№ 45

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Seis armas de fuego apuntandole directo a la cabeza, ninguno decía nada y no se movía de su dirección ni de su posición. Estaban en un silencio sepulcral, digno de un cementerio. TaeHyun parecía no importarle que BeomGyu le apunte con su arma, a este no le temblaba los brazos y su mirada había determinación por lo cual todos sus movimientos eran seguros

Todos tenían miedo dentro de si pero solo uno lo demostraba en ese instante

YeonJun veía a su pareja apuntadole a ese chico, estaba asustado porque jamás pensó verle de ese modo, teniendo un arma de fuego listo para matar a alguien. El dedo de BeomGyu estaba puesto sobre el gatillo y de allí no se movía, por lo cual se causaba una gran ansiedad, porque quizás esa arma era automática y cualquier error que haga disparará porque no tenía el seguro puesto

Todos estaban tenso pero solo YeonJun era quien sollozaba y se removia por su llanto

- Por favor, paren - fue un susurro débil pero debido al silencio que había era muy claro escucharlo - Por favor, ya no más

- YeonJun, no supliques - demandó su chico con una voz demasiado neutra y fría, sin dejar en ningún momento de mirar y apuntar a TaeHyun - Ellos no merecen eso de tí, ellos van a matarnos y aunque supliquemos no nos oirán. Lo más fácil es matarlos también

- No puedo hacer eso - reclamó - Yo no quitó vidas de las personas, yo los salvó. Es demasiado contradictorio lo que dices. Yo... No puedo

- No hay otro modo...

- ¡Si lo hay! - YeonJun estaba asustado y debido a eso era sus palabras y su accionar del mismo modo - Sé que hay otra solución, matarnos no es la más adecuada. Por favor, BeomGyu, no eres como ellos

- Si tengo que mancharme las manos para que estés con vida... - la punta del arma se pegó por completo a la frente de TaeHyun - Lo haré entonces

Fue rápido. BeomGyu había estado dispuesto a matar a TaeHyun y este iba a morir sino fuera porque la única mujer se lanzó hacia él para impedir eso. El disparo fue hecho a otro lado más no al cuerpo del chico

Karina era tan buena en defensa cuerpo a cuerpo como lo era BeomGyu, por eso está le propinaba golpes en su rostro y pecho pero de una maniobra BeomGyu consiguió liberarse de la mujer. Los demás hombres de TaeHyun se acercaron para empezar a golpearle y este como podía se defendía. Ver la brutalidad que había en los movientos de su pareja era como ver a un peleador de luchas callejeras. YeonJun no sabía si estar horrorizado o admirar lo tan ágil que era su pareja a pesar de su contextura delgada

Pero el momento de gloria no duró mucho

Un golpe hacia su oído derecho lo hizo caer al suelo sosteniéndose ese lado de su cabeza, el sonido agudo era demasiado fuerte que obstruia los gritos de YeonJun, además que su visión parecía fallar también. Vio a TaeHyun colocarse al frente de él y parecía que lo golpeaba pero no sentía ningún golpe, solo lo veía con su cara roja de enojo, sus puños directos a su cara, leves choques entre si pero nada que le diera entender muy bien el entorno. Estaba confundido y todo a su alrededor parecía estar en mudo

Cuando TaeHyun se canso de darle como saco de boxeo, agarro el arma que tuvo BeomGyu en manos para regresar y apuntarle desde el suelo. Los gritos suplicantes del otro chico no le causaban ningún remordimiento, es más, de tan solo escucharlo le recordaba el porque pasó todo eso. Las palabras de Karina se repetían en su cabeza, de que BeomGyu tenía que pagar por su atrevimiento, por a verlo rechazado, por verle reemplazado por alguien tan ordinario. Por un simple estudiante de medicina pediátrica

A pesar de que su cabeza de un poco de vueltas y que esa adrenalina que sentía en su cuerpo era tan fuerte como para cegarlo y hacer lo que hacía, aún si le temblaban las manos teniendo su arma, apuntadole la cabeza del que es su amor más grande y a pesar de todo, no tenía el coraje de matarlo como este lo había hecho con su corazón

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