Ciego

Capitulo 7

Capitulo 7

*Harry*

Al despertar noté como dos brazos me abrazaban. No supe que pasaba hasta que me vino un recuerdo a la mente de cuando desperté entre noche. Me quede pálido al recordarlo, aunque paso a ser rojo. ¿Ahora cómo iba a volver a seguir igual?

Se levanto tan sigilosamente como él sabía, sin despertar al rubio. Se fue al baño lo más rápido que pudo y se ducho. Tubo la necesidad de llevarse las gafas, y cuando se vistió y se las puso casi se cae de la impresión, ¡casi había recuperado totalmente su vista! Aun veía borroso con las gafas, pero por lo menos ya veía, fue rápidamente a la enfermería para hablar con Madame Pomfrey.

-¿Hola?- Entro por la puerta no muy seguro de si estaba allí, aunque pronto la escucho.

-Señor Potter, ¿cómo esta? -Al girarse hacía él su sonrisa se ensancho sin poder evitarlo y fue hasta a su encuentro.- Veo que tu vista ya está casi totalmente recuperada- él asintió con la cabeza.- Bueno que te parece si te hago unos exámenes médicos y a lo mejor ya puedo hacer que la recuperes completamente.

-Me encantaría, gracias por todo.- Realmente estaba muy agradecido con esa mujer, ella fue la que siempre le tenía que cuidar cuando algo le pasaba y aun así nunca se quejaba (o no demasiado). Es más, de tantas veces que había estado, se llevaba muy bien con ella y muchas veces la iba a visitar para aprender cosas sobre medimagia.

-No hay de que, ahora ven a la camilla.

Le estuvo revisando y para buena noticia logro hacer que recuperara totalmente (bueno todo lo que él consideraba totalmente) su vista y así poder ya ver todo otra vez.

-Madame Pomfrey en serio no sé cómo darte las gracias por todo lo que has hecho por mí siempre.- La mujer sonrió y le abrazo, ella no solía abrazar a los alumnos y él los sabía, pero Harry era una excepción.

-Harry, es mi trabajo, además, con el minicurso que haces de medimagia yo me conformo.

-Ten por seguro que lo retomaré.- Se despidió de la doctora y se dirigió hacia la sala.

Al entrar vio como sus amigos estaban muy nerviosos reunidos hablando de algo, ni si quiera le habían oído llegar de lo alterados que estaban.

Pansy fue la primera en verle.

-¡Harry!- Vino corriendo hacia mí para abrazarme y casi hacerme caer en el suelo

-¿Hola?- Pregunte con algo de duda sin saber que les pasaba.

-Como que hola, has desaparecido por la mañana, Malfoy nos ha llamado casi en un ataque de pánico al no saber dónde demonios estabas- Fue Ron quien le hablo.

-Estaba con Pomfrey en la enfermería.-En ese momento parecieron darse cuenta de que llevaba puesta las gafas y no entrecerraba los ojos para verlos. Y Pansy junto a Hermione se lanzaron, ahora sí, tirándome al suelo por el abrazo que me dieron.

Blaise junto con Draco me ayudaron a levantarme mientras que Ron intentaba que las chicas no me volvieran a tirar de la emoción.

-¿Cuantos dedos tengo?- Volvió a preguntar Ron poniendo tres dedos delante mío.

-Tres Ron, y si no me los quitas de la cara te vas a quedar sin ninguno de ellos.- Aquello izo que se estremeciera y apartara los dedos de inmediato de delante mío.

-Bienvenido Potter, veo que recuperar la vista te ha hecho recuperar autodefensas.

-No te equivoques Malfoy, ciego o con vista siempre estoy alerta.

Esa tarde no estuvieron en la sala, sino que fueron al jardín. Estaban hablando cuando vio como un perro negro venia corriendo hacía él y supo de quien se trataba.