FALSO

№ 36

La noche del trece de septiembre en la casa de los hermanos Choi, fue invadida a las seis en punto por un grupo de chicos que había entrado a la fuerza, estos al estar dentro empezaron a rodear al chico mayor que trataba de huir de ellos pero al ser varios contra uno no pudo y lo apapacharon hasta que sintió el aire salirse se sus pulmones

- Ay, ya ¡Quítense! - exclamó el mayor tratando de zafarse de la cantidad de brazos de que apretaban su cuerpo

- Que lo siguamos abrazando dice - dijo BeomGyu que abrazaba la cintura de su novio y mantenía su cabeza en el pecho de este mientras que seguía moviéndose

Los demás hicieron caso a las palabras de BeomGyu y siguieron con la misma posición por unos instantes más hasta que ya se les hizo incómodo a todos y por es razón soltaron el cuerpo del mayor para que esté por fin respire. Todos rieron por la expresión que tenía YeonJun ahora mismo, estaba entre molesto y feliz, su ceño fruncido y una media sonrisa se hacían presente en el rostro del mayor y eso era muy chistoso de ver, los demás solo empezaron a acomodar todo sobre la mesa principal para dar inició a una pequeña reunión por el cumpleaños de YeonJun

BeomGyu revisaba todo a detalle y con ayuda de los demás lograron decorar con poquito en el living de la casa, aún faltaban algunos y por eso no comían o destapaban la botella de soju que llevaron. Solo había una botella porque su plan no era emborracharse hasta los huesos, tan solo iban a brindar, mañana aún tenían escuela y sería muy molesto ir con un dolor de cabeza terrible

Dentro de poco, las pocas personas que faltaban empezaron a llegar. Había llegado HyunJin con Felix a su lado y luego de minutos más llegó ChaeRyeong, tal como lo había predecido BeomGyu

Y por último llegó Yuqi, invitada por el mismo cumpleañero

- No pensé que fueras capaz de invitar a Yuqi noona, estoy sorprendido - HueningKai habló bajo pero se pudo escuchar perfectamente porque estaba a su lado

- Yo no la invité - mencionó BeomGyu mirando a la susodicha - Fue YeonJun quien lo hizo, quiso que ella también este aquí porque es su amiga

HueningKai miro a BeomGyu y vio perfectamente que la llegada de Yuqi no fue del todo su agrado, se veía en la expresión y cambio de aura que ahora mostraba su hyung. Suspiró, ya que nada más se podía hacer, fue el mismo YeonJun quien la invitó a si que no podían hacer nada

Tan solo quedaba a manos del plan y si BeomGyu estaba dispuesto a cumplirlo, HueningKai había puesto la mente y su hyung tenía que hacer los hechos, eso estaba en sus manos

La fiesta fue cómodo por la motivada charla entre ellos aunque había una ligera tensión por parte de BeomGyu lo que hacía que una pequeña incomodidad les acompañará esa noche, aunque podía todo de su parte para que sea distinto y que Yuqi ni su novio se sintieran mal. Ese día era especial y no tenía que ser así, no era justo. Todo mejoró cuando HyunJin propuso abrir la única botella de había en la mesa juntos al pastel del cumpleañero, se sirvieron en vasos chiquitos y cada uno brindó por un año más de vida de su mayor

Estuvo la tentación de ir a comprar más licor y eso había sido plan de las mujeres del lugar y el más chiquito del grupo pero obvio que no aceptaron porque no debían

Si YeonJun tuviera que describir como se sentía en ese momento sería que estaba feliz y satisfecho. Feliz, porque compartía momentos con las personas que consideraba parte de su familia, muy aparte de su hermano, estaba agradecido con HyunJin, Yeji y Lia por ser quienes cuidaron a su hermano mientras él no estuvo y cuando llegó a pisar Corea ellos lo acogieron a su círculo de amigos como si conocieran de toda la vida. Estaba a lado de su novio, su lindo chico lo miraba con una encantadora sonrisa en esos labios delgados que los cautivaba a cada momento. Aunque no haya pedido esto porque lo único que tenía en mente era pasar todo el día a lado de BeomGyu, podía decir que le gustaba más de esa compañía que le estaban dando en ese momento. Y se sentía satisfecho no solo por la comida o la probada de alcohol, sino que era satisfacción en ese momento, disfrutar de una plática muy estúpida entre todos era realmente satisfactorio porque ya no habían tensiones como minutos antes, por fin su novio se dejó llevar por el momento cálido que los demás de brindaban juntos, las anécdotas que algunos se sabían de memoria, pero no estaba de más repetirlas y hacer reír a todos. Le era satisfactorio el ver a todos riendo, reunidos y sentados en el piso del living por su cumpleaños