Vida eeveelutions

Capítulo 2: Prólogo

Esta historia comienza en una ciudad no muy grande llamada San Bienvenido, en el barrio concurrido de Soul Street, se puede encontrar en un piso no muy grande, pero suficiente para una pokemon de tamaño medio, un espeon durmiendo en un sillón cama, este está algo viejo y chirría cuando alguien se mueve encima de él. Esto es lo que despierta al espeon. Son las 8:10.

Ben: AUGH (bosteza) Ya es de día, hora de hacer ejercicio antes de ir a ver a Klaus (dice esto último un tanto serio)

El espeon recoge el sillón cama y guarda las sabanas en un armario para luego prepararse.

Ben: ahora que esto está guardado, me visto y me voy al gimnasio

Antes de cerrar el armario coge una sudadera gris de canguro y unos pantalones de deporte

Nz: (si, en este mundo no solo se puede buscar la ropa por tallas, si no que también por anatomía, con eso explico la ropa que lleva)

Coge un termo y lo rellena de agua del grifo.

Ben: Ahora si estoy listo para salir (dice mientras cierra su casa con llave)

Al bajar saluda a la señora Marita una Flygon, que es la dueña del edificio y también es un tanto mayor

Marita: (ve bajar a Ben) Oh, hola Ben, ¿día de gimnasio?

Ben: si señorita Marita

Marita: muy bien, ten un buen día y recuerda que mañana toca pagar el alquiler

Ben: no lo olvidaré (se va por la puerta)

El gimnasio al que va Ben está en la misma calle que su piso, pero al final de esta, por tanto debe caminar unos pocos metros. El gimnasio lo dirige un Scizor llamado Víctor Strike, aunque no lo aparente por ser tipo bicho, en la liga de lucha sin movimientos logró quedar de los 10 primeros

Ben: (entra por la puerta) hola señor Strike

Strike: hola Ben, ¿Cómo estás hoy?

Ben: pues bien, voy a estirar e ir a las máquinas de correr

Strike: lo siento, pero una está estropeada y las otras 2 de tu estatura están ocupadas, tendrás que esperar, pero te aviso cuando salgan los que estén

Ben: gracias

Después de esta charla Ben se fue a los vestuarios donde dejó su cartera, sus llaves y su teléfono en una taquilla y se colocó unas muñequeras en las patas traseras y delanteras. Luego estuvo estirando unos 15 minutos y luego se puso a hacer abdominales y flexiones. Después de hacer 100 de cada una vuelve a estirar un poco y se va a hacer ejercicios con pesas, gracias a sus poderes psíquicos se coloca unos discos que llegan a los 15 kilos y empieza a subir y bajar su espalda, después de un rato anda por un circuito con las mismas pesas.

Strike: Ben, la maquina de correr ya está libre.

Ben: (algo cansado) bien, voy para allí (coloca los discos donde estaban, bebe un poco y se va a correr)

Todos los días que va hace el mismo programa, va subiendo progresivamente durante 10 min, otros 10 corriendo muy rápido, unos 10 de descanso en marcha moderada y luego unos 15 otra vez rápido para hacer unos 5 min de sprint final (aún más rápido)

Ben: (corriendo) vamos, solo me queda un minutos (sigue corriendo). (Suena un pitido que indica que ha terminado y la maquina empieza a decelerar) Uff, creo que por hoy basta de ejercicio (mira el reloj y eran las 9:50) Tengo que estirar rápido e ir a ver a mi hermano.

Estira unos 10 minutos y va a recoger sus pertenencias, pero allí se encuentra con alguien.

Ben: (cierra su taquilla) ¡Tomás!, ¿que haces aquí?