Nota De Inicio: Esperamos que disfruten esta historia y pasen un buen momento leyendo y comentando, agradecemos todo el apoyo que siempre brindan.
-Hay no, esta vez si la cague, la cague realmente enserio- dijo una chica de cabello castaño, ligeramente largo con muchas pecas en su mejilla y algunas partes de su cuerpo.
Ella se va al baño dejando solo al chico que ni siquiera estaba consiente solo para que ella pudiera verse mejor en el espejo y pudiera refrescar un poco mejor su cara, todo parecía tan surrealista que apenas podía creer que estaba despierta, tal vez era eso, una maldita pesadilla el cual ella despertaría con el sonido de la alarme de su despertador y se daría cuenta de que nunca le hizo nada malo a él. Ella se toca la cara dando un pequeño pellizco y al sentir ese ligero dolor abre aun más los ojos aterrada al darse cuenta de que todo había pasado realmente, ella coloca su mano en su zona íntima y al ver aquel líquido seminal casi siente que se iba a desmayar.
-Lo siento mucho Lincoln-
Un año antes.
Luna Loud era la hermana mayor de diecisiete años más salvaje y atrevida de las hermanas Louds, pero cumplía muy bien su rol de la hermana responsable y se aseguraba de dar el buen ejemplo a todos y de tomar en serio sus responsabilidades, se aseguraba que los chicos no hicieran locuras muchos peores que ella, dejaba que sus creatividades volaran y si tenía que quedarse a casa a cuidar a las menores o apoyar a un hermano lo hacía. Ella apreciaba mucho su familia y trataba de ser una buena hermana y aun así lograba seguir siendo una demente con la guitarra y dejaba asombrado al publico que tenía la fortuna de escucharla tocar. Luna parecía que todo marchaba bien para ella, su banda era perfecta, su récord académico aun con algunas notas bajas, era decente para ella y la percepción publica y familiar era excelente.
-Hey Luna otra carta de tus fans llego al buzón de la casa- dijo Luan saludando a su hermana quien se tira a su cama relajada. -Uy este si que es muy larga, veinte hojas solo para elogiarte-
-Que puedo decirte sis, soy una buena rockera bastante buena en lo que hago- ella cierra sus ojos con una gran sonrisa.
Las dos castañas escuchan un fuerte ruido de golpe y las quejas del único varón con cabello blanco de la casa quien da un fuerte portazo exigiendo a sus hermanas tiempo a solas para él, la mayoría de las chicas hicieron caso eso, desde que cumplió trece años las chicas empezaron a respetar más la privacidad del chico y cuando él pedía estar solo era mejor dejarlo solo. Esto a orden de Luna luego de que accidentalmente Luan encontrara al chico masturbándose y el momento tan vergonzoso e incomodo que había resultado para ambos, claro Luna y Luan no dijeron nada como el albino, aunque Lynn pudo enterarse de alguna manera por suerte hasta ella sabía que no debía decir nada al respecto de ello, al final Lincoln era un chico en crecimiento.
-¿Qué crees que le haya pasado?- se pregunta levantándose de su cama.
-Bueno me arriesgaría en pensar que debe ser o un problema de chicas o un problema escolar o puede que ambas- respondió la comediante colocando su capa y sombrero para un show de magia que debía hacer en una fiesta infantil -Nos vemos luego-
La chica deja sola a Luna quien luego de mirar un rato al techo decide hacer de hermana mayor y averiguar que le pasaba a su hermano menor, no le gustaba verlo tan molesto y que actuara así, si algo le molestaba ella le ayudaría. Luna estaba apunto de abrir la puerta como hacía siempre, pero recuerda la regla de tocar dos veces al menos antes.
-Lincoln estas am como decirlo, ¿jugando con el salami?- dijo tratando de no delatar sus acciones.
-¡No molestes, ¿y quien dice eso de jugar con el salami?- respondió con voz molesta.
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Pasión y Locura
FanfictionLuna Loud la hermana que aspiraba ser una estrella famosa del rock en todo el mundo fue una chica buena y algo alocada de las hijas Louds, pero una gran chica de quince años y una gran amiga para muchos. ¿Qué pasaría si ella por un error decide cam...