La Carta.

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Antes de empezar con el capítulo les voy a decir el resultado de la votación, para elegir la casa donde va a estar nuestro protagonista y la casa ganadora es...

¡SLYTHERIN!

Con cuatro votos a favor fue la ganadora y la única otra casa que consiguió votos fue Gryffindor, la cual obtuvo dos votos a favor.

¿De que casa son ustedes? Yo soy de Hufflepuff.

Ahora sí empezamos con el capítulo, que lo disfruten.

Ya había pasado un tiempo desde que regrese a Inglaterra y me comenzaba a preguntar ¿Cuando llegaría mi carta de Hogwarts?, Cuando de repente se escucha que alguien toca el timbre de la casa, volteo en dirección a la puerta esperanzado de que sea lo que tanto he estado esperando, después logro escuchar la voz de mi madre que se encontraba en la cocina.

Madre: Hijo ¿puedes abrir la puerta? Por favor.

Israel: claro madre, ya voy —me levanto del sofá donde me encontraba dibujando.

Me voy acercando a la puerta muy emocionado por la posibilidad de que sea lo que tanto e estado esperando, pero cuando por fin llegó a la puerta y la abro para ver...

¿?: Hola buenos días ¿Estaría interesado en comprar unas galletas? —Era una niña que esta ofreciendo galletas.

Israel: *Suspiro* Claro, quiero dos cajas de galletas de chocolate —no era lo que estaba esperando, pero al menos pude comprar unas galletas de chocolate.

Niña: Gracias por su compra —Me lo dice mientras me entrega las galletas y le doy el dinero.

Cierro la puerta y me acerco a la cocina.

Madre: ¿Quién era hijo?

Israel: Era una niña que vendía galletas, compré dos cajas, una para mí y la otra para ti —lo dije mientras dejo las galletas en el estante de arriba, en eso escucho que vuelve a sonar el timbre.

Israel: *suspiro* ojalá que no sea otro vendedor —Lo digo mientras me acerco a la puerta, mientras como una galleta, abro la puerta y lo que logro ver y que me dejó asombrado no fue a otro vendedor o alguna persona que ofrezca algún servicio, lo que vi fue a un hombre alto, dos veces más alto que un hombre de estatura normal y tres veces más ancho que una persona normal era...

Hagrid: Hola niño, tu debes de ser Israel, mi nombres es Hagrid y vengo a entregarte tu carta de aceptación para poder ir al colegio Hogwarts de magia y hechicería, la mejor escuela en el mundo si me lo preguntas a mi —Lo dijo con una voz que reflejaba estar orgulloso de eso.

Israel: aaah si, soy Israel —lo digo mientras agarro la carta, en eso mi madre se acerca a la puerta y me dice.

Madre: ¿Porque tardas tanto? ¿Quién está en la puerta?

Hagrid: Hola buenos días, supongo que usted debe de ser la madre de Israel.

Mu madre se sorprendió al ver a hagrid pero después salió estado de sorpresa para responder.

Madre: así es soy la madre de Israel y ¿Usted quién es?.

Hagrid: soy el guardabosques del colegio Hogwarts el mejor colegio si es que deseas aprender magia.

Madre: ¿Magia? Te refieres a sacar conejos de un sombrero ¿Ese tipo de magia?.

Hagrid: Eso no es magia, yo habla de magia de verdad —Hagrid no pudo evitar sentirse ofendido por la comparación que hizo mi madre—  La magia que su hijo va a aprender va a ser más asombrosa que sacar un tonto conejo blanco de un sombrero, aprenderá a realizar pociones, transformaciones, vuelo con escoba, defensas contra las artes oscuras y mucha cosas más  —Luego me voltea a ver—  Claro si es que decides asistir al colegio, por supuesto no te vamos a obligar a que asistas si no lo deseas, aún que dudo que no quieras ir ¿No?.

Reencarne en el mundo mágico de HogwartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora