Fuck Mixer

Declarate con un Pocky / SuperLanten

Seguramente como cualquier perdona con cultura sabrás lo que es un Pocky y para que sirven, no curioso de este escenario es la tensa relación que viven de los más grandes héroes de la Liga de la Justicia, por un lado el Himbre de acero y por el otro Linterna Verde.

Clark Kent y Hal Jordán una pareja más que imposible de creer, no por nada cualquier fan del SúperBat y el Flashlantern te diría que pareja más dispareja que esta no existe, que incluso el Batlantern es más real y Canon que ver a Superman ir tras de Linterna verde en plan amoroso.

Yo también lo creía así hasta que...

– ¿Qué?.– Preguntó un confundido Superman.

— Declarate con un pocky.– Respondió Chica Halcón al hombre de acero, mientras este la miraba como si a la chica alada le hubiera salido otra cabeza.

– No puede ser tan complicado.– Dijo Diana un tanto aturdida.

– Es el día del amor y la amistad, la ocasión perfecta.– Dijo John Stewart.

– No lo sé chicos, Hal no es una chica y aunque es más fácil de tratar que Batman... eso no quita que esto parezca una locura.– Expresó Superman.

– Bueno te hemos dado miles de ideas y ninguna te parece, que si muy romántico, que no quieres asustarlo, que muy directo, que no quieres vigilarlo aunque acá entre nos sabemos que si quieres.– Dijo la pelirroja logrando que Clark se sonrojara.

– Cof, cof ya entendí.‐ Dijo el hombre de acero abanicandose un poco.

— El plan raya en lo absurdo pero a Hal le gustan las cosas así y tú eres perfecto para hacer ese tipo de cosas que a él le gustan.– Dijo Batman dirigiendo una mirada severa a todos los presentes.

– Bien ahí lo tienes, Batman apoya el plan de Shayera así que no dudes más y ve por tu hombre.– Dijo graciosamente la mujer maravilla.

– Si tienes razón, lo peor que podría pasar es que me diga que no.– Dijo Superman algo tímido.

– Bueno, ya que estas decido toma esto y ve por él, según se el chico esta el ala  Oeste salón 4.– Dijo Shayera entregando una caja de Pockies a Superman, junto a una cajita bien envuelta y una tarjeta.

.– ¿De dónde sacaste esto?, y ¿Por qué sabes dónde está Hal?— Preguntó un asombrado Clark.

— Es mejor que no le preguntes, la respuesta podría resultarte trashumante.– Dijo Batman acompañando a Superman para que saliera de la oficina.

– Bien, ella no lo diría frente a ella pero le tengo mucho miedo.– Dijo Superman con una gota en la sien.

– Aunque te parezca imposible, a veces yo también le temo.– Dijo Batman ante la mirada llena de asombro por parte del hombre de acero.

Tras una ligera Conversación, por fin llegaron a la sala mencionada por la pelirroja.

– ¿Estás listo?– Preguntó Batman.

– No, pero ya no hay tiempo para arrepentirse.– Respondió nervioso el hombre de acero, así que sin más entro a la sala y en efecto descubrió a Hal que se encontraba revisando unos planos con ayuda de un computador.

– H...ho...Hola Hal.– Saludo nerviosamente el mayor.

– Oh, hola Big Blue– Saludo animosamente el castaño.

– Yo... pues... Yo.– Trato de decir Superman con el rostro más rojo que una manzana ante la mirada atónita de Hal.

— Esto es patético.– Dijo Shayera observando el monitor.

– No seas cruel, démosle tiempo– Dijo Diana tratando de animar a su amigo en la distancia.– Afrodita dale valor.– Añadió al notar como Clark comenzaba a temblar.

– ¿Tú qué?.– Preguntó el linterna acercándose a su amigo quien sudaba más que una gorda en un olla.

— Yo... yo te traje esto.– Dijo Superman extendiendo el regalo envuelto en dirección a Hal.

– ¿Wow, gracias no debiste molestarte!.– Agradeció muy feliz el linterna mientras Superman recuperaba el aliento.

Pero luego sintió un fuerte impulso así que sacó la caja de pockies y se colocó uno en la boca y se acercó cual depredador a Jordán quien muy ocupado observando la bolsa en donde estaba envuelto su obsequio, ni siquiera se fijo.

Pronto Jordan sintió que alguien invadió su espacio personal desde la espalda, sintiendo un cálido aliento chocar contra su cuello causando un estremecimiento en todo su ser, por lo que extrañado se dio la vuelta para quedar de frente a su atacante, grande fue su sorpresa al notar como el líder de la liga de la justicia con sus 1.98 cm de altura le observaba con una mirada sensual y un pocky en los labios.

– Ammm ¿Estas bien Superman?.– Preguntó el castaño sonrojado.

– Lo estaré si lo tomas. – Respondió el mayor colocando el pocky más cerca de Jordán logrando que este se sonrojara aún más.

//Jordán no seas cobarde, tan solo es un pocky// se decía mentalmente el castaño.

Jordán decidió tomar el pocky y desde ese entonces un beso, una caricia, un obsequio y una larga e intensa noche dr pasión fue el inicio de una extraña pero amorosa relación...