Nieve [Sasuke uchiha] ©

01- l•Ojos carmesí•l

No me he sentido bien últimamente. Los chillidos de Sakura y las tonterías de Naruto me estresan cada vez más.

Las horas son lentas. Siento que el día dura más de 12 horas, y la noche se pasa en un instante.

No puedo dormir, cada vez que lo hago, aquella pesadilla regresa.

Todo es culpa de itachi y su maldito gen-jutsu. Cuando pensé que todo estaba bien, cuando creía que tal vez podría dejar mi venganza por un momento… Viene él.

Ahora, mis deseos de asesinarlo son mucho más fuertes…

Nunca debí dejar mi propósito de lado.

¿Quién diría que me pongo a pensar esto enmedio de una película? Pero ahí viene Naruto, a alborotar todo.

Tuve que mostrar la entrada del cine para que nos creyeran que habíamos pagado para estar allí. Yo no tengo que dar explicaciones.

Se nos asignó la misión de "cuidar" a Yukie Fujikaze. La actriz de la película que acabábamos de ver.

A mi vista, era una niña malcriada.

Tenía una pésima actitud con los trabajadores y productores «por no decir que siempre nos miraba de una forma desagradable».

En todo el camino hacia yukigakure, ella estuvo insoportable.

El viaje fue aburrido. Solo se podía ver cómo las olas del mar aumentaban conforme pasábamos entre ellas.

El tiempo pasaba cada vez más monótono. La ansiedad de saber que no podría encontrar a alguien que me comprendiera y aliviara mi dolor me abrumaba cada vez más.

¿Pero quién dice que necesito a alguien?

Cambiando de tema, habíamos llegado a un lugar con solo nieve en su exterior. Eran máximo las siete de la mañana. Para esa hora, ya estaba despierto; seguía sin poder dormir porque al hacerlo, regresaba aquella ilusión.

—Sasuke, despierta a Sakura y a Naruto por favor.—Ordenó kakashi.

Troné la lengua. No era mi culpa que ellos no fueran responsables—Está bien.

Moví a Sakura de un lado para otro, ella no despertó hasta que dije su nombre.

—¡Sasuke-kun! ¡Gracias por despertarme!—Ella intentó abrazarme. Me alejé un poco. La verdad no tenía ganas de nada. Entonces la dejé que lo hiciera. Ya estaba acostumbrandome a recibir tantas muestras de afecto por su parte, pero eso no quería decir que me gustara.

—Ya—La aparté, tenía que despertar a Naruto.—Hey, tonto. Despiértate, no tengo todo el día.

—Otro ramen por favor…—Dormitaba.

—No te daré nada, el ramen apesta.

—Eh... ¡¿Eh?!—Se levantó—¡¿Pero qué tonterías dices?! ¡Teme!—Empezó a lloriquear mientras saltaba en el mismo lugar donde había dormido.

—Deja de actuar como niñito berrinchudo y ponte a trabajar.—Me levanté, fui a la salida del lugar para subir al aire libre—Kakashi me pidió que los despertara. Quieren filmar una parte de la película en este lugar, hay que estar alertas. Así que no tarden, no me gusta que me hagan esperar.—Procedí a irme.

Unos minutos después, Naruto y Sakura estaban arriba. No tardaron; aunque sea, sabían hacer eso bien.

Volvía a lo mismo. Un momento aburrido.

Lo único que tenía para ver, eran cuatro personas hablando párrafos aprendidos.

Aquella chica actuaba bien, pero ahora que ví toda la farsa, no puedo creer nada de lo que sale por su boca.