Mi salvación eres Tú

Capitulo 32: La estación de policía

Christopher 💙:

— O dios que haremos!! —Se pone nerviosa y mira para los lados buscando una salida— No lo pueden ver a él, no joder a él no, se joderá su carrera

La sacudo un poco para que se calme.

—Oye, de quién estas hablando?— levanto una ceja confundido

— Alan!! De Alan, su carrera es oficial de policía y no puede estar implicado en esto. Tenía que haberle escuchado

—Oh— digo apenas— Pff no le va a pasar nada...

—¡Hey! Ustedes dos, nos acompañan a la estación de policía, quedan bajo arresto mientras sus padres van a buscarlos— dice un policía acercándose a nosotros. Iba a abrir mi boca pero el saca unas esposas y me las coloca

—Hay dos más, traigan más esposas— Le dice a sus compañeros quienes no tardan en hacer lo mismo con Alan y Victoria.

—Valla noche— ironizo

— Si mi padre se entera me va a matar Christopher!!

Me dice algo alto para que le escuche.

—Yo no te obligue!— le grito antes de que me metan a la patrulla y a los otros en otra, saco la cabeza por la ventana— Nos vemos tras las rejas, mi niña— me burlo

Victoria ❤:

— Alan! Perdóname en serio perdóname! Yo ...

El chico está medio dormido cuando le meten a la patrulla, solo hace una señal con las manos restando importancia. Todas las patrullas arrancar, cuando íbamos en la carretera nos encontramos con varias grúas y camiones grandes que me imagino será para llevar los carros a los patios.

—Me cago en la puta— mascullo.

El viaje fue corto hasta que llegamos a la estación, son más de las 2 de la mañana, todos los policías de turno se nos quedan viendo por el montón de adolescentes que entramos, a mi me meten en una celda, para mi mala suerte con Isabella, Erick y Christopher.

— Chris...

Corro y lo abrazo.

— Y Alan? Joder mañana estaré muerta! Papá me va a castigar! No se puede enterar...

Hablo sin sentido muchas cosas

—Deja el drama, niñata, te vuelves estresante— masculla entre dientes Isabella

—Creo que esta en la celda de al lado con Anto— responde Erick a mi pregunta.

—Mis tíos nos van a castigar, ¡puta madre, los autos!— niega varias veces Chris

Le acuno el rostro y le doy un casto beso. Por el estoy dispuesta a sacrificarme.

—Si quieres hablo con mi padre y así nos saca a nosotros de aquí sin que se enteren tus tíos.

Meto las manos en mi escote y saco el móvil.

— Siempre lo pongo allí en casos de emergencia

Se encoje de hombros. Un guardia llega de inmediato

— Señorita entregueme ese por favor, al igual que todos, pongan sus pertenecias en esta recipiente— abre la celda, pasa por cada uno de nosotros esperando que depositamos las cosas ahí.

—Aja, ahora que?— Me sienta en sus piernas, el guardia revisa que no tengamos nada más y se va.

— Solo queda esperar que venga el oficial a buscar a la persona que llamará