𝐃𝐚𝐝𝐝𝐲 𝐈𝐬𝐬𝐮𝐞𝐬 | 𝐄𝐫𝐞𝐧 𝐉𝐞𝐚𝐠𝐞𝐫 [editando]

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟑 - 𝐏𝐫ó𝐟𝐮𝐠𝐨𝐬

Hola, si pudieras votar en este y en los anteriores capítulos te lo agradecería mucho <3

Gracias por leer, y disfruten el capitulo.

______________

Mi corazón es lo único que está latiendo en estos precisos momentos.

Solamente queríamos escapar, liberarla o ¿Seguir un simple capricho?

— Eren Jaeger.

— ¿Q-Qué es esto?— Me separe de su lado hasta alcanzar el periódico y observar directamente la portada, no podía ser cierto.

Siento el aliento del castaño en mi nuca, mi anatomía ya no está abrazada por el calor de nuestros cuerpos. Enfoco mi atención en el encabezado que está frente a mí, niego con mi cabeza repetidas veces y maldigo entre dientes ante lo que estaba viendo.

— Bueno, no pude ocultar esto por mucho tiempo— Hablo con desgano mientras se levanta de la cama, escucho el chasquido de su chispero. Concluyó que está fumando desde el otro lado de la habitación, evadiendo como es costumbre los momentos de caos.

— ¿Qué me estás queriendo decir, Jaeger? — Caminó hasta él totalmente cabreada por la situación.

— Me imaginaba esta situación si te traía— Respondió simple.

Mis labios están entreabiertos, no sabía qué decir o cuestionar puesto que estaba al tanto de sus futuras acciones.

— Dime que hiciste, ne...

— Yo no hice nada, tu padre se creó un cuento en su podrida cabeza de mierda que tiene— Me responde frente a frente, siento como mi cuerpo se estremece ante el poderío de sus palabras lo cual hace que baje la mirada y sienta aquel temor recorrer mi anatomía semidesnuda.

— N-No pasaría nada si no estuviera en la portada de desaparecidos, ni mucho menos que dijeran que estoy secuestrada.

— Creo que ahora puedes tener una idea de porque no te dejaba ocupar tu teléfono — confiesa.

Esto no está pasando, es una vil farsa.

— ¿Confías en mí?— Cuestionó posando una de sus manos en mis hombros y rozar su dedo pulgar donde estarían mis clavículas. Suelto un pesado suspiro mientras asiento con la cabeza y respondo pero antes me hace una pregunta — ¿Estarás siempre conmigo?

— Si, papá.

***

Dos días después.

Una discusión pesada como nunca antes habíamos tenido no me permitió conciliar el sueño esta noche, tenía ganas de vomitar y llorar hasta sentirme rejuvenecida pero no podía demostrar aquella debilidad por mi estúpido orgullo. Solamente quería ser libre junto con él, desaparecer de este lado del mundo o de la faz de la tierra pero estando a salvo y sin que nadie interfiriera entre nosotros.

Secó las lágrimas que aún recorren mis mejillas, el cuerpo de Eren se acomoda desde el otro lado de la cama. Extraño el calor de su cuerpo, aunque sea solamente una noche en que sus fornidos brazos no estén enredados entre los míos a la vez que susurraba sobre mis húmedos labios lo hermosa que era y cómo le hacía sentir cada vez que observaba mis ojos.