★.𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 𝕯𝖔𝖘.★

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─Y aquí está─ dice URSS mientras le mostraba una caja a su hija Bielorrusia.

URSS paso unas horas buscando en el garaje pero por fin encontró aquella caja que le había regalado su abuelo antes de que tomara un avión y desapareciera sin dejar rastro... pero era rico así que el y su padre vivieron bien por un tiempo hasta que empezó a trabajar en una empresa dedicada a la inmobiliaria moderna y ganar de su propio dinero, casarse y tener 4 lindos hijos.

─¿Que es eso padre?─ pregunta la niña a su padre ya que nunca en su vida había visto un aparato extraño.

─Esto es un reproductor que usaban en los años 50's, solo que este es especial ya que es único en su tipo.

─¿Y por qué es único en su tipo?

─Eso se lo diré a todos cuando tus hermanos lleguen de la escuela─ en eso escucha la puerta principal abrirse y escuchar las voces de sus hijos mayores ─Lleva a tus hermanos a la sala, ¿De acuerdo?

─De acuerdo.

Bielorrusia a pasos cortos va hacia a sus hermanos y les insiste a que vayan a la sala, Rusia en ese momento estaba en las escaleras ya que de nuevo se alistaría para ir a la biblioteca, Ucrania y Kazajistán aceptaron de inmediato pensando que les había comprado una maquina de videojuegos que le habían insistido desde el año pasado.

Ya los 4 niños en la sala y esperando a su padre sentados en el sillón familiar, llega URSS con una enorme sonrisa, que al instante hace sospechar a Rusia porque esa sonrisa solamente lo muestra cuando logra consumir por completo una empresa en quiebra para quedarse con sus productos, remodelarlos y venderlos mas caros.

─Muy bien niños, los he reunido por una buena razón y esa es esta─ sale de nuevo de la saña y regresa junto con el reproductor ─Este reproductor es para Rusia, es antiguo y delicado así que Ucrania no quiero que andes realizando tus hechicerías, y tu Kazajistán abandona el ático por completo ya que en tu anterior experimento de ciencias casi incendias la casa y-

No pudo terminar de hablar el soviético debido a que un fuerte grito agudo lo desconcentro, tomos miraron al origen y se trataba de un Rusia emocionado ya que frente a el estaba un reproductor que tanto quería tener en su casa y podría usarlo, no como en los cines porque en uno lo vetaron por andar husmeando en cuarto de proyección.

─¡Padre, dime que no es un sueño y lo que veo es un reproductor de películas!

─Lo es y- ─ de nuevo fue interrumpido por el chillido de Rusia, el cual se levanta rápido del sillón y rodea y admira el proyector ─Rusia tranquilo.

─¡No puedo, esta es la mejor sorpresa que hayas traído a la casa! Por cierto, ¿Dónde lo conseguiste? Lo estuve buscando por todas partes.

─Era de tu abuelo. ¿Les he contado que su abuelo era director de cine?

─Eso explica el fanatismo de mi hermano con las películas viejas─ dice Ucrania decepcionado que no sea el videojuego que tanto quería.

─¿¡Nuestro abuelo era director de cine!?─ pregunta Rusia con el corazón al mil por hora por la emoción que estaba pasando por esos segundos de su vida.

─Si, de hecho, las películas que tienes fueron hechas en su recorrido por América Latina. Hizo 40 películas y gano varios Óscares y premios locales con la mayoría de ellas.

En ese momento Rusia se tomo el tiempo de enderezarse, subir a las escaleras, ir a su cuarto, recostarse en su cama, poner una almohada en la cara y empezar a gritar como si fuera una niña que se entero que le gustaba a su crush.

𝄞◦♱●Sacandote a la realidad●♱◦𝄞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora