Golpéame en el corazón [XiXian]

4. Las estrellas que nos iluminan (I)

Notas iniciales:

Yo me propuse que el extra fuera de sólo un capítulo y luego me di cuenta que ya llevaba 14 páginas. A la mierda todo, dejaré de mentirme y mentirles, no volveré a calcular cuántos capítulos va a durar algo. Espero tener terminada la otra parte para mediados de la semana ＼(￣▽￣)／

Para este extra tuve que indagar un poco en mis tiempos libres porque ¿cómo que un bebé no camina a las dos semanas? Con esto quiero decir, no tomen muy enserio si notan algo fuera de lugar, no he sido madre así que estoy tomando algunas cosas de mis familiares y algunas cosas de tik tok (obvi, investigación 100% creíble jaja).

En fin ¡Gracias por acompañarme en esta historia! (◕‿◕)♡

***

Es fácil ocultar una marca de reclamo, ya sea por el tipo de ropa o por parches especiales.

No son comunes debido a que en la actualidad hay pocos emparejamientos, pocos alfas u omegas se aventuran a una relación de toda una vida, sin poder cambiar de pareja o, en su defecto, con las consecuencias de intentar hacerlo.

Lan Huan perteneció a ese grupo de personas, ya no. Ha optado por comprar camisas con cuello tipo Mao, no miente cuando dice que es debido a que Wei Ying una vez se la recomendó para estar menos incómodo en el trabajo porque la corbata a veces acalora demasiado, sin embargo, si es totalmente sincero, es porque le gusta que su marca resalte cuando gira o alza la cabeza.

Le gusta verla en el reflejo de los cristales y en los ojos de las personas. Su tío no parece molesto por ello, él prefiere que las tradiciones se mantengan vivas (las que se puedan).

Lan Huan tiene que ir a trabajar, su objetivo es terminar todo temprano y regresar con su familia, le gusta regresar a casa, a su hogar.

Intentó terminar de vestirse, algo faltaba, se asomó desde la habitación mientras se ajustaba el cinturón —A-Ying ¿has visto mi camisa blanca?

Wei Ying rió desde la cocina —A-Huan, ¡todas tus camisas son blancas!

—Esta era blanca con botones azul capri.

Wei Ying asintió sin mucho interés, los Lan siempre vestían colores claros y sabrá el cielo cómo es que lograban diferenciar un blanco de otro. Talló la mancha de salsa picante en uno de los tazones —Blanca y botones azul-algo, lo tengo. Buscaré si se quedó en la lavadora. Ve al trabajo, anda, anda, tu esposa necesita que traigas pan a esta casa.

Lan JingYi saltó desde el sillón —¡Tu hijo necesita una bicicleta!

Lan Yuan se arrimó a su hermano y ofreció una sonrisa —Unos audífonos nuevos.

Lan Huan suspiró dramáticamente, porque la vida necesita un poco de drama para hacer reír a su familia —¡Mi familia me explota! ¡Su esposo y padre necesita un descanso! Además, ¿estos niños míos no se están relajando demasiado en su día libre? —Los pequeños Lan se encogieron tras el sillón, ocultando su risa. Lan Huan caminó hasta la cocina y le dio un suave beso a su amado —No olvides enviarme el estudio de mercado.

—Me ofendes, eso ya lo hice. Bueno, uno de los pasantes se desveló haciéndolo y acabo de reenviarlo —le guiñó un ojo —¿no soy increíble? Por cierto, esos niños "tuyos" tienen derecho de ser malcriados cuando su mamá decida malcriarlos.

—¿Y papá? ¿Papá cuándo puede ser malcriado por mamá?

—Mm... Esta noche, deberías llegar temprano.