Llévame al principio #Harco#

Llévame al principio

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—- Serás un gran padre dragón.... Scorpius tendrá al mejor papá....no dudes de eso....

—- Harry....no podré....no sin tí...

—- Si... podrás y quiero que lo hagas por mi....solo enséñale las cosas buenas....las que le servirán en la vida....no malgastes su aprendizaje en tonterías como aquellas tradiciones sin sentido que tú sabes....y también enséñale cosas muggles...no pongas esa cara! Le servirán Draco.... hazlo....hazlo pensando en mi, cada vez que estés con  nuestro bebé, piensa en mí....yo siempre estaré a su lado...

***

El funcionamiento del giratiempo de mi padre no era como cualquier otro. Este funcionaba girando manualmente una pequeña rueda de metal situada al costado para fijar la fecha exacta a dónde se quiere viajar y con las manecillas del interior se pone la hora del día elegido. Así las posibilidades de viajar a la fecha y al horario deseado eran precisas. El mecanismo es muy parecido a los relojes que usan los muggles pero este hace cosas más interesantes. 

Después de llegar al destino, hay que poner otra vez la época donde hay que volver y la hora. Eso es una regla establecida para su uso, ya que se puede estar en el pasado solo 10 minutos, si uno se distrae y el giratiempo se activa sin haber puesto la hora y fecha de tu presente, te dejará en un constante loop reviviendo siempre el mismo momento, volviendo loco al que queda atrapado en ese tiempo. Eso le habría explicado Nott a mi padre cuando le entrego el objeto ya terminado. 

Las advertencias de usar ese fascinante giratiempo eran claras, debía programarse antes de viajar siempre. 

***

Harry dejó su taza de té en la barra de la cocina, no había querido comer nada, y eso se debía a los nervios que le causaba lo que haríamos. Después de aquella tarde en el invernadero, se pasó tres días meditando, estudiando, investigando y calculando cualquier contratiempo que tuviéramos al usar el giratiempos. 

No le había sido sencillo tomar una decisión, obviamente una de las condiciones para embarcarnos en esta locura fue contarle todo a Granger, no fue una sorpresa que pusiera el grito en el cielo, conociéndola, hasta me veía venir la frase... *Draco, eso es ilegal!!!*  Pero luego de una cena y sobremesa de 4 horas dió a regañadientes su medio visto bueno. 

Ambos comprendíamos porque Granger se puso algo neurótica con el asunto, es que esto no era algo para tomar a la ligera, ella estaba preocupada por si algo nos pasaba y no podríamos volver, ¿qué haría Astoria con el embarazo si no lograbamos regresar? eso me hizo dar cuenta  que Tori también debía saberlo, y lo hicimos, se lo dijimos una mañana que acordamos para desayunar en el Londres muggle, entonces hablamos con Tori del giratiempo, al principio se quedó sin saber que decir, pero después hizo las mismas observaciones que Granger, y nos expresó que tenía miedo...pero que confiaba en nosotros. 

Debo decir que yo también tenía miedo, me aterraba la idea de que algo le pudiera pasar a Harry en el proceso. Pensé en él, lo amaba, no solo por ser hermoso y encantador, sino también porque se había convertido en mi mejor amigo, en la fuente de mi estabilidad. Después de un día difícil, siempre podía contar con sus palabras que pareciera saber lo que debían decir. Harry era todo para mi, y todavía no caía en que algún día lo perdería, pero quería pensar en eso  otro mañana, no hoy, no este día. 

—- Estás listo león?—-un destello de picardía se reflejaron en sus ojos—-Harry....está todo bien?

—-Si... solo estoy emocionado—-contestó con tranquilidad.