12. Pasión

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DYLAN

La cara de espanto de Nicole me ponen los pelos de punta.

-Dios... -Susurra tapándose la boca. -Dylan... ¿Que te ha pasado? -Se acerca a mi y me inspecciona la cara.

-¿esto? -Me señalo la cara. -No te preocupes niña pija, no es nada... -Intento levantarme, pero Nicole nota que casi no puedo hacerlo.

-Espera... -Me ayuda a levantarme. -metete en mi habitación, voy a por el botiquín. -Me siento en su cama con su ayuda, y sale a toda prisa a buscar el botiquín. Unos segundos más tarde entra en la habitación y se sienta a mi lado con las piernas cruzadas. Con una de sus manos gira mi cara y me la inspecciona.

-Nicole de verdad no es nada... -Le digo.

-Callate. -Me dice. Coge un algodón y lo impregna con un poco de alcohol. -¿Que ha pasado? -pregunta y pone el algodón en mi labio. Suelto un pequeño grito ahogado ya que escuece.

-Puede que me haya metido con las personas que no debía. -Ella sigue con la cura.

-¿Con que personas?

-Nicole...

-Dylan, son las dos de la mañana, me has despertado y estoy aquí curandote heridas, creo que me merezco saber en qué estás metido. -Esta chica va a acabar conmigo...

-Yo monto en moto, y compito... Le debo pasta al que maneja el cotarro allí. -Ella asiente.

-¿Cuanto?

-Diez mil... -Aparta el algodón y me mira con los ojos abiertos. -Esto ha sido solo un aviso...

-Madre mia... -Puedo ver como se pone nerviosa. -¿Y que pasará si no le das el dinero? -No digo nada, por lo que ella parece entender sola lo que pasaría? -Te matarán Dylan... No tenemos ese dinero ni de coña... -Sonrío al escuchar "tenemos" -¿Y tu porque sonríes ahora? Esto no es un juego...

-Has dicho "tenemos" Como si el problema también formara parte de ti. -Veo como se sonroja y se pone nerviosa.

-Si... Bueno, si te matan... Pues... -Llena otro algodón de alcohol. -Ya sabes, mis padres me obligarían a casarme y esas cosas...

-¿Solo por eso? -Me mira a los ojos pero no dice nada, vuelve a poner el alcohol en el labio. La tengo tan cerca que puedo escuchar los latidos de su corazón y sentir su agitada respiración.

-Voy a por agua y una toalla. -Dice y sale de la habitación. Sin venir a cuento, estoy sonriendo, ¿que me pasa? Nicole aparece de nuevo en la habitación con un pequeño cubito y una toalla. Vuelve a sentarse a mi lado y moja la toalla. Me la pasa poco a poco por la cara para quitar los restos de sangre.

-¿Porque haces esto? -Le pregunto. Ella para y me mira.

-¿Hacer que?

-Curarme.

-¿Acaso quieres que te deje desangrarte?

-No Nicole... Me refiero que ¿porque después de todo eres tan buena persona conmigo...? -Suelta una pequeña bocanada de aire y sonríe.

-No lo sé... -Susurra. Sus grandes y preciosos ojos me atrapan por completo en ella. Miles y miles de sensaciones me recorren el cuerpo entero y siento tanta electricidad dentro de mi que siento que voy a explotar en cualquier momento. Agacha la mirada cuando nos llevamos un rato mirándonos. Con el dedo índice levanto su mentón. Esta me mira con los ojos brillantes.

-Eres preciosa Nicole... -Susurro sin siquiera pensar en lo que digo. Ella se limita a mirarme y sonríe un poco.

-Esto es muy extraño... -Susurra.

Enamorada de un asesinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora