Los Elegidos (LWA x TLoZ) [Creado por Mainder]

Capítulo 2

Capítulo 2: Link

La esgrima es un deporte un tanto complicado. Tener que dominar a la perfección el manejo de la espada es una tarea que no muchos se molestan en aprender. Principalmente porque, con los tiempos que corren, esto dejó de ser obligatorio para los jóvenes que tarde o temprano acabarían sirviendo a su país en la guerra, dado a los tiempos actuales, tiempos donde no se necesitan de soldados que empuñen espadas, prefiriendo usar armas de fuego más eficaces y de mayor alcance, pero sin la misma gracia y belleza con la que una espada puede ser enfundada.

Esto era especialmente raro para un chico, el cual está muy empeñado en amaestrar por completo el arte de esta majestuosa arma blanca, quizá en su vida pasada él fue un gran espadachín que combatió con su cuerpo y alma en la guerra, o al menos eso es lo que él solía pensar de si mismo. Sentía tanta pasión por esta antigua arte mayormente japonesa, a pesar de no ser nativo de ese lugar, siendo más bien un extranjero que llegó al país del sol naciente por necesidad de su familia.

A pesar de eso, siempre se sintió muy atraído por conocer más y más acerca de la esgrima, tanto que logró convencer a su tío de que lo inscriba en una academia de esgrima que estaba relativamente cerca de su casa. Gracias a éso, él logró convertirse en lo que siempre había soñado, aunque no de la manera que lo esperaba. Siempre sintió esa necesidad, ese deseo por algo más que una vida ordinaria. Un deseo por aventura. Claro que esto no era muy notorio. El chico solía ser callado, reservado y bastante serio a la vista de sus compañeros.

Todos lo veían como un chico disciplinado y responsable, cosas que era realmente cierta, pero nunca se molestaron en ver más allá de lo evidente. Después de todo, para la mayoría que lo conocían, él solo era el alumno firme y dedicado que los superaba clase a clase, cuyo nombre era...

--¡Joven Link!-- llamó el entrenador de esgrima --Su turno--

El ya mencionado Link, que se encontraba sentado en una banca esperando con su casco y su espada en mano, asintió con la cabeza y se puso de pie. Procedió a acomodar su cabello rubio de tal forma que no le incomodasen, y se colocó el casco. Se acercó al centro, donde lo esperaba su oponente, un compañero suyo el cual se encontraba muy nervioso. A pesar de ambos llevar casco, podía sentir la mirada de los profundos ojos azules de su adversario.

Los demás compañeros de clase de los elegidos para protagonizar el duelo de ese momento, se encontraban viendo, expectantes, sabiendo que lo más probable era que fuese Link el que ganase. Él siempre ganaba, no por nada era el alumno estrella y el favorito del entrenador. A pesar de eso, ninguno le llegó a sentir envidia o rencor. Siempre lo trataban con respeto. Para la mayoría de ellos, quienes también sentían una fuerte pasión por el deporte, lo veían como un muro a superar. Una sana competencia, en resumen.

El joven extranjero se puso en guardia, dando a entender que estaba listo para el duelo. Las reglas son sencillas, defenderse y evitar que el otro te golpee. Si te golpean 15 veces perdiste. Un sencillo sistema por puntos como cualquier otro deporte, que en este caso son las estocadas que logras darle a tu adversario.

--A continuación-- habló el entrenador, mientras estaba en medio de los dos enfrentados --veremos un duelo entre el joven Satoru y el joven Link-- dicho esto, se apartó --¡comiencen!

Link no perdió el tiempo, y en cuanto escuchó que la pelea ya había empezado, se lanzó en contra de su oponente con una serie de estocadas rápidas directo al pecho. Satoru hizo lo posible para defenderse intentando repeler la espada de su adversario con la suya. Al darse cuenta de como se defendía su oponente, Link decidió retroceder un poco, adoptando una postura más defensiva.

Su oponente, al notar esto, no desaprovechó la oportunidad. Era su turno de ser el atacante. Empezó a dar estocadas un tanto aleatorias, esperando que una de ellas diera con su oponente. Link simplemente repelía todos los intentos de Satoru por atinarle un golpe, hasta que en uno de ellos, logró repeler la espada del atacante de tal manera que tenía pase libre para atinarle justo en el pecho, cosa que logró rápidamente, sin que su adversario se diese cuenta en el momento.