Freddy abrio mucho los ojos y la boca. No podia reprocharselo. No ocurria todos los dias que una mujer desesperada disfrazara de propuesta de negocios una proposicion semejante.
Se recupero rapidamente. Era tipico se el. Nada habia perturbado al joven Freddy, el tipo que recorria los pasillos del instituto como si no le importara nada en el mundo y le diera lo mismo lo que pensasen de el. Se habia enfrentado a compañeros y profesores y habia sido famoso por sus bromas capaces de reducir a la gente a la minima expresion en un instante. Lo habia evitado por esa razon. Lo bastante insegura para preferir fregar el suelo como Cenicienta en lugar de ir al baile, no necesitaba alguien de lengua afilada cerca.
No podia negar que habia reparado en el. Alguna vez habian hablado, pero solo cuando habia pasado por su casa. En el instituto, el estaba un curso por delante y era demasiado interesante para ni siquiera reconocer a una boba como ella.
No era capaz de recordar cuando se habia sentido atraida por el por primera vez, pero en algun momento entre que Bryan lo habia llevado a casa a patinar y el final del instituto, ella habia empezado a buscar encuentros breves con el, aunque siempre se retiraba despues de una corta charla.
Cuanto mas se fijaba el en ella, mas se retraia _____ porque no queria que el se diera cuenta de lo insegura que era y lo mucho que el le gustaba.
Ademas, ¿como un tipo como el se iba a fijar en una chica como ella, de pantalones holgados y gafas, una empollona?
El veintiun cumpleaños de Bryan lo habia cambiado todo. Ella habia querido dar el primer fragil paso hacia el reconocimiento de su feminidad y cuando el se habia acercado a ella, flirteando, animando su enamoramiento adolescente hasta llegar a un punto en que besarse habia sido inevitable.
Casi besarse. Una gran diferencia y otra mas de la que se arrepentia de esa noche.
Pero en ese momento no habia tiempo de arrepentimientos. Habia hecho su aparicion diez minutos antes todo lo atractiva que habia podido y el casi se habia caido de la silla al verla.
-¿Quieres salir conmigo?
Sonrio y su resolucion se disolvio mientras echaba mano del bolso lista para salir corriendo. Noto la invitacion de boda que habia dentro, un recordatorio de por que estaba alli humillandose de ese modo. Era solo un mes.
-No, no quiero salir contigo, quiero que seas mi pareja. Hay una diferencia -se relajo y solto el bolso-. Mi ultima amiga soltera se casa y necesito una pareja que me acompañe.
-Parece facil -la sonrisa de Freddy se amplio-. Me halaga que me lo hayas pedido...
-No te hagas ideas raras. Esto es puramente un acuerdo de negocios. Tu me acompañas a algunos actos sociales y a cambio yo te presento a lo mas alto del mundo de los negocios de Melbourne. Eso es todo.
Tenia que serlo. No seria tan tonta como para pensar por segunda vez que esa encantadora sonrisa era algo mas que una tecnica para cautivar, que el brillo de sus ojos color cabalto seria exclusivamente para ella.
Habia querido a alguien muy guapo para impresionar a las chicas y Freddy valdria. Mientras no se hiciera ideas raras: como lo divertido que seria salir con el de verdad.
No salia con hombres habitualmente, todo el proceso le parecia tedioso, mortificante incluso. Los tipos se sentian intimidados por su exito o la utilizaban para llegar a las estrellas para las que organizaba eventos. Habia tenido tres relaciones cortas, si dos meses se podian considerar una relacion. Cuando de lo informal se empezaba a pasar al conpromiso, huia. No por una fobia al largo plazo, sino porque nunca encontraba al hombre adecuado.
Asi que, en lugar de llegar a eso, preferia una noche tranquila de charla insustancial con tipos seguros de si mismos y ansiosos por causar una impresion falsa.
