𝗔𝗣𝗢𝗗𝗢𝗦 ➤ wonki

𝙨𝙚𝙜𝙪𝙣𝙙𝙤 𝙖𝙥𝙤𝙙𝙤

Ambos chicos se encontraban sentados en el cómodo sofá del departamento del mayor, muy juntos el uno con el otro, con un tazón lleno de palomitas de maíz en su regazo. Las luces de toda la casa se encontraban apagadas y lo único que les iluminaba era el televisor frente a ellos.

Se encontraban viendo una de las más recientes películas de terror y como Ni-Ki era algo asustadizo con el tema en cuestión, se apegó un poco más al pelinegro. Yang sólo sonrió por inercia sin dejar de prestar atención a la película, disfrutaba de la cercanía de Nishimura, además de que no le incomodaba para nada.

Un fuerte grito se escapó de la garganta del menor de ambos cuando el dichoso "fantasma" arrastraba a uno de los protagonistas hacia el sótano de su casa. Se levantó de su asiento rápidamente y encendió el interruptor de la luz, pegando de golpe en su vista y en la de Jungwon.

—Creo que es mejor dejarlo así.- Se excusó.- Estar a oscuras puede hacer daño a la vista.- Y volvió al lado de Yang.

El mayor lo rodeó con sus delgados brazos y recargó su mentón sobre su cabeza.

—Eres un bebé.-Se burló él .

—¡No soy un bebé!- Se defendió con las mejillas rojas de la vergüenza.

—¡Claro que si! De ahora en adelante te llamaré bebé.-Sonrió divertido.

—¿Ya no soy un cachorrito?- Preguntó Ni-Ki al recordar su ahora antiguo apodo.

—Eres un cachorro bebé.- Concluyó.

Ambos rieron y al final terminaron viendo la película entera sin prestar atención realmente a ésta. Jungwon estaba más ocupado haciéndole mimos a su menor y Nishimura estaba concentrado en disfrutar esos que le brindaba el contrarió.