algunas compras que hizo.
— Gracias por tu compra linda —Dijo el chico entregándole la bolsa.
— Que caballero. Muchas gracias, igualmente.
Esa voz le pareció conocida al rubio, pero por el escalofrío que sintió en su espalda no hizo más que caminar hacia la salida de una vez.
Sentia el peligro cerca y solo quería volver a casa sano. Fue peor cuando recordó lo de esa chica que los atacaba para humillarlos.
Nego varias veces intentando calmarse, no es como si le fuera a tocar a él, ¿o si?, no, definitivamente no pasaría. Además es un bello sábado, ¿quién se le ocurriría iniciar una pelea?, hay que descansar de las clases.
<Todo esta bien, Takemichi, solo respira y sigue con el día normal>
Decidido siguió su pequeño paseo para despejar la mente y sentirse más tranquilo. El día era hermoso, para sonreír y estar sin preocupaciones.
— Takemichi, ¿Cierto? —Hablo una voz femenina detrás de él.
— ¿Si? —Volteo con una sonrisa.
Sonrisa que desapareció con solo cruzar miradas con la azabache. Ella permanecía sentada sobre un pequeño muro de por ahí, observándolo sonriente.
Al ver su cámara en la mano, no dudo ni un segundo en correr lejos de ella con la esperanza de salvarse.<¡No quiero ser el siguiente!>
Después de unos minutos corriendo, se detuvo a tomar aire, cansado con las manos en sus rodillas.
<La perdí...>
— ¿Agua? —Se escucho extendiendo una botella de agua fría a su lado.
— Si, muchas gracias.
Tomo la botella y comenzó a tomar. Hasta que abrió los ojos como platos, miro con rapidez a su costado encontrándose con ella otra vez, sonriente y moviendo la cámara en una de sus manos.
Pego un grito y volvió a correr en otra dirección. Escucho una pequeña risita y miro sobre su hombro, pero ella no estaba. Luego la volvió a escuchar y subió su mirada. Se asustó al verla saltar de postes a muros o cualquier cosa alta, a decir verdad tenía buen equilibrio para no caerse. Pero aún así le aterraba el que lo esté siguiendo.
Con lágrimas aumentó la velocidad y dobló a otro lado entrando en una tienda de disfraces.
Ya dentro no dudo en adentrarse en los pasillos como si fuese algún cliente normal.
No habían muchas personas por lo visto, pero podría ser un buen escondite, al menos llamará a Chifuyu. Mientras buscaba el número, lo marcó y espero a que conteste.En eso sintió una mano en su hombro.
Miro pensando que era uno de los empelados ahí, pero quedo en blanco. Era alguien con una máscara del muñeco diabólico llamado Chucky. Incluso tenía la vestimenta. Justo en ese momento contestaron la llamada.
— ¿Hola?, ¿sucede algo Takemichi?
— ¡¡AHHH!!
— ¿¡TAKEMICHI!?
Y se cortó la llamada. El rubio había salido corriendo por los pasillos siendo seguido por el muñeco diabólico de su mismo tamaño, que tenía en una mano un cuchillo de goma.
El dueño y algunos empleados veían como esos dos "Jugaban" pues la chica les pagó para poder usar el disfraz y así poder jugar con su "Amigo" a los sustos. Hasta ellos eran tan ingenuos para creerle a una gentil joven que solo se divertía asustando al más inocente y miedoso de la ToMan.
En un momento, el rubio cayó de cara al suelo y la chica se quitó la máscara riendo por debajo, lo más rápido que pudo se quitó el disfraz. Este la miro aterrado.
— ¿¡Me atacaras también!?
— No. Hombre, es sábado —Río confundiendo al chico— es mi descanso y el suyo de mis humillaciones. Solo te seguí porque me pareció divertido lo miedoso que eres. Bien, ten un buen día y nos vemos.
Dicho eso se despidió con la mano y salió del lugar, dejando aliviado al rubio. Segundos después contestó a su amigo que no dejó de llamarlo.
Mi historia de Mikey por si no la vieron
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𝐒𝐨𝐥𝐨 𝐮𝐧𝐚 𝐟𝐨𝐭𝐨 [𝕋𝕠𝕜𝕪𝕠 ℝ𝕖𝕧𝕖𝕟𝕘𝕖𝕣𝕤] (PAUSADA)
Fanfic"𝘈𝘮𝘢𝘣𝘢 𝘴𝘢𝘤𝘢𝘳 𝘧𝘰𝘵𝘰𝘴, 𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘴𝘶 𝘰𝘣𝘫𝘦𝘵𝘪𝘷𝘰 𝘦𝘳𝘢 𝘰𝘵𝘳𝘢 𝘧𝘰𝘵𝘰 𝘮𝘢́𝘴 𝘥𝘦 𝘦𝘭𝘭𝘰𝘴, 𝘴𝘪𝘯 𝘰𝘣𝘭𝘪𝘨𝘢𝘳𝘭𝘰𝘴 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘢𝘯𝘵𝘦𝘴 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘰 𝘩𝘢𝘤𝘦𝘳" Posible Harem No Copias ni Adaptaciones (Sin mi autorización) ...