Pero, con la proximidad de la boda de Mattie, no podia dejar de pensar que se estaba perdiendo algo, que estar soltera y tener exito no era todo lo que se podia ser.
Freddy bebio un sorbo de cafe, un sorbo largo pensando para hacerla esperar y disparar su ansiedad. Ella se angustio, preguntandose sino deberia haberse quedado con alguno de los candidatos de internet.
Freddy dejo la taza en la mesa y se recosto en el asiento como si le propusieran cosas asi todos los dias.
-Dime algo mas de esos contactos de negocios
Eso si podia afrontarlo: algo frio, puros datos
-Habras oido hablar de Hot Pursuit
-¿La mayor empresa deportiva de Australia?
-Esa misma- hizo una pausa para conseguir un efecto dramatico-. Conozco a Angus Kilbride bastante bien. Es el novio. Asi que supongo que podria presentartelo en la cena anterior a la boda, un enhorabuena en la boda, una cerveza o dos en la barbacoa informal tras la boda y una partida amistosa de poquer la noche que veamos el video de la ceremonia... -chasqueo los dedos-. Mi amiga Linda esta casada con Anton Schultz, de los joyeros alemanes Anton. Y el marido de otra amiga, Carol, es Duane Boag, de la mayor cadena de inmobiliarias de Australia.
No le habria sorprendido ver el signo de dolar en sus ojos, pero Freddy tenia clase y la siguio mirando sin pestañear, como si tratara de averiguar los motivos realed de su proposicion. Aparto la vista.
-Unos contactos impresionantes -se encogio de hombros-. Sere sincero contigo. Podria conseguir que me presentaran a gente de ese calibre.
-¿Pero?
-Me pregunto porque me lo has pedido a mi. Una mujer como tu tiene que poder elegir pareja ¿Por que yo?
-¿Creerias que es el destino? -Pregunto secretamente emocionada porque pensara que podia atraer a cualquier tipo que quisiera
-No
-Lo ha sido. Estaba trabajando conectada a Internet cuando ha entrado un articulo sobre ti y cuando he visto que estabas en la ciudad... -no termino la frase con la esperanza de que le creyera su pequeña mentira
-Te di pena. Ya, lo comprendo
La punzada de amargura de su voz le sorprendio, pero antes de que pudiera decir nada, añadio:
-Tambien estoy intrigado. Y podria hacer algun contacto mas en la ciudad, asi que parece que has conseguido tu trato
-¡Estupendo!
-Sin embargo, aun no comprendo porque tienes que pedirmelo a mi
-Soy una mujer de negocios, muy ocupada. Dirijo mi propia empresa organizadora de eventos, asi que me gano la vida haciendo vida social, dia y noche -bebio un sorbo de su bebida- El poco tiempo libre que me queda lo paso en casa. Basicamente no tengo mucho tiempo para compartir -de pronto se le ocurrio un pensamiento horrible- Lo siento, no te he preguntado si estas saliendo con alguien...
Freddy agito una mano sin anillos delante de ellos y dijo:
-No tengo ningun compromiso. Ni esposa, ni novia
Se inclino hacia delante y le hizo un gesto con un dedo para que se acercara a el. A esa distancia, podia ver las motas verdes que habia en sus ojos y la sombra de la barba despues de todo el dia.
-Te contare un pequeño secreto. No habria accedido a salir contigo si hubiera estado con alguien. ¿Que clase de tipo crees que soy?
El guiño que le hizo, añadido a su encanto, provoco que tuviera que respirar hondo en busca de oxigeno. El penetrante aroma a cafe recien hecho y lima inundo sus sentidos, haciendo que deseara agarrarlo y hundir la nariz en su pecho.
-Por si luego hay dudas, no contestare a eso.
Freddy se echo a reir y se apoyo en el respaldo interrumpiendo asi el gesto intimo.
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Siempre Dama De Honor
FanfictionEsta novela es adaptada Las actualizaciones seran un poco lentas