Destinos Diferentes.

Capítulo 7: "Aun mas confundida"

Él se gira y corre hacia a mí, y yo por más que quiera, mis piernas no responden. Solo me dejo caer de rodillas vencida ante el miedo.

— ¡Cielos Lara! ¿¡Qué pasó!? Estas fría y pálida, ven, ven acá.

Me recoge del suelo, y me carga hasta su coche, colocándome en el asiento trasero, se quita la chaqueta y me tapa con ella.

Rápidamente me lleva a mi casa, mamá no está. Con su ayuda llego a mi habitación y me recuesto en mi cama.

—Lara ¿Qué pasó?—me observa con una mirada triste y preocupada.

—Ella...ella estaba allí en el baño de la Universidad...

— ¿Te hizo algo?—corre y coloca detrás de mi oreja, un cabello que caía sobre mi rostro.

Niego con la cabeza—No, sólo me asustó...no puedo ser tan débil...

—No eres débil Lara... es lógico que te asustes...

—Si quiero acabar con todo esto debo ser fuerte, no puedo entrar en pánico por todo...

—A ver... ¿conseguiste el número de tú abuela?

Recordé a mi madre y a su extraña actitud—No, me dijo que no lo tenía...

— ¿No tiene el número de su propia madre?—Dez camina por la habitación mientras observaba todo lentamente—. No devolviste la libreta de Leyla a la caja...

Me levanto de inmediato y voy con él.

La libreta yace sobre mi escritorio, con suerte mi madre no habría entrado a mi habitación.

La tome y con mi pulgar acaricié el nombre de Leyla.

—Tal vez este el número de tú abuela—me susurra Dez como si fuera mi conciencia.

Mis ojos están cristalizados, ni una palabra sale de mi boca, sólo asiento y la abro.

Paso hoja tras hoja, leía al pasar alguna que otras palabras sueltas. Sólo algo me detuvo, una fecha... "18 de septiembre"; las lágrimas que estaba intentando contener, comenzaron a brotar de mis ojos sin cesar.

— ¿Qué sucede? ¿Qué encontraste?—interroga Dez a mi lado.

—No puede ser...—suelto la libreta espantada.

—Lara, si me escuchas, respira por favor...

Respondo que si como puedo, y trato de inhalar y exhalar.

—Leyla...Leyla escribió algo el día que falleció papá...

— ¿Qué pasó?

Tomo la libreta con manos  temblorosas, y se la enseño.

"18 de septiembre. A ver si muerto me dejas en paz".

—Lo mató...ella lo mató—no puedo parar de llorar.

—Tranquilízate, eso es imposible, tú me has dicho que ella no estaba en la casa cuando eso sucedió.

Dez tiene razón, ella no estaba, papá murió de un ataque al corazón, o bueno eso fue lo que nos habían dicho.

Mamá nunca dijo lo contrario, pero ¿qué era esto? ¿Por qué Leyla quería que papá la deje en paz?

—Tengo más dudas que antes...—seco mis ojos con el dorso de mi mano—. Ella quería que papá muriera...me odiaba a mí, odiaba a mamá ¿Qué sucedía con ella?

—Lo descubriremos, lo haremos Lara—me abraza con fuerza.

2 horas después, mi llanto se había apaciguado, escucho que mamá llega.