Una mate diferente

Parte 2. Medidas desesperadas

Daniel

Pero que maldito desastre!!! Daniel no sabía que mas hacer, habían hakeado las cuentas de la empresa y se llevaron cerca de 300 mil pesos, estaba que lo llevaba el maldito diablo, lo único rescatable de la situación era que la empresa era muy reciente y el capital robado era relativamente bajo si lo comparaba con otros negocios que tenía, pero es que este negocio tenía que funcionar, era su primer negocio en el mundo del internet y la publicidad y ahora tenía que hechar todo para atrás, mas que por el dinero, por que no se iba a arriesgar a ser hakeado de nuevo y que se llevaran no solo dinero, si no información.

Daniel era el alfa de la manada Luna Azul, misma que se haya en un pueblo bastante aislado en Hidalgo, México, y Omar era su beta, su amigo de infancia. Daniel llevaba al frente de la manda mas de 100 años, cuando hayo a su mate y su padre le sedió la batuta de alfa, nombrando con él a Omar como su beta.

Cargaba con una gran responsabilidad, no solo era el alfa de su manada, era el alfa de las manadas de México, quien los representaba y lideraba.

-¡Omar! grito frustrado y cansado

-Dime

-¿ya pudiste resolver que carajo paso aquí? sabes bien que a estas cosas de la computadora yo no le entiendo y necesito que me des algo mas que solo "nos hakearon" dijo el alfa haciendo comillas con los dedos y matando a Omar con la mirada

-Omar conocía muy bien a Daniel y sabía en que condiciones se encontraba, así que sin miedo contesto:

-Ya lo se Daniel, pero te recuerdo que desde que Luis se fue con su familia, no ha habido nadie mas dentro de la manda que sepa de estas cosas, de haber sabido que pasaría ...

-Nada! grito Daniel, no es posible que nadie en las manadas cercanas sepa de esto, ¿que nadie en este país estudia o que?

-Calmte, sabes bien que son pocas las manadas que deciden llevar estudios normales, muchos de ellos prefieren estar completamente aislados y llevar negocios y empleos mas discretos

-¿ y que supone que hagamos entonces? mandar a traer expertos del norte llevara horas, ya he habado con varios de ellos, muchos han salido del país, y los pocos que hay tienen conocimientos muy básicos, esto requiere medidas mas serias, no sabemos quien carajo nos puede estar rastreando, recuerda que los lobos del sur no gustan de como lidero las mandas.

No era secreto que Daniel se había ganado la enemistad de las manadas sureñas, pues ellos odiaban a los humanos y todo lo que implicaban, eso incluía al forma en que vivían, vestían y coexistian, no dejaban que sus habitantes estudiaran, mantenían a sus pueblos a base de la agricultura y ganadería tradicional y los negocios que tenían por fuera solo eran visitados por altos rangos de cada pueblo.

-La frustración de Daniel crecía cada vez mas, sabía que los sureños no tenían la capacidad de hacer algo así, pero tenía un mal presentimiento con esto, tenía varias empresas desde hace 70 años y la mayoría tenían servicios de telecomunicaciones, que atacaran esta específicamente le resultaba raro y dejaba una sensación extraña en él.

-Mira, llevamos horas aquí y no hemos resuelto nada, ya se que esto no te gustará, pero creo que lo mas conveniente es contratar personal humano, ellos están mejor capacitados que nosotros y estarán aquí en cuestión de horas si así lo deseas

-Daniel levanto la vista muy enojado, no estaba para nada convencido, pero sabía que sería la opción mas viable por el momento. Con cara de fastidio y soltando el aire que tenía contenido, asintió con la cabeza

-Bien, haré unas llamdas...

-Pero aquí hay reglas, interrumpió, necesito que sea alguien de certera confianza, manda sus datos a Dylan para que investigue a quienes vendrán, quiero saber todo, y si es posible que solo venga una persona, la iras a recoger y la llevarás directo a COPCOM, la quiero lo mas temprano posible, me reportas cada 2 horas el avance y la llevas de regreso al punto de encuentro.