LAS CARTAS QUE NUNCA ENVIÉ.

CARTA N° 2

<<J A S G>>

A ÉL CHICO QUE PERDONÉ Y ME VOLVIÓ A FALLAR

Carajo, de ti hay mucho que decir, pero empecemos desde el principio.

Facebook une personas, así de simple. Vaya que es la red social más popular, claro ahora existe Instagram, Snapchat, Tinder, Omegle incluso.

Facebook, una solicitud de amistad, un toque y una conversación para romper el hielo.

Pero vamos desde el principio, ese donde yo piqué y acepté la solicitud de amistad.

Me considero una chica poco sociable, es decir, no me gusta enviar solicitudes de amistad a cualquier persona, inclusive, no me gusta tener a mi familia agregado a mis redes sociales.

Tampoco soy la chica más fotogénica, no me gusta subir tanto contenido, quizás una foto cada dos meses o tres cuando mucho.

Eso sí, comparto cualquier estupidez o cosa que me parece bonita de admirar, ya sabes, de esos que causan un placer visual, como obras de arte y lugares impresionantes.

En fin, vayamos a ese día, cuando acepte por error la solicitud, sí, por error.

Había estado checando las solicitudes, hasta que llegue a la tuya y a la de dos amigos, que no tenía agregados pero que si conocía.
Después de querer confirmar la de ellos, el teléfono se puso loco y voilá, confirmé la tuya por error, sí, por error.

No habían pasado más de 3 minutos cuando me llegó un mensaje, el tuyo.

Hola preciosa, ¿cómo estás?, sí, esas simples palabras que iniciaron con todo.

He de admitir que también soy la persona más chocante y me jode rápido cuando alguien no tiene buena ortografía. Así que tú, estabas de suerte porque te respondí a los 10 minutos, si también soy algo colgada y más con los extraños.

Un, hola, bien gracias, fue mi respuesta, la verdad no tenía ánimos de hablar pero también iba a ser una maleducada si no respondía.

Los siguientes días, me dejabas un mensaje de buenos días y me deseabas que tuviera un lindo día, claro, acompañado de un corazón.

Y así fue todo durante 8 meses, hasta que te vi en la ciudad.

Debo aclarar, yo no soy tan pero tan fan de conocer a las personas, pero estabas de suerte y se dio la ocasión.

Caminaste hacia mi, me saludaste con una enorme sonrisa y me dijiste; Te ves preciosa.

La tercera ocasión que nos vimos, me pediste que sea tu novia y acepté.

Y así empezó todo.

Nunca me besaste porque no quise que lo hicieras.
Lo siento pero, odiaba saber que la saliva de un chico estaría en mi boca durante 6 meses, claro eso sin contar que soy una chica demasiado especial en cuanto a quien le doy mis besos.

Sí, solo deje que dieras besos en la mejilla y en las manos, por que decías que mis manos eran tan lindas, blancas y suaves.

Odiabas que me mordiera las uñas, incluso que las tuviera pintadas.

Pero eso es cosa del pasado.

Todo se terminó porque lo arruinaste.
Sí, tú echaste todo a perder.

Me fuiste infiel con tu mejor amiga, no solo eso, me trataste mal.

Te perdoné a los dos meses, y no fuiste hasta diciembre que lo volvimos a intentar, lo recuerdo perfectamente.

Me llamaste y me pediste perdón, te dije que no quería verte e incluso lloraste y después de mil disculpas, te perdoné. Me pediste regresar y te dije que lo pensaría, así que me llamaste nuevamente al anochecer y acepté.

Te dije que lo mantendriamos a distancia, puesto que me había mudado a 6 horas de donde vivías y me dijiste que estaba bien, que lo llevaríamos así, hasta que yo regresara a casa.

Pero solo bastó una semana, porque llegó el 31 de diciembre y lo volviste a joder.

Tomaste demasiado, incluso hubieron vídeos que llegaron a mi teléfono por parte de tu mejor amigo, que descarado fuiste.

Te mandé al carajo y con eso te bloquee de todos lados.

Me dolió más cuando tú mejor amigo me envió un audio, ese donde decías; Si ella te gusta, quedatela, te la regalo, Nelly es algo tonta y...

Dejé de escuchar el audio, porque me molesto la manera en la que te expresaste de mi.

Incluso te mande al diablo cuando me llamaste del número de él, te dije "Ojalá te den por el c*lo, idiota, no me vuelvas a llamar en tu jodida vida", y rompí mi teléfono para comprar otro y así, sacarte por completo de mi vida.

Ay, te perdoné y me fallaste de nuevo.
Te di una segunda oportunidad y la volviste a joder.

Ahora han pasado 4 años y medio, eres papá y solo espero que la vida trate bien a tú hijo, él no tiene la culpa de los errores que tu cometiste, así que espero que él no pague por tus errores.

Te diría que te odio, pero no es así, porque el odio es un sentimiento y yo por ti no siento nada.

Y, JASG, solo quiero que la vida te trate como me trataste a mi.

Atte: La chica que engañaste dos veces y a la cual llamaste tonta.