Mi salvación eres Tú

Capitulo 42: Planes

*Christopher 💙:

Resumir mis días últimamente en una sola palabra sería: dolor. Siento un dolor indescriptible en mi pecho, lo sucedido no fue una simple cosa de adolescentes, fue más allá de un jodido insultó. No soy del que le gusta admitir que cometió un error pero, en estos momentos la culpa y el arrepentimiento me esta carcomiendo por dentro, de manera lenta y dolorosamente.

Antonella ha estado conmigo desde la pelea con Victoria, Erick es el único que a ido al instituto solo algunos días. Me comentó que veía a Victoria pero prefería evitarla para que no preguntara por mi y se lo agradezco. La visita al psicólogo no estuvo tan mal, la que me acompaño fue Anto, me toco llevármela a rastras porque no quise ir solo, el psicólogo me recetó algunas cosas y me dio unos consejos que debo tomar en cuenta.

El año no se si lo reprobe pero no creo que eso pase, ya llegaron las vacaciones y con ellas mi abrumacion. Erick me recomendó ir a la playa para que lo tomara con una terapia y distracción, creo que voy a tomar su consejo.

Me encontraba jugando con Luka en el patio cuando Antonella asoma su cabeza con una sonrisa.

—Voy a salir, no tardo. No hagas estupideces— me señala haciendo mala cara, río y asiento, ella desaparece de mi vista.

Levanto a Luka a la altura de mi rostro, a crecido solo un poco y esta bastante imperativo— ¿Qué será de la vida de tu mamá?— digo triste y el perrito solo ladra

Victoria ❤:

Ha pasado ya una semana desde que Christopher y yo discutimos. El no me ha llamado, no ha venido. Mi orgullo me impide ir a arreglar lo que sea que teníamos. Se que no hice nada malo, pero lo que más me duele es que he pasado todo esto sola. Antonella no ha llamado ni una sola ves para ver cómo me encuentro, de seguro él está mal.

Mi vida se ha vuelto una rutina, me levanto, me aseo, me visto y desayuno para luego ir al colegio. Ya hoy salimos de vacaciones. Si me preguntan que si en ese tiempo de colegio no los he visto, la respuesta es no. Ellos no han ido y Erick se presentó un día pero apenas me vió huyó de mí.

— Al fin libre de la escuela.

Me tiró en el césped del jardín y cojo mi libreta de dibujos. Así paso horas hasta que ya en mi habitación siento que tocan el timbre.

Bajo sin deseos hasta la puerta y la abro. La señora que me hacía compañía, le pedí que se fuera a unas vacaciones. No estaba de ganas para que me viera llorar por cada rincón de la casa.

— Antonella! Valla sorpresa

Exclamó

—Puedo... puedo pasar— pide nerviosa

— Claro sabes que eres bienvenida

Pasa por mi lado para sentarse en uno de los enormes sofá de la sala, pone sus manos en su regazo y empieza a jugar con ellas.

—¿Cómo estás?

— He estado peor, así que no me quejo. Y tú cómo has estado?

—Perdón, perdóname por no estar cuando más me necesitabas— murmura por lo bajo agachando su mirada. No me gusta verla así, ahora comprendo que él debió haberla pasado muy mal cuando ella no pudo hacerme compañía.
Me pongo de pie y le abrazo

— Tu no tienes culpa de nada Anto.

—Claro que sí, al menos debí llamarte o decirle a Erick que viniera a verte— me corresponde el abrazo— Han sido días difíciles para todos, en especial para ustedes dos

— Erick me ignora, intente hablar con el y se escabulle de mi. Como está él?

Digo sabiendo que entenderá de quién hablo

—La está pasando realmente mal. No recordaba la última vez que lo vi así o peor, ni cuando la perra de Isabella lo dejo, en fin— suspira— la semana pasada fue al psicólogo...

