Él es mío

14 4 1
                                    

—¡No tengo tiempo! ¡Fuera mi camino!

—Es mejor que pienses las cosas, no te precipites puede que no sea el Rey.

—Dije ¡Que te quites! Si él vive muy pronto moriré y no cumpliré mi objetivó.

—Pero ¿morir no es lo que más quieres?

—Nunca entenderías lo que en verdad quiero. ¡¡quítate!!

—Señor Alexander por favor no se moleste.

—No tengo tiempo Lucio. Esto ya no incluye mejor sigue con tu vida

(Sale volando a gran velocidad a buscar al sucesor del Rey) Cómo se atreve a decir esa maldita ángel que me calme esto es malo, aunque no lo crea, mejor me apresuro para matar a ese niño aún no sabe controlar su poder será fácil, mira ya te encontré, segunda transformación calcinación. (Al intentar bajar destruye el piso por la velocidad que venía volando).

—Vaya, vaya miren a quien me encontré, no es nada más ni nada menos que el gran contratista–dijo un demonio que también fue para llevarse al niño–parece que también vienes a lo mismo que yo.

—Me parece que me encontré a una mierda cerca de esta calle apesta a pesar que estoy lejos de esa cosa.

—Búrlate lo que quieras solo no me molestes simplemente vine por el niño.

—Como sea no puedo dejar que te lo lleves, yo lo matare.

—Nunca cambiarás Dubadir, eres un maldito, ¿Por qué no me dejas hacer mi trabajo y te ahorro el tiempo?

—No, límpiate los oídos parece que no escuchas

—¿Te opones?, No me digas que vas a defender a esa escoria.

—Se bien lo que harás, vienes a hacer el trabajo de tu hermano mayor, ¡Que buen hermanito!

—No digas estupideces yo vine por mi propia voluntad ese niño lo necesito para mí.

—Mejor lárgate de mí vista demonio, solo me causas repugnancia.

—¡Vamos! Fuimos buenos compañeros, no te alegras de verme además de compartir la misma magia fuiste un gran estafador.

—Deja de hablar y obedéceme, no te lo volveré a repetir, ¡Lárgate!

—¡¡Dubadir!!! ¡No mates al niño!

—Ángela no te parece que ahora estoy más ocupado de qué crees.

—Mira que belleza parece que además de llevarme al niño matare un ángel clase ES.

—Ella no importa es una pendeja igual que tú.

—¡No hablen de mí como si no estuviera!

—Lamentablemente no te puedo matar porque los dos somos demonios, pero si te puedo golpear causándote un dolor eterno, así que te recomiendo que no me molestes.

—¿Enserio vas a golpear a uno de tu misma raza?

—Puedo ser un Demonio, pero soy muy distinto a ti.

—AH si hablemos de pobre vida, condenado por un ser todopoderoso y maldito por sus propias acciones

—Sabes que no soy reconocido totalmente como el Rey del purgatorio.

—A pesar de eso sigues siendo uno de los nuestros, quieras o no.

—Yo hago mi propio futuro y mi único camino

—Nunca podrás dejar atrás el pasado, siempre te perseguiré, tus recuerdos son vagos y aun así siempre estaré ahí para recordarte que ni para un demonio tan especial como tú podrías alcanzar la redención.

El Contratista CondenadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora