MI ADORADO VERDUGO

Prologo

Me llamo Nayla Williams, actualmente tengo 23 años, me recibí como médico en España (aún sigo en España) forme una vida hermosa acá conocí a gente maravillosa que es parte importante en mi vida, me volví a enamorar conocí a un hombre maravilloso, no lo amo pero le quiero y él lo sabe he sido muy sincera con Kayden y el conmigo, ambos hemos pasado por situaciones similares y nos hemos conectado perfectamente, pero ahora debo regresar a dirigir un proyecto español, por haber sido la mejor de mi promoción me delegaron tal responsabilidad y eso implica separarme de Kayden.

Para que entiendan mejor les contare que paso hace seis años...

No habían palabras para describir lo feliz que era, no le podía pedir absolutamente nada más a la vida pero para nuestra cruda realidad la felicidad en este mundo es momentánea de un momento te puedes sentir plenamente feliz y al otro todo se convierte en llanto dolor y penumbra, en fin si quieres sobrevivir te tienes que acostumbrar, no es fácil bueno nunca alguien ha dicho que vivir es fácil.

Estaba a punto de entrar a la universidad, solo faltaban un par de semana y llevaba una relación de más de dos años con Dominick, el andar con él era un completo sueño, él se encontraba en el tercer semestre de economía, lo nuestro iba muy bien, nuestros padres ya nos querían comprometer pero una mañana desperté de ese hermoso sueño y caí a la cruda realidad, esa mañana aun la recuerdo muy bien.

Una mañana hermosa, el clima estaba templado y el cielo despejado, tenía que ir a la universidad a dejar papeles de inscripción, ya estaba adentro de las instalaciones, cuando vibra mi celular, en el momento no le hice mucho caso pero unos 20 minutos después lo revise.

Oh sorpresa la que me lleve, era mi Dominick con Cleo, Cleo era su mejor a amiga, yo no tenía ningún problema que se llevaran tan bien, al contario me agradaba pero jamás imagine una traición de tal magnitud.

Yo sabía que el día anterior él había salido de fiesta con ella y me habían invitado pero yo no quise ir, quería que convivieran los dos, pero vaya forma que lo hicieron.

Ver esas fotos fue terrible sentía la rabia y el dolor recorrer todo mi cuerpo, las lágrimas rodaban en mi rostro, era imposible ver a ese par en una cama sin sentir nada, no podía congelar mis emociones, apenas recuerdo que me subí a un taxi y fui en busca de mi mejor amigo.

Yael me recibió en su apartamento y se dio cuenta que algo no estaba bien, el me conoce perfectamente no me preguntó nada solo me abrazo fuerte y era lo que necesitaba en ese momento.

Retome el aíre para poder hablar con él pero se me hacía imposible, Yael solo ve las fotos y se para con rabia.

–Ese imbécil –Grita, las venas de su rostro se pronuncian más y su piel blanca cambia a ser un poco roja.

–Nena ¿estás bien? –él es hijo de la mejor amiga de mi mamá, nos queremos como si fuéramos hermanos de sangre y siempre teníamos muestras de cariño uno con el otro.

Levante la mirada y con los ojos húmedos y la voz entre cortada le digo.

–Estaré bien, mañana hablare con él aunque esto no tiene ni una jodida explicación.

Yael, solo está ahí para mí, no me pregunta en lo absoluto solo me está dando apoyo, el intenta que yo coma algo pero le fue imposible, intento que viéramos una película pero tampoco le dio resultado, así que salimos a caminar a un parque de la zona donde él vive.

Había quedado con Dominick pasar la tarde juntos pero yo nunca llegue a donde el me esperaba, mensajes, llamadas y notas de vos de él inundaron mi celular, no tuve más remedio que apagarlo.

Aun me duele cuando recuerdo el infierno que pase esos días, después de eso me jure no ser tan ciega y jamás dejarme caer por alguien.

Esa noche no quise llegar a dormir a mi casa, me quede en el apartamento de Yael y llego Lorisa, mi mejor amiga y también amiga de Yael.