— En serio, eso es exelente. Que le dijeron? Anto debes prometerme que no le dirás qué pregunte por Él!

—No le diré. Pues no mucho, le hablaron y aconsejaron, sinceramente me perdí a media conversación porque tenía un jodido sueño, él me obligó a ir. Si hubieran ido ustedes dos la habrían pasado genial— pongo mis manos encima de la suya

— Creo que al final el destino nos separó, no crees? Él no confío en mí.

Una lágrima rueda pero la limpio rápido

— Aún lo pueden remediar, habla con el

Me da gracia lo que dice

— Sabes que no lo haré. Él me ofendió Antonella, me trató de ofrecida cuando sabe perfectamente que no soy así. Ni siquiera tuve la oportunidad de explicarme

—Yo se como es Christopher, y se también como es cuando tiene rabia, no lo voy a justificar más. Que has pensado hacer para estas vacaciones?— indaga un poco

— Estar en casa acostada en mi camita viendo Netflix

—Vaya planes— rueda los ojos— No quieres ir a la playa, retomar ese plan?— pregunta esperanzada

— Irás tú también ? Creo que es buena idea y así despejó mi mente, pero me da sentimientos porque ese era nuestro plan juntos.

— Yo no iré, ese plan es solo tuyo y de él claro, pero anda, anímate— le doy un leve empujón— Él no irá— miento

— Supongo que iré sola...

No le gusta esa idea, pero mientras que sea para despejar estará bien todo

—No iras...— se quedó callada — Cambiemos de tema, cuando tenga el tiquets te lo envío. Por otro lado, cuando quieres que te traiga a Luka o tu vas por el?— levanto una ceja

— Me lo puedes traer mañana? Me gustaría llevarlo conmigo, claro si Christopher lo permite.

— No creo que lo haga, al menos no si esta dolido contigo. Haré el intento de hablar con él, ese perrito es su adoración, no te imaginas como se ven de tiernos los dos

— Anto porfa no me digas esas cosas que me da nostalgia, yo le amo. Aún me cuesta asimilar que ya no le tengo. Te quieres quedar y hacemos noche de chicas?

— No llores, si lloras me harás llorar a mi— me levanto del sofá— Me llama la atención, pero no traje ropa ni nada, además de que Christopher no sabe que estoy aquí— hace una mueca

— Entiendo, será en otra ocasión. Acuérdate de hacer todo lo posible para ver a Luka.

—Esta bien, mañana lo puedo traer un rato al escondido de Chris— comenta feliz— ¿Te parece?

— Me parece bien. Aunque no creo justo que sea a escondidas, si yo lo adopte también.

—Yo mejor me voy— anuncia— Nos vemos pronto, por favor no te abrumes que todo pronto se va a mejorar entre ustedes dos

— No creo eso Anto. Cuando no hay confianza no hay relación.

Me paro para llevarla a la puerta.

Antonella 🧡:

Si todo sale como tengo previsto y Erick me ayuda mi plan dará resultado. Después de un rato de caminata llego a mi casa, entro y cierro la puerta detrás mio.

—¡Christopher!— lo llamo dejando las llaves en la mesita de la entrada.

—¿¡Que¡?— responde desde la sala.

—Cuando te vas de viaje— llego a su lado, veo a Luka en el suelo y lo cojo para darle mimos

—Creo que pasado mañana, Erick no me a confirmado nada aún. ¿Por qué?— enarca una ceja

Dejo el perrito en el sueño y voy a la cocina— Simple curiosidad— me encojo de hombros— ¿Hamburguesas o pizza?— pregunto tomando el teléfono de la casa para llamar

—Si mi tía no regresa pronto me vas a engordar— se burla— Quiero Hamburguesa— dice después de que lo  acribille con la mirada

—Bien— llamo y hago el pedido.

En eso transcurrió la noche: comer, hablar y ver películas. Agradezco que no me preguntara a donde fui en la tarde porque de seguro se enojaria bastante