Cosas que me gustaría decir y expresar pero no me siento capaz

¿Mi cabeza?

/Backroom1, habitación de unos pocos metros cuadrados, un espacio muy limitado, todo es blanco, nubes en el techo/
Habitación vacía, blancura absoluta, tanta luz que tus ojos no se atreven ni a abrirse, tienen tanto miedo como tú.
El cielo está blanco, ¿Pero es el cielo?
¿Es está de mi cabeza o solo una recreación de ella?
De pronto, una foto tuya pasa de largo, velocidad que rompe el sonido, solo la luz se cree superior. Ocurren cosas que no puedo describir, solo puedes sentir, el "cielo" se ha vuelto rojo, empiezan a salir flores en una habitación que estaba vacía.
Sentimiento fugaz, vuelve todo a luz que estaba, quiero volver, quiero sentir esa felicidad que nunca había experimentado hasta que sentí un escalofrío que se sintió más confortable que cualquier colchón jamás creado. Al pensar, en otra imagen, algo sale mal, las nubes blancas se transforman en tormentas negras, intento huir pero no hay salida, atrapado en la oscuridad de un lugar que se siente como casa pero no se quiere estar. Cae un rayo, un trueno, empieza una leve lluvia a caer, no hay escondite, no hay huida, una canción suena de fondo, la reconozco nada más escuchar pero no quiero pensar. Percepción del tiempo pérdida, unos segundos tan miserables que convirtieron este lugar en una tormenta que solo de recordar me da miedo.
Otra vez, el lugar está en blanco, sé donde estoy pero a la vez no.
El frío empieza a entrar, el miedo comienza a penetrar, ¿Qué es lo que presencio en este lugar?
24 números, dos manecillas, grito y nadie escucha, no sé qué hago aquí, cuál es mi objetivo en un lugar tan sombrío, empiezan a girar en primer lugar hacia la izquierda. Una imagen, un recuerdo, no puedo más con tantos pensamientos, he vuelto al primero. ¿Este era yo o lo que recuerdo de mi ser?
¿Qué podía pensar cuando mis problemas eran invisibles como el viento que golpea la ventana por la mañana?
La manecillas, las cuales con de una madera de roble robustas y agrietadas con un color marrón más parecido a un gris que solo el desgaste puede dar razón, se vuelven a mover, la derecha es su dirección. ¿Seguiría siendo yo aunque no me acordara de mis recuerdos?
Vivo en el pasado, no enseñes más lo malo, estoy cansado, solo tengo miedo, frío, solo en un lugar inhóspito, golpeo las paredes como si de vida o muerte se tratase aunque en un amplio sentido, son estas paredes los que hacen la vida algo que no es suya. No puedo, ¿Cómo luchar con algo que no puedes sentir pero si percibir?
Tras segundos que son horas, viendo imágenes tuyas y acciones horribles, ¿Soy bueno?¿Cómo puedo serlo?
El reloj para en seco, el ritmo me suena, es como si contara, el tiempo se ha restaurado, ¿Cómo aprovechar el poco que queda?
Solo mis sueños llenarán esta habitación de color, dice una voz, objetivos de un niño iluso que pide y no recibe aunque hable con la luna hasta altas horas de la noche.
Una imagen nueva se vuelve a acercar, corro por miedo, desconocimiento y confirmación de la debilidad que se acurruca en mi interior y no puedo liberar. Por sorpresa, todo se vuelve azul, ¿Esto es nuevo?
Cielo azul y suelo verde, es una imagen de algo maravilloso pero que tú solo sabes su significado real. Pequeñas cosas, cambian nuestra visión, nuestro ánimo y nuestra sonrisa pero otra canción suena y solo me apetece bailar hasta que no pueda más. Mientras lo bonito se disipa, las cosas buenas con su aire se mueven al marchar, escucho una voz, cálida y confortable como para un cachorro su madre, no entiendo lo que me dice, casi no puedo escuchar, estoy cegado por todos los estímulos que me rodean.
Finalmente, mis fuerzas cesan, tras todo lo bueno y malo, este lugar el cual es familiar pero pocos conocerán, se vuelve negro, sin música, con un cielo en el que se ven las estrellas más lejanas y nebulosas que casi puedes tocar.
Por fin, descansas, has salido de la habitación, del lugar que no puedes salir, gritas felicidad y no sabrás en qué lugar estarás por la mañana al despertar.