Ella es una muchacha tímida.
Él, un chico antisocial.
Hace años que se conocen y son mejores amigos.
Pero... ¿tal vez son más que amigos?
¿Qué puede surgir de años de quererse?
¿Qué puede pasar a los que se aman en silencio?
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-¿Te p...
Me callo por no saber amarte. Aunque no sepa amarte, te amo, y aunque no quiera quererte, te quiero. Me callo por no saber amarte, pero aprendo cuando sé que te amo.
Shu podía acordarse perfectamente de cuando conoció a Lyz.
Al principio, se mostraba reservada con ellos. Después, cada ves más abierta.
La muchacha perdía la timidez con ellos.
Le agradaba.
Y mucho.
La verdad, admitía mentalmente que buscaba cualquier escusa para hacerla reír y le dolía cuando terminaba el día y debían marcharse de la escuela.
Por eso, se sintió muy feliz cuando, un sábado, tocaron la puerta de su casa. Era la madre de Lyz, preguntando si querían invitarla pues ella lo deseaba mucho.
La pasaban bien juntos, ella intentaba enseñarles algunas cosas, como a los siete, que ella les enseño a pintar cuadros. Tenia una paciencia bastante buena, pero se ponía muy caliente cuando la perdía.
Le gustaba hacerla enojar de ves en cuando. Ella se irritaba y lo perseguía. Luego se daba cuenta de que era una estupidez, se sonrojaba, le pedía disculpas, él la perdonaba y reían juntos.
Su risa era hermosa, ella era hermosa...
No tenia que pesar estupideces.
No arruinaría esa magia.
Pero sí, la amaba, mucho.
Temía que, al decírselo, ella se asustara y se fuera.
Era mejor así.
En sus recuerdos de la bella.
Y la vería al amanecer, en el torneo. Rivales y amigos.
Nada más...
Un día, hicieron origami. Era la primera vez de ella. Hiso un corazón.
Y se lo regalo.
Luego hiso una para Valt y otro para Xander, pero...
El suyo fue el primero.
Su primer origami y su primer corazón.
A veces, A Lyz le gustaba hacerlos enojar a ellos. Era vengativa. En broma, la llamaban "Némesis". Se volvió tan normal que, siempre que la llamaban, le decían Neme.
Ella se mostro interesada por el beyblade desde los siete. La verdad, estaba muy emocionada, casi tanto como Valt. Hablaba todo el día de beyblade. Le agradaba su entusiasmo.
Cuando Xander se marcho, todos estaban muy tristes, pero ella intento levantarles a Valt y a él el animo. Organizaba salidas, hiso una pijamada en su casa y organizaba toda clase de juegos para el recreo.
En un invierno, ella había organizado irse de vacaciones con sus amigos a la nieve. En ese tiempo no estaban decaídos, Xander no se había ido todavía y todos fueron.
Ella estaba vestida dos trenzas largas, pues le había crecido el pelo, y su capucha tenia orejas. Estaba notablemente linda.
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Ella los hiso ir de acá para allá, pasaron por todo tipo de lugares: vieron a los esquiadores, fueron a las montañas, hicieron muñecos de nieve y hasta una guerra de bolas de nieve.
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Se la veía feliz de compartir sus vacaciones con sus amigos.
Eso lo hacia sentir bien.
Ahora, debía irse a dormir.
La vería a la mañana siguiente, en el torneo.
Solo amigos...
Se acostó y se durmió.
Lyz le hablo en sueños, pero a la mañana siguiente no recodo que había dicho.
