Creo que la expresión de "Mariposas en el estómago" se me había quedado corta. Sentía como si 500 dinosaurios bailaran en mi estómago, literalmente.
Al llegar a nuestra casa, Scott se fue a su habitación a descansar, y yo iba a subir las escaleras también, si Stiles no me hubiera agarrado la sudadera y echado hacia atrás.
-O...oye...Yo...-Dice rascándose la nuca.-Lo de antes...
-¿Sí?-Noto mis manos temblar.
-Que...Me ha gustado.
Sonrío y me acerco más a él.
-Y a mi, Stiles.
-Vamos a repetirlo.-Entonces me coge la cara y se inclina hacia mí, posando sus labios en los míos, con cautela. Yo dejo caer mis manos en su nuca.
Nos separamos por culpa del dichoso oxígeno y le miro a los ojos. Sonríe y yo me río.
-Lia, ¿ querrías sal...?
Entonces escuchamos un portazo arriba, que corta la frase de Stiles. Me giro y echo a correr por las escaleras, seguida de Stiles.
-¿¡SCOTT!?-Grito entrando en su habitación.
Nada. Su silla del escritorio está torada en la alfombra y su escritorio, ligeramente movido a un lado. Corro a la ventana, que está abierta y miro. Hay marcas como de haber arrastrado algo. O a alguien.
-Ha tenido que ser...-Masculla Stiles dando vueltas por la habitación.-¡Joder! ¡Seguro que fue él!
-¿Quién? ¿Quién, Stiles?-Digo mirando como da vueltas.-¡Estate quieto! ¿Quién ha sido?
-¡Derek Hale! ¡Estoy seguro! Esto está mal, muy mal...-Se lleva las manos a la cabeza y suspira.-Tenemos que ir al bosque.
-Pero, ¿en serio Derek Hale? Pensé que se había ido cuando ocurrió el incendio...
-Ha vuelto. Estaba allí cuando mordieron a Scott...Joder joder...Ven, vamos.-Me coge la mano buena y tira de mí para acompañarle. No pienso dejarle solo, así que me dejo arrastrar.
Caminamos por la parte de atrás de mi casa y en poco tiempo estamos en el bosque. Sé que a uno o dos kilómetros se encuentra la antigua casa de Derek Hale, aunque no sabía que había vuelto allí. Stiles caminaba delante de mí, mirando de vez en cuando para ver si le seguía.
-Ahí es...-Dice sin aliento.-¿Ves algo?
-Absolutamente na...Oh, espera.-Veo una figura moviendose de un lado a otro en la planta baja de la casa.-Ahí, segunda ventana a la derecha.
-Es él, sin duda.-Susurra Stiles.-Vamos.
Nos agachamos un poco para evitar que nos vean y llegamos a la puerta de la casa. Stiles me mira y yo asiento, esperando que intente abrir la puerta cuidadosamente o algo.
Bueno, pues imaginaos la cara de idiota que se me queda cuando Stiles se endereza y pica con todas sus fuerzas a la puerta. Se me cae el alma al suelo y cuando voy a echar a correr, la puerta se abre.
-¿Tienes a Scott?-Pregunta Stiles, con una sonrisa.
Miro a Derek Hale, que aoarece detrás de la puerta con su cara de pocos amigos. Me mira y alza una ceja.
-Es su hermana, ¿le tienes o no?
Derek hace un gesto con la cabeza para que entremos y empieza a caminar por la casa.
-¿Os conocéis?-Susurro a Stiles mientras seguimos a Derek.
-Tuvimos un pequeño encuentro hace unos días, nada especial. Pero él y Scott han...
-Aquí está.-Nos corta Derek señalando una puerta con la cabeza. Me mira y luego a Stiles.-¿Es ella de fiar?
-Vamos, Hale, no dirá nada.-Stiles pasa por delante de él riendo.
-¿Acaso ella no sabe hablar?-A Stiles se le quita la sonrisa, mira a Derek y luego a mí.-Quién eres.
-Lia McCall, hermana de Scott. Sé lo de mi hermano. No diré nada a nadie, en serio.-Digo y él gruñe. Se acerca y me mira desde muy cerca.-Lo digo de verdad, sólo quiero proteger a mi hermano.
Derek me mira a los ojos, y aunque me es muy difíl mantenerle la mirada, lo consigo, y con otro gruñido se aleja de mí y mira a Stiles.
-Tú y ella tomaréis unos pequeños entrenamientos conmigo, si es que queréis ayudar al otro.-Dice y nos señala.-Ambos.
-Por mí, bien.-Digo firmemente. Derek me mira, alza una ceja, y por un momento juraría que le ví sonreír.-¿S...Stiles?
-S...Si...O sea, por qué no, ¿no? Eh...¡¿Scottie?!-Stiles entra en la habitación y Derek y yo nos quedamos mirándonos. O mejor dicho, él se queda mirándome.
-¿Quién te hizo eso?-Pregunta señalando mi brazo.
-Scott.
-Ya veo...¿No vas a entrar?
-Eh, si, uh, gracias...
Entro en la habitación. Scott esta tirado en el suelo, respirando con fuerza. Stiles está a su lado.
-¿Scott? ¿Qué te pasó?
-Lia...Stiles...Ha...Hay...-Balbucea Scott.
-Hay un alpha.-Me giro y veo a Derek en la puerta.-Por eso necesitais entrenaros, los tres. Tú, necesitas aprender a ser un lobo, tu amiguito, a ayudarte, y tú, chica, a protegerles, porque esos dos solos no van a ningún sitio.
-¡Eh, yo puedo defender a Scott perfect...! Vale, ya me callo, si, perdón Derek.
-Cuando pueda andar, iros. No quiero problemas. Ya os encontraré cuando os necesite.
Trago saliva y Derek se va. Suspiro aliviada y ne agacho ante Scott. Tal vez Derek sólo quiera ayudarnos, pero de momento algo me dice que no es una buena compañía.