Enamorada de un asesino

4. Mudanza

NICOLE

¿En que estaba pensando? ¿Vivir con él? Por un lado me parece una buena idea, en fin, cabreo a mis padres y gano tiempo para no casarme. Y por otro lado, voy a irme a casa de un puto asesino, que por alguna extraña razón no me da el miedo que pensaba. Si me quisiera haber matado, ya lo habría hecho. Meto ropa en mi maleta, además de algunos zapatos, maquillaje, mis planchas del pelo y secador. Bajo las escaleras con la maleta esperando a que me vean mis padres.

-¿Dónde te crees que vas? -Pregunta mi madre.

-Me voy de casa, con mi novio. -le digo pasando por delante de ella.

-¿Perdona?

-Lo que has oído. -mi padre sale del despacho.

-¿Que haces? -pregunta mi padre mirando la maleta.

-Me voy. -Abro la puerta de la casa. Ahí está el hombre con el que voy a vivir, el cual todavía no me se su nombre. Mis padres lo miran.

-¿Con ese te vas a vivir? -Señala mi madre al chico que esta subido en una moto. Espera... ¿Una moto? Ni de coña

-Si. -Mi padre me agarra del brazo.

-No te vas a ningún lado. -Me quito de su agarre.

-Ya no decides más por mi, estoy harta. -Segunda bofetada que me da mi padre. -Puedes pegarme todo lo que quieras papá, pero se acabó el elegir mi vida. -No dice nada, solo me mira fijamente y se mete en la casa.

-No hagas tonterias. Entra en casa. -La miro con los ojos llenos de lágrimas y cojo mi maleta sin decirle nada. Bajo hasta donde esta el desconocido con el que voy a vivir.

-¿Estás bien? -Pregunta.

-No. -me quito las lágrimas de los ojos. -No voy a subirme en la moto. ¿Que hago con la maleta?

-¿Se puede saber que coño llevas ahí? -Mira lo grande que es mi maleta.

-Mis cosas. -Le digo sería.

-Llamaré a Luke, mi amigo. Para que venga con su coche. -Asiento. Miro hacia mi casa. Mi madre me mira con desaprobación y se mete en mi casa. -¿La otra vez también te pego tu padre? -Lo miro pero no digo nada. Asiente en señal de que con solo con mirarle ha entendido que si.

-¿Como te llamas? -Le pregunto cambiando de tema. Sonríe de medio lado.

-¿Te interesa mi nombre?

-Pues... Voy a vivir contigo, no estaría mal ¿sabes? -El asiente sonriendo, mirándome.

-Tom. -Pongo los ojos en blanco.

-Y ahora tu nombre verdadero. -Suelta una carcajada.

-¿Estas repitiendo mis frases? -No puedo evitar soltar una carcajada. Este me mira.

-¿Cual es?

-Dylan, Dylan Green.

-Al menos ya me se el nombre de mi compañero de piso.

-Tampoco te vengas arriba. -Pongo los ojos en blanco.
10 minutos más tarde, una camioneta vieja aparece delante de nosotros. Un chico con el pelo negro azabache, sale del coche y me mira. No parezco gustarle un pelo.

-Hola. -Este ni me saluda.

-Este es Luke. -Dice Dylan. Iros vosotros en el coche, yo voy en la moto.

-Sigo viendo esto como una mala idea. -Luke no me quita la vista de encima.

-Y yo sigo sin pedir tu opinión. -Dice Dylan cortante. Luke le hace el Corte de manga y me quita la maleta de las manos para meterla en el maletero.

-Vamos. -Miro a Dylan.

-Luego nos vemos niña pija. -Me monto en el asiento de copiloto y me abrocho el cinturón de Seguridad. Luke se monta y arranca el coche.

-Nicole ¿verdad? -Rompe el silencio.

-Si. -contesto no muy segura.

-No me fio de ti ¿sabes? -Me mira de reojo.

-Es curioso, porque yo no voy matando gente ¿sabes? -me mira con cara de pocos amigos.

-Había un porqué. -Me suelta.

-Mira, ¿Luke? -Asiente. -Solo tengo un trato con Dylan, yo le doy veinte mil, y a cambio él me ayuda a cabrear a mis padres, tu y yo no tenemos que ser amigos.

-Yo solo te digo, que si lo delatas...

-No voy a hacerlo, así que puedes estar tranquilo. -Luke no dice nada más.
El resto del camino lo pasamos en un silencio incómodo. Vamos llegando a un barrio muy chungo.

-¿Vivís aquí? -Este me mira pero no dice nada.

-Hemos llegado. -deja el coche estacionado y baja. La moto de Dylan llega justo detrás. Miro los edificios desgastados y viejos. ¿Cuánto podré durar aquí?

-¿No es lo que te esperabas eh niña pija? -Dice Dylan sonriendo de medio lado.

-Deja de llamarme así de una vez. -Le digo molesta.

-¿Es que no lo eres?

-No. ¿Acaso te llamo yo a ti chico asesino? ¿No verdad? Pues deja de llamarme así.

-Perdona... -Dice. -niña pija. -pongo los ojos en blanco y sigo a Luke que va hasta la casa. -Dame ya te la llevo yo. -Me intenta quitar la maleta.

-No, gracias. Yo puedo. -alza las manos en son de paz y sigo andando. Cuando entramos en uno de los edificios, busco el ascensor. No lo veo por ningún lado. -¿Dónde está el ascensor?

-Aquí no hay ascensor preciosa. -Dice Luke con cierta ofensa en la voz. Definitivamente, no le caigo bien.

-Oh, genial. -Digo irónicamente. -¿Y cuál es el piso?

-El quinto. -Abro los ojos como platos.

-¿Quinto?

-Dame que te la subo. -Señala la maleta.

-Te he dicho que yo puedo sola. -Este asiente.

-Pues sube 5 pisos con una maleta enorme, tu sabrás. -Empieza a subir dejándome sola. Intento coger la maleta, pero pesa demasiado, por lo que la arrastro subiendo las escaleras.

-En que momento.... Se me ocurrió.... Venirme aquí. -Digo sin aliento. Cuando llego al tercer piso, no puedo más.

-Para cuando llegues arriba, tus padres ya te habrán dado el dinero. -Dice Dylan desde arriba.

-Cállate. -Digo casi en un susurro. Sigo subiendo, hasta que al fin llego a la quinta planta. La puerta de la que imagino que es su casa, esta abierta. Entro, y no puedo evitar mirar todo asombrada. El apartamento es oscuro y esta sucio. Hay botellas de cervezas por la mesa y cajas de pizzas. El sofá es naranja y no pega para nada con la decoración del Salón, si es que se le puede llamar decoración...

-Voy a enseñarte tu habitación. -Asiento y Dylan me lleva hasta la que va a ser mi habitación. Hay una cama y una mesita de noche con una lámpara... Ya no hay nada más. -El aire acondicionado esta estropeado, y por las noches hace bastante frio...

-Vale gracias. -Le digo.

-Bueno pues... Bienvenida entonces. -Le sonrío un poco, pero no puedo evitar estar triste, y se que en cuanto salga por esa puerta voy a llorar. Joder... Acabo de irme de casa para meterme en casa de una asesino... ¿Me he vuelto loca? -Si necesitas algo...

-Si, gracias... -Dylan sale de la habitación y cierra la puerta. Me siento en la cama lentamente y miro toda la habitación. Definitivamente, me he vuelto loca.